Capítulo 10: Amarre

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Mikey aún no puede creer que después del tremendo espectáculo que armó en la casa de su amado Mitchy su suegra aceptara sus disculpa y le permitiera seguir viendo a Takemichi.

—Si yo fuera la madre de Takemichi te hubiera puesto una orden de alejamiento —musitó Draken sorprendido por lo que decía su amigo.

—Confirmo, yo hasta contrataba un guardaespaldas.

—Gracias a dios ustedes no lo son y falta poco para que mi suegra me de su bendición —.Mikey hace oídos sordos a sus amigos y sonreí de lo más feliz mientras caminaba hasta el santuario.

Al llegar varios de los integrantes de la Tokyo Manji están reunidos listos para escuchar lo que Mikey tiene que decir cuando un par de rubios entran corriendo.

—Tu crees que me veo bien Chifuyu.

—Claro que si socios, luego le daré las gracias a Mitsuya por quemar esa ropa que tenías.

El par de amigos vienen conversando a pasos apresurados y todos pueden ser testigos del cambio de Hanagaki.

Takemichi decidió tener un cambio de lock, en realidad Mitsuya lo obligó a quemar toda esa ropa ni su camisa favorita se salvó

—Adiós camisa que dice camisa —algunas lagrimas cayeron por su rostro amargamente.

—Si bueno debes probarte la ropa que hice

Todos los integrantes de la Tokyo Manji notaron el cambio que tuvo el rubio su cabello con demasiado gel ahora caía delicadamente sobre su rostro haciendo resaltar sus facciones, se veía más decente sin ese raro peinado además de su ropa que ya no eran simples camisas y pantalones. Sin duda el rubio se veía mejor.

—Hanagaki se ve más atractivo

—Mi Mitchy siempre fue atractivo

—Solo tú te enamoras de un chico todo golpeado y crees que se ve atractivo lleno de tierra y apestando a sudor —responde Kazutora.

—No saben apreciar la belleza de Takemitchy

—Bueno gracias a Mitsuya ahora todos pueden apreciar la belleza de Hanagaki —alega Draken.

La sonrisa de Mikey decae como la economía de Latinoamérica y aprieta el puño de la rabia, aprecia que todos puedan ver la belleza de Takemitchy pero eso significa peligro, más competencia para ganar el corazón del rubio.

Chifuyu se da cuenta de la mirada preocupada de Mikey y entiende perfectamente al rubio, lo más seguro es que los pretendientes de su socio aumenten. Situaciones extremas requieren de medidas extremas

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Chifuyu y Mikey se reunieron en una cafetería, esta vez Draken no estaba para vigilarlos y obviamente ambos chicos aprovecharían eso.

Matsuno fue el primero en hablar y explicar su idea que en su mente era la mejor opción para que Take no cayera en las garras de algún tipejo.

—Debes hacerle un amarre a Takemichi —susurró mirando a ambos lados para asegurarse que nadie escuchara sus palabras.

—¿Estas seguro de esto? No quiero arruinar mis avances.

—Obvio sí. Ahora vámonos.

Ambos rubios se levantaron, pagaron la cuenta y se retiraron. Caminan presurosos por las calles, giran por unas esquinas y corren por unas avenidas, Mikey recorre el lugar con la mirada, mientras sus pasos continúan el lugar se vuelve más rústico, la naturaleza parece invadir las casas. Nunca había visto un vecindario como ese intenta hacer memoria, pero no encuentra nada.

12 pasos para enamorar a TakemichiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora