Habían pasado 3 semanas desde que Zhan y Yibo vivían juntos en su sueño de amor. Ambos se acostumbraron rápido a su nueva rutina. Su día empezaba al despertar abrazados, con los primeros rayos del sol. Yibo conducía 2 horas para llegar a su trabajo, mientras Zhan cuidaba de su hogar, regaba las plantas, cosechaba sus verduras y leía las noticias del mundo.
Todo era bello, incluso al terminar el día, Yibo corría a los brazos de su Zhan y confirmaba que era real, que estaban juntos de nuevo. La luna los acompañaba mientras se dedicaban palabras y miradas de amor. Luego al dormir compartían algunas inocentes caricias y un par de besos evitando los labios. El inmenso placer de tener a Zhan ahí, era preciado para Yibo como para resistir su deseo de comer sus labios, y él en general. Aunque no podían negar que ya se habían divertido un par de veces antes, no había necesidad de besarse para disfrutarse.
Cuando un nuevo día había comenzado, Zhan se había decidido a limpiar el lugar, darle un nuevo toque. No es que no le gustara el gusto de Yibo, pero todo el lugar parecía un santuario a su persona, y como culpar a Yibo. Lo primero había sido mover los muebles, su experiencia viviendo con una familia elitista se había conservado y movió cada cosa en la casa para mejorar el equilibrio de colores.
- ¿Sigues haciendo eso? – Yibo sorprendió a Zhan abrazándolo por la espalda y dejando un suave y dulce beso en su mejilla
- Si, sólo me falta mover esas cajas. – Zhan apuntó a una esquina. - ¿Qué son?
- Son... tus cosas, tu padre las tiró a la calle, pero yo las recogí. Durante meses los guardé en esas cajas, y cuando me mudé aquí hace 2 años, intenté acomodarlas en algún sitio, pero, era demasiado para mí. – Yibo se mecía de lado a lado abrazado de su pareja
- Entonces tal vez sea mejor no tocarlas. – dijo Zhan
- ¿Por qué? – preguntó Yibo
- Porque quizás pueda encontrar algún recuerdo, es mejor ser precavidos. – Zhan se alejó de los brazos de Yibo. - ¿Ya comiste?
- No, ¿quieres que ponga la mesa? – Yibo recogió las cajas y las puso sobre la mesa para alejarlas de Zhan
- Si, por favor. – Zhan terminaba de acomodar los cojines de la cama
Yibo comenzó a extender el mantel y colocar los platos y cubiertos sobre la mesa con una enorme sonrisa.
- Mañana es mi día libre. – comenzó a hablar Yibo desde la cocina. - ¿Quieres ir a algún lugar en específico?
- ¿Podemos ir a comprar unas sábanas nuevas? Las noches son más frías y... - Zhan suspiró cansado al ver que las cajas que Yibo había puesto en la mesa, habían caído, dejando todas las cosas del interior regadas en el suelo.
- Zhan
- ¿Qué pasa? – dijo Zhan deteniéndose a pocos pasos del primero objeto en el suelo. - ¿Yibo?
Zhan estaba seguro de que había escuchado a Yibo llamarlo, pero al no recibir respuesta, Zhan quiso ir a la cocina hasta él. Sin embargo, al dar el primer paso, Zhan chocó una caja negra con la punta de su pie. Había un vago recuerdo de haber visto esa caja en algún sitio, así que sin pensar en nada más, Zhan tomó la cajita. Al darse cuenta de que podía abrirse, el chico no dudó ni un segundo en abrirla.
Zhan vio una argolla plateada, pero en un instante todo a su alrededor se iluminó y las imágenes corrieron una tras otra. Ahora que sabía quién era, cada parte se sentía aún más real, pero, sobre todo, se sentía mucho más dolorosa. Cuando al fin salió de la ilusión, Yibo entró calmado, sin saber de lo que había pasado.
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Guardian de Almas
Fanfiction"- ¿Qué pasaría si muero mañana? ¿A dónde iría mi alma? - No te preocupes, te aseguro que alguien guiará a tu alma a donde debe ir. - ¿Tú lo harás?" El deber de un Guardian es proteger y velar el último deseo de un alma. Un guardián juró anteponer...