Un Corazón En Pausa

Capítulo 25. Advertencia

Emil me había lanzado una advertencia, podía suceder, se sentía amenazado, conocía su desesperación - Emil... Me fuiste infiel tantas veces, equilibrar las cosas no estaría mal.

- Qué diría tu padre, si supiera la clase de omega que tiene como hijo?, crees que le hará gracia saber, de mis sospechas?.

- Vergüenza debería de darte, que tu omega tenga que buscar lo que no le das en casa, dicelo, habla con el, que sepa de una vez, que siendo el alfa que presumes, te falta demasiado para complacer a tu esposo.

- Tus palabras son contundentes, tienes un amante y voy a aplastarlo como a un gusano.

- Deja de ser tan dramatico, quieres?, dónde está el alfa tan seguro de si mismo, con el que me casé?, dondé está la seguridad, qué tanto presumes?, qué tal se siente?, acuérdate de esto Emil, eso que sientes, yo lo sentí por ti, acostumbrate a eso, porque yo en algún momento, lo hice también.

- Es venganza entonces?, es eso solamente? - se acercó a mí, me jaló hacia a él, queriéndome intimidar, me miraba atento, acercaba su boca a la mía tentandome, se le olvidó que un alfa que olía despechado, no era nadie atractivo - es una venganza, es tu manera de hacerme probar una cucharada de mi propia medicina cierto?, ahora lo sé!, los celos son duros y son crueles, así que vuelve a mi, me amabas demasiado, no me digas que todo ese amor se fue, ya se te olvidó todas esas veces donde te hice gemir?, ya se te olvidaron las veces que me suplicabas que te tocara?.

Me aparte indignado - no, no lo he olvidado, fui muy idiota al respecto, y todo ese amor, está bajo tu zapato, lo aplastaste a cada paso, hasta volverlo polvo!!, y si... Se que gemi debajo de ti varias veces, pero no se te ocurrió que pude fingirlo?, a caso no sabes que los orgasmos también pueden fingirse?, tú fingiste que me amabas, porqué yo no tendría que fingir placer?, porque a estas alturas, es más que obvio que solo estabas conmigo por mi dinero.

- No!!, jamás fingí amor, yo... Te amé desde la primera vez, que te vi llegar, desde la primera vez que oí tu voz, desde el primer momento en que sentí tu esencia, yo me atonte por ti, sin saber que tenías dinero, sin saber quién eras, no me vengas a decir que no te amaba!!.

- Amar?, crees que voy a creer que me amabas, cuando me sometiste al mismo infierno?, no sólo fueron tus palabras denigrantes, no sólo fue tu rechazo, fue esa manera en la que te sentías superior haciéndome pequeño!!, fue esa manera en la que me hiciste sentir que me hacías un favor, estando conmigo, fueron tus infidelidades, fue tu apatía, es irónico que a estas alturas, digas que mi aroma te atrajo, cuando me dijiste que apestaba hace unos meses, ponte de acuerdo, en tus argumentos, analiza lo que dices, te escuchas tan ridículo.

- Estoy desesperado!!, estoy asfixiado, no puedo soportar perderte, tu no sabes lo que yo sufrí, al ver que no volviste!!.

- Sufriste tanto, que no me búscate!!, deja de humillarte, teniendo dinero, cualquiera de tu calaña, me ve atractivo.

- No es por el dinero!!, carajo no es así!!.

- Muéstramelo entonces.

- Haría lo que fuera por que volvieras a quererme.

- Ok... Firmame un contrato, renuncia a tus derechos como mi esposo, si nos divorciamos no me pelearas nada, déjame manejar las cuentas, si tanto dices amarme, el dinero no debe importarte.

- Yo te firmare todo, lo que tu quieras, si eso me dice, que tu vas a creer en mi.

- Hasta que firmes, no voy a creerte - la mañana llegó, el se había ido, pudo haber dicho muchas cosas al calor del momento, aunque confiaba que estaba lo suficientemente, desesperado, el aún debía creer en mi.

Visité a Viktor, Giacometti estaba al tanto de todo lo que había sucedido, escuchaba mi petición, mientras guardaba silencio, pero el platinado, estaba insatisfecho - que el te deje, ver los movimientos de las cuentas, que el te dé carta abierta para manejar fondos, lo deja a merced tuya, puedes vaciar las cuentas si quieres.

- Sería increíble, que pudieras hacer movimientos así, incluso, podrías conseguir los movimientos de las cuentas, seria sin duda una prueba más, podrías hundirlo - mencionaba Chris.

- Dejarlo sin nada, eso quisiera, quiero que sufra, debieron verlo, esta desesperado por hacerme creer que me ama, que estúpido - gozaba verlo así, pero para el ojiazul, no era ninguna gracia.

- Si el te firma eso que quieres, qué pasará después?, qué va a pedirte a cambio?, es más que obvio que va a querer que duermas con el, y a qué costo? - estaba molesto, su tono de voz lo delataba.

- Déjame hacerlo, quiero ponerle el pie, hacerlo caer, sin saber que fue lo que lo hizo tropezar - Chris aplaudía mi idea, pero Viktor no.

- Te pedirá derechos, va a querer estar contigo, se que quieres vengarte, pero... No puedo evitar, sentir que corres peligro con el.

- Estaré bien, se defenderme.

- Y si logra convencerte?, y si logra que le creas?, qué pasará conmigo?.

- Dudas de mi?.

- Te conocí enamorado de él, tan enamorado que te permitiste soportar tanto dolor, ahora que el se transforme en el tipo de hombre, que siempre quisiste, yo sobrare, y no quiero eso.

- No es así, verás que no - el parecía no estar conforme, pero por mi lo dejó pasar, días después, Emil me dio aquel documento, tenía el poder de manejar las cuentas, tenía lo que quería, seguro de mi, fui al banco, solicitando estados de cuentas y movimientos, Giacometti me acompañaba, encontramos varios movimientos que no estaban registrados en los libros de la empresa, estaba asegurándose de cubrir las desviaciones muy bien, por suerte un analista financiero, nos ayudó, estaba transfiriendo capital a una cuenta alterna, estaba preparándose, por si solicitaba el divorcio, incluso averigüe sobre aquel negocio, del caribe.

Quería comprar una zona hotelera y remodelarla, me reí, hablé con mi padre, ese era el negocio que aquel alfa necesitaba, para su independencia, pero que se vino abajo gracias a mi, el hablaba con varios inversionistas, mientras yo adquiría aquel inmueble con la ayuda de mi padre, no hay peor golpe, que cerrar los caminos, de alguien que se considera exitoso.