Desvergonzado ♥ ︎Thiam.

# 28 ♥ ︎: Eres mi destino, Liam.

💙︎ Punto de vista de Liam 💙 ︎

Abrí los ojos lentamente, sintiendo que el sol atrapaba mi rostro de una manera que me daba aún más pereza para levantarme. Suspiré suavemente, sintiendo el cálido brazo de mi amor envolver mi cintura. 

Sonreí, dejando un beso en su frente. Dormía tan tranquilamente que, si pudiera, nunca lo despertaría. Bueno, tal vez si lo despertaría, porque no podría soportar estar sin él. Hoy necesitaba aclarar las cosas. Por mucho que se vea bien, sé que probablemente debe estar muy inseguro y triste por dentro.

Me levanté lentamente, haciendo un esfuerzo por no despertarlo. Me puse los pantalones y una camiseta suya, caminando lentamente hacia la sala, donde agarré mi celular, mirando hacia la cocina, recordando lo que había pasado allí ayer. Sonreí levemente, recordando.

"Liam, más fuerte..." Rogó Theo, su voz ronca y un gruñido emocionado saliendo de su boca. Comencé a rebotar en si polla más rápido y más fuerte, y podía escuchar el fuerte ruido que hacían nuestras pieles cuando chocaban entre sí.

Eché la cabeza hacia atrás, sintiendo todo mi cuerpo en éxtasis. Cuando mi hombre se dio cuenta de que no podía soportar más estar en esa posición, rápidamente empujó su silla hacia atrás, sin importarle el golpe que causó. Sonreí, sintiéndolo presionarme contra la pared. Mi rostro estaba pegado a él, y podía sentirlo entrar en mí, levantando mis caderas para estar más erguido hacia él.

Gemí cuando lo sentí enterrarse en mí, gimiendo justo detrás de mi oreja, lo que me hizo temblar aún más. Sus embestidas eran duras y ásperas, lo que me hacía poner los ojos en blanco de vez en cuando, gemir y casi caer al suelo sobre mis piernas temblorosas.

"Vente por mí, amor..." susurró, volviéndose hacia él y comenzando a sacudir nuestras extremidades al mismo tiempo, como en el campamento. Dejé escapar un fuerte suspiro, y tan pronto como ensucié sus manos con mi esencia, mi cuerpo se debilitó. Rápidamente me levantó en su regazo, llevándome a la habitación mientras soltábamos risas bajas, aconstandome en su cama cuál noche de bodas.

Humedecí mis labios y sonreí, queriendo solo seguir recordando aquello. De vuelta a la realidad, busqué el contacto de Malia y la llamé, esperando que respondiera. Hasta que finalmente respondió.

"Entonces, ¿Qué compro?" Pregunté, siempre mirando hacia la puerta del dormitorio. Salí del apartamento, bajé por el ascensor y me detuve en la entrada del edificio.

"Ya te lo dije." Compra flores y Burger King, le encanta. Apuesto a que te perdona de inmediato. dijo, se oía molesta por mi insistencia.

"Malia, no voy a gastar mi dinero en flores, ¡esto es lo más cursi!" Exclamé, un poco irritado. Odio las flores, maldita sea.

"¿El regalo es para ti?" No, cierto, entonces hazme un favor." Puede parecer un bastardo incontrolable, pero Theo es más romántico de lo que deja ver." Una de sus mayores pasiones son las flores." Esto va más allá de un acto romántico." Todo por Theo, ¿recuerdas?" me dijo, haciéndome fruncir el ceño.

"¿Por qué le gustan tanto las flores?" Cuestioné, confundido.

- "¿Por qué te gusta tanto la fotografía y el dibujo?" espetó, haciéndome suspirar, se rindió. - Ya debes conocer su bocadillo favorito, ya que fueron juntos. Sus flores favoritas son las begonias.

"Está bien, intentaré recordar ese nombre..." Tragué, sabiendo que había una buena posibilidad de que lo olvidara.

"Entonces, ¿tuvieron mucho sexo?" Tomó la virginidad de tu..."