Capítulo 15

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Albert despertaba lo primero que vio fue a esa hermosa rubia que más amaba, recostada con su su cabello esparcido en la almohada se miraba mas bella que nunca, todavía no podía creer que se haya entregado a él sin pensarlo; se sentía dichoso de que él haya sido el primero en su vida, pues él por alguna razón llegó a pensar que la relación con Terry, había llegado a más pues ella estaba muy enamorada, de esa patán pensó en lo que había sucedido el día anterior: tenía que hacer algo al respecto no se quedaría así, no quería que su "mujer" ahora por que ya era suya, no la expondría por nada del mundo. Al rubio no es que la virtud de ella fuera lo más importante, de hecho él la amaba por sobre todas las cosas si ella, por alguna razón no hubiera sido la primera. a él no le importaría porque el amor que él sentía por esa rubia era más fuerte que cualquier cosa, pero no podía negar que el haber sido él primero en ella lo hacía inmensamente feliz. Se acercaba a ella para empezar a besar su sedoso hombro bajando con tiernos besos por toda la delicada y menuda espalda de la rubia .

La rubia empezaba a sentir un inmenso calor, su cuerpo se estaba excitando uumm, amor ¿Qué haces travieso?

- me estoy deleitando con este bello cuerpo tuyo preciosa, llegando a su bien respingado trasero besándolo con mucha pasión empezando abrir sus piernas con una de sus manos se dirigió hacia la parte intima de ella empezando a masajear con su dedo su botón rosado hasta sentirla totalmente húmeda uumm, preciosa estás tan húmeda que deseó entrar amor.

A lo que la rubia le respondía con gemidos ya   ahogados aslo amor, te deseo tanto: el solo la atrajo hacia él así de espaldas haciéndola que quedará en rodillas y empezó a besar su hombro y su cuello Candy se arqueaba más hacia él con una mano masajeaba sus pechos y con la otra masajeaba su botón rosado cuándo vio que la rubia estaba más que lista agarrado su falo erguido para sumergirse dentro de ella, oohh!!! por Dios amor que deliciosa estas me encantas atrapando la boca de la rubia y empezando las embestidas lentas pero certeras, uumm, aaahhh, aaahhh, empezando acelerar sus movimientos, amor decía la rubia no aguantó más siento que voy a llegar al cielo, entonces vamos juntos preciosa acelerando más y más sus embestidas hasta culminar en un fulminante clímax los dos. El rubio la tenía envuelta en sus enormes brazos completamente y seguía dándole pequeños besos en su cuello y clavícula y le decía vamos preciosa a tomar una ducha juntos, para luego comer algo. No está demás decir, que fue la más larga de los rubios.

Mansión Ardlay

La tía Elroy se encontraba en la biblioteca revisando la lista de lo que hacía falta para la boda de Archie, cuando a su mente vino la huérfana, que voy hacer si William se llega a enterar que yo tuve que ver para dejará el apellido y al clan, no por que debería de enterarse no creo que esa chiquilla se atreva a echarme de cabeza, pero de todas formas tengo que encontrar la forma de que se vaya de aquí; no me puedo arriesgar a que habrá la boca. Pero que hago como se preguntaba ella misma.

Departamento

Los rubios ya se encontraban comiendo algo ya que se habían despertado tarde y después de tomar esa larga ducha se les había hecho más tarde ya casi caía la noche de nuevo, preciosa ahorita terminando ¿Quieres que salgamos? a dar un paseo preguntaba el rubio.

Bueno si quieres decía la rubia ¿que tienes mi vida te noto seria? Te hice algo que te molestara.

- no, amor es que tu sabes no sé como decírtelo bueno es que como anoche no paramos de tu ya sabes.

- el rubio se paraba y se acercaba a ella y la tomaba de la mano !ven mi vida vamos a sentarnos en el sofá! Dime no temas preciosa ¿qué pasa?

- es que ya vez, no hemos parado de hacer eso expresaba la rubia.

- el rubio tomaba la barbilla de ella para que lo mirara a los ojos y le decía, si yo se que no hemos parado de hacer el amor ¿Te he lastimado? dime amor no quiero lastimarte a lo mejor he sido brusco contigo y no me he dado cuenta discúlpame, por favor por mi imprudencia no me he podido detenerme sabiendo que era tu primera vez .

- no amor no digas eso, yo también he querido estar así contigo lo qué pasa es que ahora sí me siento un poco adolorida y no creo poder andar caminando ahorita.

- ¿Quieres que vayamos al doctor a que te revisen?

- no!! Amor ya sabes yo soy enfermera y se que es normal cuando es la primera vez se recargaba en el pecho del rubio pues empezó a sentir celos de tan solo pensar, con cuántas mujeres había estado él, así como con ella.

- bueno entonces qué te parece si te hago un té, para que te relajes y nos vamos a la cama a descansar mañana tendremos que trabajar y hay que reponernos quieres mi vida, se lo decía con voz dulce. El rubio no dejó que su amada se levantara él limpió la mesa y los trastes, le preparó el té y se fueron a acostar a la cama la atrajo hacia su pecho y le dio unos pequeños besos en su frente y le dijo descansa mi vida yo velaré tu sueño.

- amor puedo hacerte una pregunta.

- claro tú puedes preguntarme lo que quieras decía el rubio.

- ¿Has estado así? como anoche con muchas mujeres se lo pregunto así de golpe.

- mi vida, preciosa mírame por favor quiero que sepas y que entiendas algo, no es de hombres hablar de las mujeres, pero no importa si yo he estado con una o dos mujeres anteriormente, lo importante es qué nunca jamás en la vida había sentido lo que tu me has hecho sentir y sabes porqué. Por Qué a nadie he amado como te amo ati, tu eres a la única mujer en vida que amo y que he amado toda mi vida aunque no lo creas ayer fue la primera vez que hice el amor, pues desde ayer para mi no existe más mujer que tú y no quiero que esa cabecita tuya piense cosas que puedan atormentarte. la atraía más hacia él juntando sus frentes y suspirando profundamente sabes pequeña siempre me reproche el no poder olvidarte y al contrario el tratar de querer olvidarte parecía amarte más y solo me reprochaba yo mismo, por amarte así.

- la rubia al escuchar todas esas palabras se sintió mal por haberle hecho esa pregunta se reprendió así misma por su osadía pero ya lo había hecho pero al oírlo decir todo eso, se sintió tan amada y sentía que lo amaba más pues el siempre pensando en ella con sus palabras tan tierno y caballeroso; como siempre se preguntaba ella misma como no amarlo así, de esa manera como ella lo amaba en cuanto el término de decirle todas esas palabras se le escaparon unas lágrimas de sus bellas esmeraldas y lo abrazó del cuello, lo miro con intensidad a sus ojos azul cielo que tanto amaba y le dijo te amo tanto amor, apoderándose de los labios del rubio él solo la abrazo con mas fuerzas devolviéndole el beso con fervor y en susurros le dijo preciosa hay que parar no quiero lastimarte.

La rubia solo le contesto, no amor no me lastimaras quiero que me vuelvas hacer el amor una y otra vez envolviéndose de nuevo en la pasión.

Continuara . . .

Por Amarte Así Donde viven las historias. Descúbrelo ahora