Pasaron casi una semana en el sótano, esperando a que Taeyang despertara. Hwiyoung no quiso alejarse de su lado y tampoco permitió que lo movieran, no quería arriesgarse a que algún rayo de luz colado lo dañara.
Así que Rowoon y Zuho bajaron varias cobijas y almohadas para improvisar una cama en la que ambos, Taeyang y Hwiyoung, pudieran descansar durante todo aquel tiempo, la joven criatura no se separó de él en ningún momento mientras la conversión se completaba.
Zuho le ofreció su sangre en una ocasión, pues él incluso se negó a salir a cazar para no dejarlo solo, y aunque había resistido bien las primeras noches gracias a la sangre de Dawon, al final terminó por aceptar un par de tragos de la nutritiva sangre para poder mantenerse a su lado.
Fue hasta el séptimo día, en cuanto el sol se puso Hwiyoung despertó como habitualmente lo hacía, aunque su propio corazón comenzó a latir él solo se quedó allí recostado, con los ojos cerrados como si aún fuera un mortal que podía dormir de forma tranquila.
Tardó algo de tiempo en percatarse del otro sonido que lo acompañaba en el cuarto, justo al mismo tiempo que se daba cuenta que su lado estaba vacío.
Abrió por fin los ojos, completamente sorprendido, sólo para encontrar a su Taeyang parado a los pies de la improvisada cama, observando con sorpresa sus manos.
一¿Tae? 一preguntó con un susurro.
De inmediato Taeyang volteó a verlo, sus ojos brillantes tenían aquel ligero color violeta claro, solo un instante después ya lo tenía encima de sí, tan rápido que cuando quiso darse cuenta ya tenía los labios del recién converso chocando con los suyos.
Contestó con la misma efusividad, luego del temor que había pasado él mismo tenía demasiada hambre de su Taeyang, de tenerlo así a su lado.
Pasaron así unos maravillosos momentos antes de que Taeyang se levantara un poco para separarse.
一Hwiyoung ¡Esto es increíble! Es muy curioso, la fuerza que siento, la energía, me siento como si hubiera tomado varios expresos seguidos.
El de cabello largo sonrió un poco, recordaba bien aquella sensación al despertar.
一Ven, vayamos a que pruebes un poco de tu nueva naturaleza, eso te ayudará. 一le instó, levantándose.
Taeyang tomó la mano que le ofrecía, ambos subieron a increíble velocidad hasta la azotea del edificio, donde el mayor se quedó sorprendido por lo clara que era su vista entonces. Estaba maravillado con la cantidad de luces de la ciudad, cada una bien definida, y cuando levantó la mirada se quedó embelesado por la cantidad de estrellas que resultaban incontables en su inmensidad, se hubiera quedado allí embobado si Hwiyoung no le hubiera llamado.
一Taeyang, sígueme.
Se había subido a la baranda de la orilla, y cuando el mayor volteó a verlo dio un largo salto hacia el edificio de al lado.
Taeyang no lo pensó mucho, apenas tomó impulso en la misma barda para lanzarse detrás de Hwi. Estaba tan fascinado como intrigado por la velocidad y la altura que podía alcanzar, así como por su falta de miedo ante una posiblemente mortal caída.
Hwiyoung apenas se detuvo en el siguiente edificio para tomar más carrera y saltar nuevamente, seguido de cerca por el otro. Podía escuchar su risa como si fueran finas campanillas tocadas al aire helado.
Por algunos momentos recordó aquellas primeras noches, donde había corrido de la misma manera con Sunwoo y Bobby. Sin embargo en aquella ocasión era diferente, pues tenía a Taeyang a su lado.
Siguieron corriendo así por un tiempo que ninguno de los dos podría determinar, disfrutando de la velocidad que les daban sus poderes.
En algún punto llegaron a un pequeño parque oscuro, allí Hwiyoung disminuyó un poco la velocidad, lo que ocasionó que Taeyang lo alcanzara y chocara contra él a lo que ambos terminaron recostados en el pasto.
