De joven iba a pocas citas, la Universidad consumía la gran parte de su tiempo, pero una vez que se graduó y al tiempo abrió su propia Clínica, comenzó la experiencia de conocer formalmente a hombres. El primero –y el último– fue Min YoonGi, con él vivió buenas experiencias recorriendo la ciudad, cenában juntos en restaurantes o bebían en algún Bar de Itaewon en noches de fin de semana. Siendo unos pocos años pero que el Min, aprendió unas cuantas cosas estando atrás suyo.
JiSul esta segura que si la relación hubiera continuado todo aquello terminaría en ambos casados. Lo pensó muchas noches luego de su separación tan repentina, el pelinegro siempre dijo querer formar una familia a su lado, si solo ella no fuera como es y él hubiera sido un hombre amable, los hechos serían diferentes y ambos estarían aún enamorados recorriendo la Capital. ¿De qué sirve recordar eso? No volvería a esos tiempos.
Ahora, estacionó su auto frente a uno de los restaurantes más caro de Seúl, no podía evitar sorprenderse al saber que su Abuela se dispuso a pagar todos los gastos con total que ambos se conocieran bien. No entiende la razón de tanto entusiasmo, pero de todas formas prosiguió, le dio sus llaves a un encargado y caminó hacia la entrada, donde dijo su nombre y la reservación que la mayor hizo. 'Déjeme la acompaño' le dijo el joven de traje.
Estando allí, se sentía sumamente extraña, usando un vestido rojo elegante y su cabello recogido. Desde hacía mucho tiempo no se arreglaba tanto para ver a otra persona, mucho menos un hombre que seria su cita, era inevitable no estar nerviosa con cada paso que daba, fue así hasta llegar a la que sería su mesa, una melena pelinegra corta con pircings en sus orejas la hizo confundir. Se le hacia conocido.
—Aquí es.—le dijo el joven— En seguida traigo sus cartas.
El chico se levanto de su asiento, igual de consternado que ella.
—Espere, debe haber un error.—lo detuvo— C-Creo que se confundió de mesa...
—No. Es esta, señorita. —negó.
—Pero...
—¿Nos puede traer vino? —pidió el Jeon.
—Claro.—asintió antes de irse.
—¿Tomará asiento? —inquirió, señalando la silla frente a él.
Sin poder creerlo ella lo hizo, dejando su bolso de mano sobre su regazo, no podía verlo a la cara, la situación era demasiado embarazosa. Entre tantos hombres en Seúl, entre tantos jóvenes... ¡¿Tenía que ser él?! Aquel chico que se sonrojaba con sólo verla pasar frente suyo, o que cada vez que se iba intentaba emitir palabra sin balbucear. El chico que siendo atractivo la hace dudar, ¿Por qué? ¿Por qué Jeon JungKook?
Tendría que haberle dicho que no a su Abuela.
—Esto es confuso hasta para mi.—admitió, rascando su nuca— Vine porque mi abuela me habló de la nieta de su amiga que vive en la Ciudad, supongo que debe haberte pasado lo mismo —asintió, sin verlo—. Entiendo que es incomodo porque soy tu clientes habitual, pero no creo que tenga nada de malo disfrutar la cena, ¿No?
«Vamos, JiSul. Relájate por una vez en tu vida.» se decía a si misma internamente, aplastó sus labios con nervios antes de subir la vista al pelinegro de tatuajes. Notó que usa una camisa con los primeros botones abiertos, dejando a la imaginación lo que podría continuar por debajo. Por eso lo odiaba, por ser seductor sin intentarlo.
—De acuerdo.—se rindió, exhalando— Podemos comenzar nuevamente —extendió su mano— mi nombre es Im JiSul y tengo veintiocho años. Soy dueña de una Clínica Veterinaria.—la acepto con una sonrisa en sus labios.
—Soy Jeon JungKook, tengo veintitrés años, estudio fotografía y trabajo como ayudante de dirección.
Sus manos fueron estrechadas por primera vez, provocando un estremecimiento en los dos, haciendo que se aparten rápidamente. Era extraño, y nuevo.
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in the parks ➵ ʙᴛs;; jjk [✔]
Fiksi Penggemar公園で ❛ EN LOS PARQUES ❜ 〃 ↳ ❪ ctw ❫ ❝Atractivo y atento, eres la perdición.❞ donde jungkook conoce a jisul, una dulce veterinaria que lo odia por el simple hecho de ser atractivo. © cutielifesis i. hermosa portada por: @dorasilove ii...