My Little Bunny [Adaptación 2na]

05

Ya era hora de ir a clases. Mina le terminaba de poner el uniforme a su hija, mientras que la pequeña solo miraba a su madre expectante.

— ¿Entonces...? —Preguntó Nayeon, esperando la respuesta de la mayor.

— Amor, puedes invitar a quien quieras para tu cumpleaños, con tal, tú serás la cumpleañera. —Nayeon sonrió emocionada.

Dentro de pocas semanas sería el cumpleaños de Nayeon, cumpliría seis años y quería invitar a sus compañeros de curso.

— ¡Gracias, Mamá! —Le dio un besito en la frente a Mina en forma de agradecimiento.

— Bien, es hora de irnos. —Nayeon se puso su mochila, tomó la mano de su madre y se encaminaron al auto.

En el auto iban cantando distintas canciones que pasaran por la radio. Nayeon tenía en su mano a su conejito blanco, el cual movía de un lado al otro en el aire al ritmo de la canción que estaba en ese momento, siendo "The Lazy Song" de Bruno Mars.

Al llegar a clases Nayeon corrió donde Jeongyeon, saludando también a la madre de la anterior mencionada. Ambas niñas empezaron a conversar animadamente, contándose tantas cosas como si hubieran pasado años desde que no habían hablado, aunque solo hayan pasado unas cuantas horas.

Las madres de Jeongyeon empezaron a conversar con Mina, compartiendo algunas ideas para el cumpleaños.

Tzuyu y Jihyo conocían a la contraria desde hace ya algunos años, Jihyo desde que ambas estaban haciendo su residencia en el hospital y Tzuyu desde la universidad.

— Buenos días. —Saludó con una sonrisa Sana a las tres madres junto con sus hijas.

— ¡Buenos días, profesora! —Saludaron las niñas.

— Buenos días. —Saludaron cordialmente las adultas.

— Uh, Profesora, tengo una consulta. —Habló Tzuyu, las contrarias prestaron atención mientras Sana asentía con su cabeza para que la mayor continuara hablando. —Jeongyeon nos comentó sobre una obra de teatro, ¿es verdad? —Jihyo asintió a lo dicho por su esposa. Mina miró expectante a la profesora, Nayeon jamás le comentó de una obra de teatro.

— Es cierto. Todos los niños van a realizar una obra de teatro, hoy les mandaremos en las agendas de sus hijas un comunicado donde saldrá todo lo que deben saber además de la obra que le corresponde a su hija y el personaje que interpretará. —Las madres asintieron.

— ¿Cuándo será la obra? —Preguntó Mina. Si quería asistir a la obra de su hija debía pedir antes un día libre en el hospital.

— El veintiocho de septiembre a las diez de la mañana en el teatro municipal. —Dijo la profesora, mirando directamente a la madre de Nayeon. La pelinegra asintió y apartó la mirada, sintiéndose tímida por la mirada de la contraria.

La campana sonó, anunciando que ya era hora de entrar. — Bueno, niñas, es hora de entrar. Despídanse de sus madres. —Las niñas asintieron, cada una yendo con sus progenitoras.

Mina abrazó a Nayeon, dándole un besito en la punta de la nariz de la niña. — Nos vemos a la hora de salida, ¿vale? —La menor asintió. Hoy era el día libre de Mina, y significaba que hoy le tocaba cuidar no solo a su hija, sino que también a Jeongyeon. — Adiós, hija, que te vaya bien. —Se despidió.

Cuando ambas niñas se terminaron de despedir de sus madres, corrieron para entrar al establecimiento. Sana rio enternecida, caminando tranquila a la sala.

La clase empezó con algunas actividades donde aprendían a pronunciar mejor las palabras además de algunas nuevas. Por último, empezaron a entregar los comunicados a cada niño y a practicar la obra que les correspondiera.

Eran veinte niños, donde harían cuatro obras con cinco alumnos. Para cada obra estaría a cargo una profesora, siendo Sana la encargada de la obra "Juntos podemos".

— Bien, niños, empecemos. —Dijo, iniciando la práctica.

En la obra estaría Nayeon interpretando a "Tigrita", Jongdae siendo "Leoncito", JongHo como "Venadito", Jeongyeon siendo "Pumita" y Seulgi como la "Sra. Osa".

Sana empezó a ayudar a cada niño con los diálogos, ya que debían aprendérselo claramente.

— "Hagamos una competencia a ver quién llega primero al..." —Empezó a pensar, intentando recordar su línea. Se puso su dedo en su frente, como lo hacía Winnie de Pooh al pensar.

— Estanque. —Dijo Sana, completando la línea.

— ¡Eso! "Hagamos una competencia a ver quién llega primero al estanque". —Habló fuerte, terminando su primera línea.

Y así siguieron, aprendiéndose las primeras líneas de cada uno.

Les dieron un descanso de cinco minutos, donde Nayeon y Jeongyeon se fueron a una esquinita a conversar.

— Podrías invitar a la profesora Sana. —Propuso Jeongyeon. Nayeon abrió su boquita con sorpresa, como si hubiera escuchado la mejor idea de todas.

— ¡Cierto! Lo haré. También invitaré a la profesora Dahyun. —Dijo sonriente. Ambas niñas al terminar de tomar sus bebidas, siendo para Jeongyeon un jugo y para Nayeon una leche de plátano, se levantaron y se dirigieron a sus profesoras. — Profesora Sana, profesora Dahyun... —Llamó Nayeon. Las mencionadas miraron a la niña expectantes. — quiero invitarlas a mi cumpleaños. —Sonrió, mostrando su sonrisita de conejita.

— ¿Hablas enserio, Nayeonnie? —Preguntó emocionada Dahyun. La pequeña asintió. — Cuenta conmigo, iré a tu cumpleaños sí o sí. — ¿Cómo rechazar una oferta así? ¡Habría pastel gratis!

— ¿Y usted, profesora Sana? —Preguntó Jeongyeon mirando expectante a su profesora.

— Por supuesto que iré, llevaré el mejor regalo de todos. —Dijo Sana, haciendo que las niñas sonrieran emocionadas. Dahyun negó ofendida, decidida a reclamar.

— Profesora, se equivoca, el mejor regalo lo llevaré yo. —Replicó segura. Sana rodó los ojos divertida.

— Sí, sí, como sea. Es hora de seguir practicando, vamos. —Sana se llevó a las dos niñas junto con ella y los demás de la obra para seguir ensayando.

El resto de la hora se basó en aprender y actuar hasta la hora de la salida.

A la hora de salida las profesoras salieron junto con los niños formados en una fila. Los padres llegaron a buscar a sus hijos para retirarse luego con estos.

— ¡Mamá! —Mina se acercó a su hija, tomándola en brazos con un brazo, y con el otro tomó la mano de Jeongyeon. — Invité a la profesora Sana y la profesora Dahyun a mi cumpleaños. —Dijo sonriente.

— Ah, ¿sí? —Sana al escuchar su nombre sonrió tímida.

— Sí, espero que no le moleste. —Dijo Sana. Mina negó, sonriendo levemente.

— Tranquila, será un honor tenerla en el cumpleaños de Bunny. —Ambas adultas se sonrieron. Las niñas al darse cuenta intercambiaron miradas cómplices.

Apartaron la mirada al escuchar un carraspeó por parte de Dahyun. — Lo siento por interrumpir, pero necesito a la profesora Minatozaki.

— Oh, bueno, ya debemos irnos de todas formas. Vamos, niñas. —Las menores asintieron. Nayeon rodeó con sus bracitos el cuello de su madre, y Jeongyeon reforzó el agarre de manos con su Tía Mina.

— ¡Adiós, Profesoras! —Se despidieron Nayeon y Jeongyeon de las mayores, las cuales se despidieron de igual forma.

Cuando Mina y las menores se habían ido, Dahyun decidió que ya era buen momento para molestar a su mejor amiga.

— Aunque no lo quieras admitir aún, se nota que babeas por esa mamá. El amor... —Suspiró, alejándose con una sonrisa burlesca. Sana chasqueó con su lengua, caminando de nuevo al salón.

Bueno, aunque aún no tuviera confirmado que le atraía aquella apoderada, sí había algo seguro y era una fiesta de cumpleaños que debía empezarse a planear.