PD: Todavía te quiero [Escribiendo] ✅

Capítulo 18| Cartas de despedida

Último día de campamento

JOSH

- ¡Ha sido un placer teneros este verano junto a nosotros!- dice Lia con una sonrisa en su rostro.- espero os haya gustado la experiencia, y que os hayáis divertido, que para eso habéis venido.

Todos los monitores estaban en fila detrás de nosotros, mientras estábamos en unas escaleras para que nos hicieran las fotos de recuerdo. Los mayores estábamos arriba del todo, seguido de los medianos y por ultimo los pequeños. 

Rubén pasó su brazo por mi hombro y yo le dediqué una cálida sonrisa. Por él me hubiera besado, pero le dije que no, ya que mis padres verían las fotos, y aún no saben nada. 

Mi madre llamó enumeradas veces, tantas que incluso le llamaron la atención. Siempre le contaba como me iba en el campamento. Incluso le hablaba de Rubén, pero como mi amigo.

Extrañaré demasiado a Rubén, me ha demostrado tanto en tan poco. Se podría decir que es la persona más importante que tengo a parte de Xenia. 

91...

91 días son los que he pasado junto a Rubén, Xenia y los demás.

Vine buscando amigos, y acabé con una familia. 

Aún que hayamos tenido nuestros problemas, les tengo mucho aprecio. 

Estoy demasiado nervioso, en teoría ahora tenemos que ir a un local, donde nos entregaran los recuerdos y el sobre que nos hicieron decorar el primer día de campamento. 

Se supone que según vayan viniendo nuestros padres, nos irán llamando para irnos.

RUBÉN

Cuando cogemos las maletas de las habitaciones y ordenamos todo, nos indican el camino para ir al local.

Estoy muy nervioso, no me quiero separar de Josh. Él me pidió que por favor nos despidamos antes de ir al local, ya que sus padres lo pueden ver y armar un pollo.  

Me duele tener que despedirme con un apretón de manos, y no poder besar sus labios por última vez. Pero él me lo pidió, y tengo que respetar su opinión, aunque me duela.

Antes de ir al local nos dejaron 10 minutos para despedirnos.

Rápidamente, cogí a Josh de la mano y lo llevé a unos lavabos. Él me miró con un rostro confundido.

-¿Que hac...?

No dejé que acabe.

Me lancé sobre él y junté mis labios con los suyos, ese beso indicaba deseo. Él puso sus brazos en mi nuca, haciendo que se me erize la piel. Yo le cogí por debajo de los mulsos y lo subí en el lavamanos. Él soltó un jadeo, haciendo que me excite más. 

Puse mis manos sobre su trasero para acercarlo más a mi.

Nuestras lenguas se entrelazaron, moviéndose en sincronía mientras yo succionaba su labio inferior. 

Él paró el beso, haciendo que suelte un suspiro.

-Eres un pervertido.- me dice entre risas.

-Venga.- digo haciendo un puchero.- una rapidita.

Él aparta la mirada.

-Por favor.- digo poniendo los labios como un cachorrito herido, al que él respondió asintiendo.

¡Toma!

Nunca falla

Vuelvo a  juntar nuestros labios y a disfrutar de los pocos minutos que nos quedan.