Ambos se miraron con terror.
Sabían que no podían ir a ayudar, no solo por su inexperiencia en combate, también por ser menores de edad.
—No hablemos muy fuerte, intentemos hacer el menor ruido posible— susurro Draco, viendo la puerta con temor— Se cómo salir de aquí rápidamente, pero antes debemos pasar por mamá— Harry asintió, y de la nada recordó algo.
—Se como pedir ayuda. Tu ve por Cissy, yo a mi habitación. Cuando tenga lo que necesito iré a la habitación Cissy, ¿entendido?— el rubio asintió.
—Cuidate— dijo casi inaudible el Malfoy, besando la mejilla de Harry, cerca de sus labios. Ante el acto los labios de Draco brillaron, al igual que la piel besada de Harry. Se sonrieron y salieron silenciosamente del cuarto.
El moreno caminaba silenciosamente. Sus pasos inaudibles no alertaban a nadie de su presencia, haciéndole fácil llegar a su habitación. Al entrar, se dirijo directamente a la cómoda dónde guardaba su ropa, abrió el tercer cajón y de ahí saco un espejo.
—Sirius, por favor responde susurrando— la cara del adulto apareció frente a el, con marcada preocupación— Estamos sufriendo un ataque, estoy quedándome con Severus Snape, están Draco y Narcissa Malfoy, Narcissa está enferma y hay mortifagos en la casa de Snape, por favor ven a ayudar, luego te lo explicaré.
Dudando, Sirius acepto— Pásame la dirección.
Luego de que Harry se la dijera, le recordó— Ni Snape ni el hombre que está luchando con el es el enemigo, solo ataca a los mortifagos, por favor.
Cortaron la comunicación y Harry salió de la habitación con una barra de metal entre sus manos (que era parte de el ropero dónde se guardaban otras cosas). Tenía el espejo en un bolsillo interior de la camisa que llevaba puesta, agarraba la barra con firmeza y observaba el panorama con cautela. Camino unos pasos y se adentro en la habitación de Cissy, horrorizado con la escena.
Draco estaba atado de manos y pies, con un hechizo de congelamiento para que no pueda apartar la vista de lo que sucedía en la cama.
Lucius Malfoy estaba violando a Narcissa.
Mientras ella lloraba.
Sin dudarlo, se aventó contra el agresor, incrustó con todas sus fuerzas el metal en su espalda y tiró para atrás alejándola de una amordazada y llorosa Narcissa.
La ira del moreno provocó que este incrustara el metal en el cuello del Malfoy mayor. Provocando que este inmediatamente se desmaye.
Rápidamente se acercó a Narcissa, ella temblaba, estaba atada igual que su hijo y tenía un paño cubriendo toda su boca, impidiéndole hablar. La desató intentando mirar lo menos posible el cuerpo desnudo de la mujer, le alcanzó una manta de arriba de una silla y se aproximó a Draco.
—¿Que debo hacer...?— en su mente se proyecto el día que Draco lo abrazo calmando su ataque de ansiedad. Sin pensarlo se lanzó hacía el, envolviendolo en sus brazos y apoyando su cabeza en el espacio entre su hombro y cuello. Con vergüenza de que Cissy lo viera, depósito un beso en el pálido cuello del más alto, notando como brillaba la parte.
Sintió unos brazos rodear su cuerpo— Gracias...
Sirius Black estaba desorientado. Encontrar la casa de Quejicus fue toda una osadía, "casa 36 de Grimmauld Place" esa había sido la dirección que Harry le indico.
El, quien había vivido toda su infancia y parte de adolescencia en Grimmauld, solo conocía hasta la casa 33, apartir de ahí solo siguió por los extensos campos del barrio.
Corria en su forma de Canuto observando el lugar, a lo lejos, una mansión de brillante madera se presentaba. Acercándose más, noto humo saliendo de la casa y hechizos que se veían por las ventanas rotas. Corrió con más apuro, para así llegar frente a la puerta rota y notar el número 36 tallado en un par de maderas.
Entro en su forma canuna, derribando a un mortífago en el proceso. Ya transformado en humano, noto a Snape y a un hombre bastante familiar peleando al borde de las escaleras. Desmayo a un tipo que estaba por atacar al hombre desconocido y empezó a lanzar diversos hechizos a otros mortifagos. Snape, al notar que Sirius estaba de su lado, empezó a cubrirle la espalda en ocasiones al igual que el pelilargo lo hacía con ellos.
Hechizo tras hechizo se dió finalizada la batalla con la derrota de los mortifagos.
Cuando pensaron que había tranquilidad, un fuerte grito se escuchó desde el piso de arriba.
—¡AVADA KEDRAVA!¡Feliz Noche Buena!
Mañana es navidad, no me lo creo.
Les deseo lindas fiestas con quién sea que lo pasen.
♡♡♡
Posdata: saquenme de acá, odio esto-
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❝La Verdad❞『Drarry』
RandomCon los años, la vida de Harry Potter empeoraba cada vez más. Desde que cumplió sus 12 años y recibio la carta para entrar al Colegio de Magia y Hechicería Hogwarts, el abuso y maltrato que recibía por parte de sus tíos empeoro. Ir los veranos era u...