Without Feelings (Ticci-Toby)

Capítulo Uno.

*Capitulo Dedicado a: Vale *

Liu POV

El viento chocaba con mi rostro mientras corría con una velocidad casi inhumana, por la mojada tierra del camino, a causa de la recia lluvia del día anterior. Ningún ruido se hacia presente en el lugar, a excepción del sonido de mis pasos chocando con el lodo del camino y mi agitada respiración. Llevaba semanas con la misma rutina, visitando hasta dos o tres pueblos o ciudades al día, solo con un propósito... Encontrarla.

Seguí corriendo varias horas, de la misma forma, hacia el lugar donde me encontraría con Helen. Al llegar al punto donde el camino se dividía en dos, mismo lugar en el que hacia alrededor de un mes, Helen y yo, tomamos caminos diferentes con una sola misión, encontrar a aquella chiquilla que ambos habíamos abandonado casi cuatro años atrás; me senté en una roca que se encontraba en el punto donde los caminos se juntaban, al ver que Helen aún no había llegado, solo pedía que al muy idiota, no lo hubiesen capturado. Dirigí mi vista al cielo estrellado, esperando poder saber la hora que era, a causa de la altura de la luna, mismo truco que ella nos había enseñado. Ver la luna en las noches, era lo único qué nos acercaba a ella y a su vago recuerdo.

Rápidamente me puse de pie, saliendo de mis pensamientos, al ver una extraña silueta, acercarse a toda velocidad hacia el lugar donde me encontraba. Saque mi cuchillo, esperando atacar a quien se me acercaba, cada segundo eran metros menos entre el tipo que venía hacia mi y yo. Sin pensarlo dos veces, lance mi arma hacia el tipo, el cual, ágilmente esquivo mi cuchillo, tomando el mango de este y empuñándolo... Ahora si estaba jodido. Sin quitarle la vista de encima intente sacar algún otro cuchillo de mi mochila, ya que estaba a unos escasos metros de mi. En un rápido y ágil movimiento, dio un salto atrapando mi cuello entre mi propia arma y su antebrazo, al mismo tiempo en que yo también le ponía mi cuchillo en su cuello.

-¿Que tu madre no te enseño que lanzarle cuchillos a tus amigos es de mala educación?- Se burlo Otis.

-Si me dijo, pero que te puedo decir, mis amigos solían retarme para hacerlo.- Le respondí de la misma manera.

Sonrió de lado y ambos bajamos nuestras armas.

-Eso.- Dijo apuntándome.- Me dolió aquí.- Continuo apuntando donde debería estar su corazón, ″ofendido″.

-Cállate idiota.- Dije con una sonrisa mientras ambos empezábamos a avanzar, en silencio.

-¿Encontraste algo?- Me preguntó rompiendo el silencio.

-Ni siquiera una puta uña.- Masculle molesto.- ¿Tu tuviste suerte?

-No... Busque en diarios, noticias, internet, rumores, en todo y no hay nada que nos pueda decir a donde se fue.

Me detuve y mire a la luna, lo único que tenía de ella. Helen lo podía negar, pero ambos sabíamos que, no encontrarla, no solo era nuestro peor miedo, si no que también acabaría con nosotros.

-Vamos, la encontraremos.- Me intentó animar Helen apretando mi hombro.

-Eso espero.- Murmuré intentando encontrar en la luna, si quiera una pista de donde podría estar.

-¿Y si vamos a cazar antes de ir a la cabaña?- Opino Helen, mientras nos acercábamos al pueblo, que se encontraba en las entradas del bosque.

-Vamos, después de esto, dudo que Slender nos deje salir antes de un año.- Le respondí indicándole una casa, a lo que este asintió.

-Primero nos encargamos de los de arriba.- Me indicó entrando por una ventana, seguido por mi.

Entramos en habitaciones diferentes, después de haber acabado con una chica que había en la habitación, salí para ver si había alguien más a quien quitarle su sonrisa, sin embargo, una extraña silueta que paso enfrente de la ventana abierta, perdiéndose entre las sombras llamó mi atención. Empuñe con más fuerza mi arma al acercarme en donde aquella extraña silueta se perdió.

-Sal... Y tal vez tenga solo un poco de compasión contigo.- Mi llamado fue únicamente respondido por una risa femenina... Una risa demasiado conocida por mi...

Me acerque incrédulo bajando mi arma, a aquel rincón sombrío.

-Nunca bajes la guardia querido.- Me reprochó aquella chica al momento en que salía de las sombras, golpeaba mis rodillas haciendo que cayera y ella se ponía sobre mi colocando su extraña arma en mi cuello mientras sus ojos marrones oscuros, tan familiares para mi, brillaban con un toque extraño.

Se relamió los labios y me sonrió mostrando una hilera de dientes blancos y alineados debajo de sus labios carmesí. Busco mis ojos con los suyos y cuando los encontró soltó una sonora carcajada. Yo sólo pensaba en donde mierda estaba Painter cuando más lo necesitaba.

-SingFor Me Sw... ¿Liu?- Al pronunciar mi nombre aflojo un poco la presión de su arma contra mi yugular, al sentir una oportunidad, tome sus muñecas, nos gire y esta vez quede yo arriba de ella, mientras el arma de cada uno estaba en el cuello del otro.

-No bajes la guardia querida.- Esta vez, le devolví su burla, recibiendo una sonrisa juguetona de su parte.

-Nunca lo hago guapo.- Dicho esto sentí su rodilla golpear fuertemente mi entrepierna... Seguramente esto me dejara sin descendencia...

Solté sus muñecas a causa del dolor que sentía en mi parte noble, a lo que ella rápidamente salió de debajo mío, pateo mi espalda y se puso a horcajadas encima mío mientras su arma con una extraña grabación en el mango se alzaba frente a mi.

-SingFor Me Sweetie.- Dijo con las palabras llenas de odio, al momento que el arma de la chica bajaba hacia mi, Painter salió de la habitación principal.

-¿Todo bien Liu?, Por que escuche unos ruidos extra...ños.- Se interrumpió a si mismo al ver a aquella chica sobre mi.

-¿Enserio eres tu?- Preguntó sorprendido Bloody.

-Mierda.- Mascullo la chica antes de salir de encima mío y saltar por la ventana.

-Liu...¿Enserio es ella?- Me preguntó impresionado ayudando a levantarme.

-Si...Vamos.- Le indique antes de saltar la ventana en busca de aquella chica, seguido de Bloody.

-¿A donde vas?- Me grito a mis espaldas Painter.

-La llevo buscando casi cuatro años, no la perderé así como así.- Le respondí de la misma manera corriendo detrás de ELLA, y adentrándome al bosque al igual que ella.

-¡Detente!- Le grite en un vago intento de que se detuviera.

-Por acá.- Me indicó Painter guiándome por entre los árboles.

Enfrente se lograba ver su vestido rojo escurriéndose por los árboles.

-¡DETENTE.- Le gritó Painter a la chica al momento que la acorralábamos entre los dos.

-¡Para que!, ¡De todas maneras ni siquiera saben quien soy!, ¡No saben nada de mi!, ¡Déjenme ir y les perdonare la vida que debí haber tomado en aquella casa!- Nos grito de vuelta amenazándonos con su arma.

-Te conocemos mejor de lo que crees.- Intento hacerla razonar Helen.

-¡Pruébalo!- Y dicho eso Painter se quito su máscara.

-Helen.- Murmuró ella sorprendida.

-En persona.- Dijo con una sonrisa.

-¿Acaso ya te has olvidado de nosotros?.- Intente hacerla razonar.

Acercó sus manos a su boca, la cual estaba abierta, mientras sus ojos se aclaraban, a aquel color amelado que recordaba perfectamente.

-Liu... Helen...¿Enserio son ustedes?-

-Los mismos de hace unos años pequeña.- Al decirle eso, sus ojos se llenaron de lágrimas y se lanzo a nuestros brazos.

-Los extrañe tanto... Pensé que... Pensé que se habían olvidado de mi.- Murmuraba entre lágrimas aferrándose a nosotros.

-Nunca te olvidaríamos idiota.- Le dijo Bloody correspondiendo su abrazo.

-Y nosotros te hemos extrañado de una manera inimaginable... Alejandra.- Murmuré en su oído al abrazarla de vuelta.

-Había extrañado tanto que alguien me llamase por mi nombre.- Murmuró ella escondiendo su cara mi pecho.