8. Sueños Rotos

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- Aquí está de nuevo, te lo digo, esos dos debieron estar saliendo y ahora ya han terminado.

- ¿Cómo estás tan segura?

- Ve su rostro, que chico pone esa expresión cuando viene a buscar una chica

- ¿Por qué crees que hayan terminado?

- Mmmm, él debió engañarla

- ¿Cómo lo sabes?

Zhan ignoró los comentarios de las dos chicas y siguió esperando fuera del salón de clases, habían pasado semanas desde que Ruo Fei había visto a Zhan y Yibo en la biblioteca. Fei no necesitó una respuesta, los había visto besarse. Durante todo ese tiempo, Zhan intentó buscar a su amiga para darle una explicación, pero no había tenido éxito, dando lugar a rumores.

- Zhan... - Yibo tomó del hombro a su novio. – No va a salir

- Pero tengo que explicarle. – dijo en voz baja

- Dale... tiempo. – Yibo quería abrazar a su pareja, pero el lugar no era conveniente

- Tengo miedo Yibo... ¿y si dice algo?

Yibo también sentía miedo de lo que pudiera decir la chica, sería algo fatal que todos se enteraran de sus preferencias. No sólo serían una vergüenza para sus familias, por todos en todos lados, serían marcados y rebajados a los seres más bajos en la sociedad.

- Si hubiera querido decir algo, ya lo hubiese hecho. – Yibo intentó tranquilizar a Zhan. – Ven, vamos a comer algo

Yibo le hizo una señal a Zhan y así ambos bajaron al comedor, Zhan seguía viéndose decaído y muy preocupado. Yibo por otra parte no mostraba emoción alguna, pero dentro, estaba nervioso, la primer persona que se le veía a la cabeza era su padre. Aquello le hacía temblar, sólo imaginarse lo que podía hacer su padre, le daba terror.

- Zhan, amigo. – llamó Mo Liang. – ¿Por qué no me dijiste que tú y Fei andaban?

- Entonces es cierto. – dijo el otro tipo que venía con Liang

- ¿Y tú Yibo? – Mo Liang cambió de objetivo. – Estoy seguro que lo sabías, no me molesta, pero me siento excluido

- ¿Por qué terminaron Zhan?

- Si cuéntanos. – repentinamente Zhan estaba rodeado de varios chicos

- ¿Quién diría que ibas a salir con alguien como Fei?

- ¿Qué se supone que significa eso? – preguntó Yibo

- Ay, bueno. – rieron algunos. – Sin ofender Zhan, pero desde hace tiempo se decía que tú eras marica. – rieron todos

Zhan levantó la vista horrorizado, un paso en falso y sería el fin.

- ¿Qué demonios? – Yibo estaba conteniéndose

- Tranquilo hombre, solo eran bromas. – tranquilizó Liang

- Claro, ya comprobamos que eso no es así.

- Sí, es culpa de tu aspecto afeminado Zhan, deberías considerar hacer...

- ¿Hacer qué Zhu? – Yibo tomó del cuello enojado al chico. – Ve a decir tus mierdas en otro lado

Nunca nadie había visto enojado a Yibo, siempre habían conocido al tipo calmado y callado, pero claramente ese no era el chico del que se jactaban conocer

Guardian de AlmasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora