PD: Todavía te quiero [Escribiendo] ✅

Capítulo 12| La Cabaña II

Capítulo 12

Siempre he soñado durante años con este momento.

Miento.

Normalmente, siempre me lo he imaginado con una chica, hasta el día que vi a Rubén, yo pensaba que era hetero, y ni eso, yo pensaba que era asexual, ya que nunca me llegó a gustar ni atraer nadie.

Una de mis pasiones es leer, ya que la literatura me permite imaginar una escena, tener una sensación que nunca podré sentir en la vida real. Esa sensación que soñaba sentir cuando leía, se acaba de cumplir, y es mucho mejor de lo que me imaginaba, y la persona con la que siempre soñaba, acaba de aparecer en mi vida.

Rubén es esa persona.

1 MES DE CAMPAMENTO

Fuimos más veces a la cabaña, a las chicas les gustó mucho, menos a Carla, que le picó una araña y comenzó a gritar como loca. 

Esta última semana, Rubén y yo hemos estado muy unidos, pero hay una cosa que me tiene preocupado

Sexo.

Yo conozco bastante a Rubén, y él ya me ha hablado de tus anteriores relaciones, y él no es virgen, ¿Y si él quiere tener sexo conmigo? Por mi parte, yo si quiero tener sexo con él, para mí el sexo es sagrado, no quiero tenerlo con la primera persona que me diga cosas bonitas, por eso mismo quiero esperar a la persona indicada, y espero que Rubén lo sea, igualmente el sexo no es algo que planeas hacerlo, solo ocurre por el momento.

No sé que pensará Rubén sobre esto, a lo mejor él no quiere, o a lo mejor está esperando a que yo se lo diga.

-Buenos días Princeso.- Rubén me despierta y veo que me ofrece una barrita de chocolate.

Le doy una sonrisa, esta semana él ha estado muy cariñoso conmigo.

Bueno...

Ha estado de muy buen humor, al igual que yo.

-Buenos días.- señalo con mi dedo la barrita que tiene en la mano.- ¿de dónde has sacado eso?

-Se podría decir que la he cogido prestada del comedor...

-La has robado ¿no?- pregunto levantando una ceja y soltando una risa.

-Sip.- me comienzo a reír y le doy un beso corto.

 -Gracias.- él me da una sonrisa tierna de ojos cerrados.

Rubén desde el día que robó hielo del comedor, ha comenzado a robar más cosas, sobre todo comida para dármela a mí, o a veces comerla entre los dos.

-Deberías dejar de robar.- digo cruzando los brazos.

-¿Y dejar que mi novio se muera de hambre? No no, no.

Novio...

Aún no me acostumbro a ese apodo o a ese puesto tan importante en su vida y en la mía. Él me pidió que sea su novio en la cabaña, fue un poco desastre, pero con él todo es perfecto, aunque igual aún me duele la cabeza de pensar en eso...

1 Semana atrás...

-¿A dónde me estás llevando, Rubén?- digo entre risas, estoy con una venda en los ojos, lo único que siento es que estamos en el bosque, ya que siento como crujen las ramas que piso.

-¿Sabes lo que significa sorpresa?- dice entre risas.

Siento la mano de Rubén, es muy suave y seguro que con esas manos hace maravillas.

-¿Has pensado alguna vez en dejar de pensar en voz alta?, pequeño pervertido.- dice Rubén entre carcajadas.- y sí, puedo hacer magia con estas manos.- la sangre invade mis mejillas y siento que voy a explotar de la vergüenza.