Capítulo V

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Gritos y llantos se escuchaban por el bosque, pasos apresurados y gente tratando de ponerse a salvo a sí mismos, otros dándolo todo por su familia, los que se quedaban atrás pronto empezaban a gritar en agonía, sintiendo como su vida era arrebatada, Valkiria se sentía satisfecha escuchando aquellos lamentos no habían querido someterse tomándola por una loca.

Imbéciles

Sentía la energía volviendo a su cuerpo, la energía vital, el Wakfu circulando por su interior, bien le daría las gracias a Nadia por aquella magnifica arma alguna cosa había hecho bien su traidora hermana. Pronto encontraría su cuerpo y la fuerza que alguna vez le perteneció regresaría a ella.

Caminaba encantada, allí donde pisaba la vida era drenada. Gente que finalmente habían logrado salir no volteaban atrás, de acuerdo los dejaría con vida, que se extendiera la noticia ella gobernaría todo, acabaría con los débiles y obtendría su venganza, así los "héroes" vendrían a ella y tomaría el Selacubo, después de todo como miembro de los selatropes podría manipularlo, orgullosa viendo la catástrofe que causó extendió sus alas y emprendió vuelo soltando una risa malévola.

No eran tan magnificas como sus alas originales, pero por ahora le servirían. Empezaba a moverse, Isolda pagaría caro su traición.Con una ráfaga de viento desapareció de la vista, la hermandad del Tofu se enfrentaría a un nuevo enemigo.

En su casa mientras Claennis guardaba el libro que terminaba de leer un escalofrío la recorrió, miro a todas partes sin encontrar nada decidió no prestar atención apago la vela y subió a su habitación.

Algo grande estaba por venir.

Les Ailés (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora