Capítulo 12

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Daniel y Tiffany.

Jess.

—¿En qué piensas?— me pregunta colocando su mano sobre mi muslo al conducir.

Damen se encuentra muy contento con mi decisión de vestimenta, y claro yo también ya que ese era mi objetivo. Llevo un vestido corto de volados amarillo pastel que llega hasta la parte superior donde comienzan mis muslos, sin ser muy atrevido y siendo perfecto para asistir a la cena a la que no tuve más opción de aceptar después de tantas insistencias por parte de Daniel, así como también de Damen diciendo una y otra vez que sería una buena manera de despejarme después de tantos turnos seguidos.

—Estás lindo hoy— admito mirándolo.

—¿Hoy?— gira su rostro hacia mí un segundo.

—Dam, arruinas los momentos— giro mis ojos y luego guío mi mirada hacia la ventanilla otra vez.

El cielo está especialmente hermoso y pacífico hoy, se encuentra completamente negro y en el mismo se perciben perfectamente todas las estrellas que lo decoran.

—¿Crees que sea agradable?— le pregunto a Damen refiriéndome claramente a la chica que hoy conoceremos y que Daniel quiere hacer su novia.

Al parecer han estado saliendo por un tiempo, casi el mismo que Damen y yo. Solo que lo de ellos era más secreto, o quizá a mí me lo pareció después de estar tanto tiempo ocupada.

—Lo descubriremos en un rato supongo— se encoge de hombros.

—¿Y si no lo trata como debe? Dani es un chico muy sensible y...

—Enana, tranquila— me corta— Daniel es grande y puede tomar sus propias decisiones.

—Sí, pero no quiero que nadie lo lastime, él nunca lo ha permitido conmigo. Nosotros nos cuidamos.

Él asiente.

—Lo sé, y no digo que dejen de hacerlo, pero creo que deberías dejarle a él esta parte, después de todo ellos serán la pareja, no tú, y realmente aunque lo conozcas como ninguna otra persona considero que en distintas relaciones hay distintos tratos se quiera o no.

Me quedo en silencio un momento procesando sus ciertas palabras.

—Tienes razón— asiento— trataré de no meterme.

En respuesta aprieta su mano alrededor de mi muslo nuevamente.

—... pero si llega a meterse con...

—Ya— me vuelve a cortar.

Cierto, tengo que mantener la calma.





Nos encaminamos desde las cocheras hasta el restaurante caminando, ya que quedan uno al lado del otro.

Tomo la mano de Damen en la mía mientras avanzamos y él no tarda en tomar un agarre más firme en ella. Me doy cuenta de reojo que está sonriendo ligeramente.

Unos minutos después llegamos y si bien el lugar no es grande, es hermoso tanto por dentro como por fuera.

Por dentro se encuentra decorado con maderas claras y luces enganchadas entre ellas que le dan un toque muy cálido, mientras que por dentro ya tiene un toque más elegante aunque continúa manteniendo su toque principal, en este se encuentran varias alfombras rectangulares de una tonalidad color rojo oscuro que se encuentran todas debajo de las mesas y sillones que llenan el lugar.

Al momento de entrar podemos ver a Daniel sentado solo en una de las mesas para cuatro donde se encuentran dos personas por lado.

Suelto la mano de Damen cuando nos acercamos y toco el hombro de mi amigo, sin embargo me muevo hacia el otro lado para hacerle una broma en la que cae y cuando voltea mantengo mi dedo índice estirado hacia su rostro se forma que choca contra su mejilla de manera más brusca de lo que pretendía.

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