Taeyang aún reía, había quedado encima del menor y lo sostenía por los hombros, como si lo hubiera estado cazando. Hwiyoung también reía, se notaba agitado por la carrera y una vez que lo tuvo cerca se levantó un poco para besarlo en los labios. Taeyang respondió gustoso a aquel beso.
Estaban ambos inmersos en aquel idilio personal cuando un olor distrajo al mayor, y al segundo de percibirlo ya estaba de pie, mirando en esa dirección: era un olor cálido y delicioso, como si se tratara de un delicioso estofado.
Pronto sus nuevos sentidos le indicaron que había alguien cerca, un par de jovencitos al parecer. Olían demasiado bien, toda su nueva naturaleza le decía que aquello sería un delicioso manjar, estaba a punto de lanzarse sobre ellos cuando una voz lo distrajo.
一¿Taeyang? ¿Qué ocurre?
Hwiyoung se había parado a su lado, pero el recién converso aún mantenía la mirada en los chiquillos que no podían ni presentir el peligro.
一Hwi, hay algo, alguien...
一Tranquilo Tae, estoy aquí. Mírame, estoy aquí.
Taeyang seguía bastante tenso y tuvo que poner toda su fuerza de voluntad para desviar la cabeza de aquel delicioso manjar. Una vez que sus ojos se posaron en el de cabello largo pareció que parte de su tensión se evaporaba.
一Está bien Taeyang, no hay problema. Esta es tu naturaleza, pero está bien, nos alimentaremos más adelante, cuando la euforia pase ¿sí?
Taeyang respiró profundo un par de veces, se concentró en el olor pacífico de su Hwiyoung, su tacto para entonces tibio sobre sus brazos. Hwiyoung conocía bien aquella sensación, él mismo se había alimentado en medio de ese frenesí inicial, él y Sunwoo habían creado una matanza por su falta de control, no quería eso para su Taeyang.
一Volvamos a casa, por favor 一pidió Taeyang con voz bajita.
Hwiyoung asintió, lo jaló para darle un beso corto y sin soltar su mano lo guió para salir caminando con tranquilidad del parque en dirección opuesta a la parejita que jamás supo el peligro en el que estuvieron.
Conforme se alejaban Taeyang se fue tranquilizando, esa euforia inicial dio paso a una curiosa paz que sentía gracias a la mano fuertemente sujeta de su acompañante. Inconscientemente iban evitando las partes más concurridas de la ciudad, caminando por las calles solitarias y dormidas.
De vez en vez Taeyang se ponía algo nervioso al percibir algún olor particularmente llamativo, aún así solo bastaba aquella presión en su mano para centrar su mente y continuar con el mismo paso tranquilo.
一¿Sabes? 一comentó Tae de pronto, mirando el cielo一. Mientras estuve muerto tuve algo de tiempo para pensar, y creo que me gustaría viajar.
一¿Viajar?
一Sí, quiero viajar por todo el mundo, conocer todas esas cosas nuevas que hay. Antes no podía hacerlo por el miedo que tenía, porque no quería alejarme de la protección de Rowoon. Pero ahora, con esta nueva fuerza que siento, quiero aprovecharla y salir a conocer todo el mundo.
Hwiyoung se quedó pensándolo algunos momentos, imaginando ese maravilloso futuro que le pintaba.
一De acuerdo, si eso es lo que deseas lo haremos. Solo demos algunas noches para que tus emociones y tus instintos se normalicen, el estar en un entorno conocido te ayudará... y si ocurriera algo más, también la presencia de Rowoon será de utilidad.
>Una vez que estés completamente tranquilo, recorreremos el mundo juntos ¿de acuerdo?
Taeyang aplaudió emocionado, y con aquella velocidad sobrenatural que aún no controlaba del todo, se arrojó contra los brazos de su Hwiyoung para plantar un largo beso en sus labios.
ESTÁS LEYENDO
Venganza feérica (ZuRo / TaeHwi)
FanfictionZuho tenía solo 15 años cuando fue brutalmente atacado por un recién convertido Rowoon, quien perdió el control al oler su dulce sangre. Ahora, muchos años después y luego de buscarlo para poder vengarse, Zuho ha encontrado su oportunidad al descubr...