Vecino Invasor [Jaehyun] Terminada.

28. Ódiame

Abrí los ojos con pereza, estirándome a lo largo de la cama tratando de sentir al chico que se suponía había dormido a mi lado la noche anterior...

Palpé por toda la cama antes de girarme y ver que ya no estaba allí, miré hacia la ventana de la habitación, la cortina aun seguía tapando la ventana, por lo que no se podía ver con exactitud que hora del día era.

Tome a cookie quien estaba dormido donde se suponía que debía estar Jae, quizás antes de irse subió a mi lindo hurón sobre mi cama para que me despertara, pero este había dormido como la dueña.

Miré el celular, ya eran mas de las dos de la tarde, realmente había dormido bastante, un sueño profundo, reparador y tranquilo, como me sentía en ese momento... en paz.

Vi como había dejado un vaso de jugo sobre la encimera de la cocina, junto a una nota que me avisaba que pronto estaría en casa y las llaves de su apartamento para que lo esperara allí.

Sonreí, tomando el jugo que suponía estaba allí desde la mañana, pero con el frío que hacía se había conservado.

Dejé a Cookie en su camita para dirigirme hacia el apartamento de mi vecino, tenía pensado prepararle la cena antes de que llegara y sorprenderlo.

Abrí la puerta y encontré todo perfectamente ordenado, como él lo era pase por la cocina donde había dejado unas pastas con una nota para que las tomara para el dolor, le hice caso tomando la medicina.

Sé que esta mal hurgar en casas ajenas, pero sentía la necesidad de deambular por sus cosas, fue así que encontré sobre su escritorio el marco que me había llamado tanto la atención cuando fui a su casa.

Quizás lo había traído consigo entonces, al parecer era algo importante para él, aunque sabía que había una carta dentro no se podía leer puesta estaba doblada.

¿Se enojará si la saco para mirar la historia que está escrita en ella y que lo hizo querer ser medico?

Sabía que no era correcto, que era invadir su privacidad, pero de verdad sentía mucha curiosidad al respecto.

Pase mis dedos sobre el marco volteándolo dándome cuenta que este no estaba sellado y que la punta de la carta se salía de él.

Solo le echaré un vistazo rápido, pensaba mientras sacaba y la desdoblaba el papel. No era que sintiera celos en absoluto del primer amor de la persona que amaba, en absoluto.

Mire atentamente el papel escrito...

¿Cómo podría estar celosa de esta carta, de esa letra fea y esa mala redacción de una niña de 16 años?

Sonreí

Como podía sentir celos de mi misma.

Ahora que había visto el papel, recordé al chico enfermizo con quien había compartido habitación después de que me rompiera en hueso de la pierna al cuidado de mi abuelo.

Fue la primera vez que veía a mis padres de nuevo en mucho tiempo, solía verlos muy rara vez desde que me llevaron a vivir con mi abuelo y por ese accidente fue que decidieron llevarme con ellos de nuevo y un año después de ello, nació Jisung.

Había borrado de mis recuerdos de ese suceso, pues para mi fue el causante de tener que volver a vivir con papá y dejar mi vida en el campo con mi abuelo. Algo muy doloroso, por cierto.

Pero ahora ese recuerdo, era significativo para alguien y eso hacia que se volviera significativo para mí. El chiquillo que me consoló cuando le conté que no iba a poder volver a bailar por mi hueso roto y que con solo ocho años dijo que el podría llegar a curarme.