›⟩ Miedo ⟨‹Pov. Bastián
—Y-y—apenas logro pronunciar—te perdono... T-te perdono Diana...
En cuanto mi boca suelta esa oración siento como un peso se quita de encima en mi. Tenía tanto orgullo de decir eso que jamás se me pasó por la cabeza que iba a decirlo, y a la vez estába enojado, eran muchas las emociones que estaba sintiendo, era tanta la rabia que sentía hacia ella que por eso nunca pude siquiera dirigirle la palabra.
Ahora me doy cuenta de que esto era lo que necesitaba para poder empezar de cero, empezar de cero con ella. Porque ella no sabía lo que hacía en ese momento, ella era una niña cuando ocurrió eso, estaba aterrada y la entiendo, y ahora lo entiendo, entiendo su sentimiento, entiendo que es tener miedo, y no hablo de ese miedo que pasa cuando vez una película de terror o cuando vez una cucaracha. El verdadero miedo que sentía era ese al que no te deja dormir en paz, el que nunca se va de tu mente, el que te deja sin habla, el que te da una puta ansiedad el tan solo imaginarte si pasara, ese miedo que te carcome poco a poco hasta el punto de tener que medicarte para poder hacer desaparecerlo tan solo unos minutos.
Y ahora lo entiendo perfectamente.
Ella no dice nada, solo se separa del abrazo lentamente y agacha la mirada mientras se quita las lágrimas diminutas que se deslizan por su mejilla rojiza.
—Y perdóname a mi—antes de que ella pronuncie una palabra sigo—yo también te debo disculpas, lo siento si en un momento fui egoísta y solo pensé en mi y en mi daño, no tuve empatía del todo contigo—suspiro—no pensé en tu sufrimiento ni en las secuelas que esté te ocasióno, no puedo siquiera imaginarme el dolor y la tristeza que sentiste en ese momento. Pero quiero decirte que eres la chica más chingona que e visto—ella suelta una carcajada— y no, no das asco, jamás me darías asco, asco da ese pedaso de mierda que te hizo eso, "EL DEBERIA DE SUFRIR, NO TÚ" y el que te haya dicho que das asco mándalos a la mierda, vivimos en una sociedad del asco que estoy seguro que te dijeron el típico "Ay, pero de seguro tu estuviste de atrevida y lo provocaste" —ella asintió apenaada—espero les hayas sacado el dedo grosero y les hayas dicho "chinguen a su madre"—solto otra carcajada y negó— aunque es mejor que les hayas pateado los huevos—movi la cabeza—y te juro que voy a hacerlo pagar por eso, voy a hacer todo lo posible para joderlo y hacerlo sufrir hasta que se quede seco y sin un poco de vida en su asqueroso cuerpo
...—carraspeo la garganta cuando ella se quedó petrificada ante mis palabras—en fin.. carajo, parezco mujer empoderada diciendo todo ésto.Suelta otra carcajada, y joder que risa tan más hermosa.
—Me gusta pero me asusta—susurra para luego toser apenada.
Suelto una risita para molestarla.
—¿Quien te gusta?—pregunto lo obvio nada más para joderle.
—Nadie—sonrió y un rubor se esparce por su mejilla.
—¿Yo?—pregunto levantando las cejas
Ella asienta y al mismo tiempo susurra un no.
—¿Si o no?—pregunto jugueton
—mmmmm, ¿y yo a ti?—pregunta penosa y esconde su cara en mi pecho.
—Hmmm, ¿usted no tiene novia señorita?—pregunto sarcástico.
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CELESTIAL©
RomanceEn algún momento de mi vida me negué a enamorarme, y no por alguna decepción amorosa, o por algún trauma, simplemente por la inseguridad de que en algún momento de mi vida me irian a lastimar o que yo lo iba a hacer. Mi vida antes de él era normal...