22. Tan cerca y tan lejos

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CASSIE

Jueves

Cerré la puerta y bajé los escalones en un trote. El taxista aún estaba metiendo mi maleta al auto.

—¡Cassie, ¿qué están planeando con The Radicals?! —me preguntó un paparazzi cuando esperaba a que terminara el taxista de acomodar la maleta.

¿Quién demonios me había mandado a los paparazzi?

Aunque no había flashes, sentí cada captura como un fuerte latigazo.

—Estás varios meses retrasado en noticias —le respondí tras una risita burlona.

—No, me refiero en estos días.

—Nada —mentí escondiendo la cara para que no vieran mi sonrisa traviesa.

—¿Sigues con Liam? —me preguntó otro paparazzi.

—¡Vamos! ¡Eso ya es noticia vieja! —respondí burlona.

—¿Pero andan?

Sonreí irónica en lo que levantaba la mirada sin dudar.

—No.

—¡Vamos, Cassie, danos algo! ¡Aunque sea dinos que tienes planeado para desquitarte de The Radicals! —me dijo otro paparazzi.

—¿Para que sigan alimentando la rivalidad? —pregunté falsamente molesta—. ¡No, ya es aburrido hacerlos enojar!

El taxista me dijo con un asentimiento de cabeza que ya podía subir.

Ya no dije nada más a los paparazzi porque eran como un perrito de la calle: les dabas un hueso y ya querían quedarse contigo.

El taxista arrancó, dejando a los paparazzi hambrientos de información.

Tomé el iPod para perderme en la música y el paisaje.

Escucharía a The Radicals de ahora en adelante. Rhys me había comprado todos sus álbumes cuando hablamos de música después de cenar. Él traía algunas de mis canciones en su celular. Dijo que esa era la manera más rápida de estar con el otro cuando nos extrañáramos. También nos tomamos unas fotos juntos.

Estaba entusiasmada por verlo, aunque no iba a poder estar con él. Aun teníamos que fingir que nos odiábamos, al menos hasta que pudiéramos hablar con nuestros amigos.

Todo el camino recordé cada minuto de nuestros dos días juntos. Hubo mucho sexo, pero también conversamos por horas. Aclaramos toda mirada aniquiladora que nos echamos desde que nos vimos por primera vez.

No podía creer lo feliz que era ahora con él. Con mi novio.

♪♫♪

Hice el check-in rápido y caminé con paso apresurado a la sala de espera. Tuve que detenerme un par de veces para firmar autógrafos y posar con fans, hombres principalmente.

Mis amigos ya estaban esperándome.

Busqué a The Radicals con actitud casual, pero no los vi por ningún lado, entonces fui a sentarme junto a Liam que estaba tecleando en su celular.

—¿A quién escribes? —le pregunté con tono chismoso, incluso me asomé para leer su texto.

—A alguien —respondió frío.

—Ya sé que a alguien, pero ¿quién es? —le pregunté juguetona, incluso lo empujé un poco sin dejar mi actitud bromista.

Estaba tratando de volver a ser amigos sin beneficios.

RhysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora