𝐿𝑒𝑝𝑢𝑠 [𝐷𝑒𝑘𝑢𝑏𝑎𝑘𝑢]

Capitulo 17

-𝐶𝑒𝑙𝑜

El celo y reproducción del lobo.

El periodo de receptividad por parte de la hembra se produce una vez al año y dura de 5 a 14 días, durante los cuales, se producirán múltiples coitos. Generalmente el apareamiento sucede a finales del invierno o inicios de la primavera.

El coito se da cuando el macho monta a la hembra por detrás, y puede tener una duración entre los 10 y 30 minutos, durante la cual, el lobo eyaculará múltiples veces, no obstante, lo curioso es que tras la eyaculación inicial, el macho levantará sus patas por encima de la hembra, de modo que cada lobo quedará mirando en direcciones opuestas. ¿Por qué sucede esto? Bueno, los lobos saben que uno tiene que cuidar la espalda del otro.

El celo de los conejos.

El conejo entra en celo entre los 4 a 6 meses de vida, y estará en celo por el resto de vida.
El macho al entrar en celo tiende a mostrarse agresivo, nervioso, tiende a morder, marcar con orina e intenta montarse en objetos o cosas cercanas.

¿Cómo es el apareamiento de los conejos?

En cuanto el macho y la hembra se ven, él iniciará la aproximación. La olerá, especialmente en la zona anogenital. La hembra puede hacer lo mismo. El olfateo se realiza con los animales quietos o moviéndose en círculo. El macho correrá en repetidas ocasiones a su alrededor, emitiendo un zumbido. En cuanto pueda, marcará a la hembra pasando sobre ella su mentón. También puede emitir orina. Si la coneja está receptiva, se tumbará para favorecer la monta. En caso contrario, puede mostrarse agresiva y escapar. El conejo la montará durante unos segundos con rápidos movimientos de pelvis. Para ello, sujeta los flancos de la hembra con sus patas delanteras y le muerde la zona del cuello. En un último movimiento eyaculará, chillará y se dejará caer al lado de la hembra.

El conejo macho es capaz de copular cada pocos minutos siempre que encuentre una hembra receptiva. Esta, por su parte, puede aceptar al macho también continuamente, incluso recién parida y mientras amamanta. Por lo tanto, no se puede hablar de un número concreto de cópulas diarias.

Era el momento.
Hoy fue un día perfecto, donde la mayoría de compañeros ha salido.
Era día sábado, no había personas en los dormitorios y los que quedaban salían afuera.

Katsuki respiró hondo, mientras miraba los condones y el lubricante.
Compró los condones de la talla de Izuku, además compró algunos con sabor.
En total, habían cuatro paquetes de condones en la bolsa más el lubricante.
Se frotó las cejas y suspiró.
Caminó hacia el baño y se preparó.

Durante varios días ha estado adaptando su cuerpo para poder recibir a semejante monstruosidad, aunque no quiera decirlo, ya había aceptado hace mucho que era él, el que recibiría, pero no significaba que esté abajo.

A investigado diversas cosas, desde como lubricar la entrada y como hallar aquel punto de placer.

Apretó los dientes mientras su cuerpo adquiría un leve tono rosado, reprimió el jadeo e insertó el tercer dedo, quizás no sea suficiente y deba agregar un cuarto.

La primera vez que se masturbo junto al nerd fue realmente vergonzoso, pero después sucedió tan constantemente que ya no le provocaba nada más que placer.

Pero esta vez sería diferente, era su primera vez.

Terminó de estirar la entrada y sacó sus dedos. Vio la hora y notó que sería bueno bañarse.
Ellos se iban a juntar en la tarde.

Relajó su cuerpo con el agua caliente y salió del baño. Su cuerpo se puso caliente en ese momento y sus características animales salieron.
Era la llegada de su celo.