•Prólogo•

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- ¡Juyeon! ¡Yuqi! ¡Vamos a llegar tarde!- grito un furioso Minho desde la plata baja.

- ¡No quiero ir!- reclamó por décima vez el mayor de los cachorros.

- ¡Appa! ¡Juyeon no sale del baño!- chilló la niña.

- Paciencia, paciencia es lo único que pido.- gruñó el alfa y entonces su marido lo empujó a un lado para poder pasar a la casa.

- ¡Lee Juyeon contaré hasta tres y no me hagas subir!- grito Han.- ¡Uno!

Ni bien comenzó a contar el cachorro abrió la puerta de golpe refunfuñando, su cabello algo desarreglado y un grano muy notorio en su frente que hizo reír a carcajadas a su hermana menor.

- Sigue riendo y te quemaré tus peluches, niña mimada.- gruñó pegándole con su dedo en la frente, Minho subió a ver que eran los nuevos gritos que se escuchaban porque la pequeña se había defendido de su hermano mordiéndolo.

- ¡Lee Yuqi al baño! ¡Y tu revoltoso!- gruñó tomándole la oreja al chico mientras lo encaminaba a su habitación.- Terminaté de cambiar ahora mismo, tus tíos y Hyunjae ya deben estar en su casa y nosotros aún no podemos salir de aquí.

- No quiero ir appa, no me obligues a hacerlo.- suplicó el castaño de apenas once años sosteniendo la mano de su padre que sujetaba su oreja con fuerza.- Por favor, por favor.

- ¿Por qué no quieres ir? Ayer estabas muy feliz por volver a ver a Hyunnie.- preguntó soltandolo.

- Ayer no tenía está cosa en la frente.- se quejo señalando el maldito grano que había salido en su rostro.

- Juyeon, solo estás creciendo.- suspiró acariciándole el cabello con cariño, peinandolo de forma que tapara su frente.- Listo.

- ¿Por qué estoy creciendo me saldrán estas cosas?- preguntó en tono de berrinche.

- Luego hablaremos de esto- río el mayor cerrando la puerta para que pudiera vestirse

- ¡Pero papá!

- ¡Papá ¿viste mis flores para el cabello?!- preguntó la pequeña desde el baño.- Las había dejado aquí.

- Buscalas bien.- gritó Jisung desde abajo.

- ¡Están en tu habitación, princesa!- respondió Minho con seguridad recargandose en el marco de la puerta. Jisung se acercó a él y le dio un beso en la mejilla.

- ¿Debes darle la charla de la pubertad a nuestro bebé grande?- preguntó con una sonrisa dándole dos palmaditas en el pecho cuando asintió antes de salir a ver a sus otros dos hijos que estaban ya en el auto y parecían ansiosos por querer ir a reencontrarse con sus primos.

- ¡¿Crees que debe llevarlo con mamá Hwang o con otro médico para le expliqué?!- cuestionó y el omega se encogió de hombros dándole una rápida mirada.

- ¿Estoy enfermo?- preguntó Juyeon deteniendo su bajada por las escaleras, dejando de abrocharse la camisa.- ¿Me voy a morir?

- Deberías dejar de juntarte un poco con Hyunjin y tus primos.- negó Minho al ver que el labio inferior del menor temblaba como si estuviera por llorar.- Solo estás a punto de presentarte y tu cuerpo está cambiando, pronto querrás cortejar a alguien o alguien te querrá cort-

- ¡Papá!- grito casi con asco el cachorro cubriéndose los oídos.- ¡No quiero saber eso!- chillo corriendo en dirección al auto.

En ese momento una llamada entro en el celular del alfa que sonrió viendo el nombre de Hyunjin brillar en la pantalla.

- Hola cariño ya estoy yendo a nuestra cita.

- ¡Minho! ¡Amor, necesito que pases a comprar un pastel de despedida!- chillo desesperado su amigo haciéndolo alejar el celular de su oído.

Teacher! Can I Kiss your baby? Please.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora