Capítulo VI

91 3 0
                                    


Que tal chicas, hoy están bastante hermosas – sonrió Ruel entrando al comedor.

– Buenos días Ruel – saludo Claennis – ¿durmieron bien? –

– Bastante bien a decir verdad, pero no es momento de hablar de eso, si no de que desayunaremos estoy hambriento – su estómago gruño en respuesta, en contestación el de Yugo y PinPan se pusieron de acuerdo, sacando una risita a la nueva integrante.

– Buenos días – saludo el selatrop con semblante malhumorado, si bien su sueño tuvo un buen final el inicio aun lo atormentaba

– No tan buenos al parecer – contesto la sadida recién llegando.

Yugo solo la observo en silencio para ignorar su comentario apoyándose en el hombro de Claennis, las pesadillas le habían impedido descansar durante la noche.

– Buenas – saludo el dragón tomando su lugar al lado del selatrop – y tu pequeño, que tal anoche – dijo a su hermano de manera sugestiva.

– A ti que te importa – contesto de manera brusca dejando asombrado a Adamai– deja de llamarme pequeño – no tenían otra manera de hacerlo sentir inseguro, aquel adjetivo solo le traía malestar consigo mismo, era algo que había dejado en claro, solo tenían que dejar de usarlo.

– No tienes porque hablarme así Yugo – le reto Adamai – si estas de malas no es culpa de nosotros –

– Entonces no me molestes – se paro golpeando la mesa asustando a los presentes – solo vete y desaparece, eres un verdadero as cuando se trata de eso – se burlo dolido.

– ¿Y tú? – Lo señalo – eres un genio en joder al mundo y dejar de lado a tu hermano – la ira contenida podía notarse fácilmente en su voz.

Ambos se habían lastimado en su momento, sabían que tenían que hablar de ello pero se negaban a hacerlo, heridos por las palabras del otro se miraban fijamente – Al menos jamás traicione a mi familia – dijo entre dientes – ¡Tu ni siquiera lo pensaste! – acuso severamente.

– ¡Me dejaron atrás! – Grito indignado y dolido el dragón – Siempre lo hicieron, te ibas con tus amigos y a mí, tu hermano, me dejabas a un lado, todos ustedes lo hicieron, soy parte de la hermandad pero parecía solo un visitante –

– Chicos tal vez deban parar – pidió Eva tratando de calmar la situación.

– Eso justifica lo pasado, no te disculpaste ni una vez, golpeaste a Eva embarazada y casi matas a PinPan, secuestraste a sus hijos, y tu excusa es que te dejamos atrás – se rio bajando la mirada – Que estúpido – se burlo mirándolo retador

– Este pequeño, te voy a... – fue detenido tranquilamente por la mano de Claennis, molesto la miro – Suéltame – le ordenó zafándose de su agarre, aun tenía cuentas pendientes con su hermano.

– Tal vez es mejor que lo dejes ir, si necesitan hablar háganlo cuando estén más calmados, en esta situación solo van a herirse mutuamente –

– ¿Y a ti quien te dijo que podías meterte en esto? – mostro sus dientes amenazadoramente.

– Tiene razón Adamai – apoyo la Sadida – Tienen que calmarse –

Bufó mirando al selatrop – ¿Qué... necesitas a tus damas para defenderte? – Yugo molesto quito a Claennis poniéndose enfrente de su hermano

– Por supuesto que no – Claennis tomo esta vez su mano – Yugo déjalo aquí, no es bueno causar problemas – quitando de manera brusca la mano de la chica la miro enojado – NO-TE-METAS –

Les Ailés (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora