AUDEN─ Mierda, mierda, mierda, mierda ─no paro de decir al saber que ya son las seis y diez minutos y Liam puede llegar en cualquier momento.
Meto la tarjeta en mi pantalón mientras comienzo a buscar mi teléfono en la cama. Tiró las sábanas a un lado de la cama y en medio de mi frustración recuerdo que no tengo un teléfono.
«Que estupido, tú no tienes un celular» ─dice la pequeña voz en mi cabeza.
Me dirijo hacia la puerta y comienzo a descender por las escaleras, no quiero encontrarme con Liam en el ascensor.
Al llegar a la sala de espera, busco a Allison por todas partes, pero al parecer aun no llega y me dirijo a uno de los muebles para sentarme a esperar.
Los minutos pasan más lentos de lo normal y comienzo a desesperarme. No se si Allison estará por llegar o aun no llega de sus clases y lo peor de todo es que en cualquier momento puede aparecer Liam.
Comencé a leer unas revistas viejas que estaban en uno de los muebles. El aburrimiento era demasiado, el sueño se comenzaba a apoderar de mi ser poco a poco. Pero lo que más me decepcionó fue que Allison no llegaba.
Cuando me levanto decidido a salir a buscar un nuevo teléfono y posiblemente a comer en algún lugar, veo como Liam entra con Ariel a un lado de él. Ariel va vestido de traje sin saco, con un portafolio. Ariel resalta más, o más bien, juntos brillan más que por separado. Ariel tenía su cabello corto y peinado hacia un lado, alto, su piel esta bronceada dando a resaltar un rosa en sus mejillas que hacian que el color de sus ojos se bieran aun más negros, logrando tener una mirada que logra someter a cualquira.A pesar de la distancia que había entre nosotros Ariel se percató de mi presencia y me observo, en un cuestión de segundos esquive su mirada y después me dirigí hacia la salida mientras que ellos iban a por el elevador.
Al llegar a la puerta de cristal me detengo y regresé a ver si ya se habían ido. No los veía por ningún lado y cuando mire a la esquina del pasillo que está a unos metros del ascensor la mirada de Ariel se encuentra con la mía, estaba agachado amarrando las agujetas de sus zapatos, nos miramos por unos segundos y luego me marché.
No tengo idea de a donde ir y mucho menos en donde quedarme a dormir, puedo utilizar la tarjeta de crédito que me dio Liam y pasar la noche en un motel, pero no se donde hay uno.
« Allison » recordé que el punto de encuentro es en el edificio donde vivo.
Regresé y miré a todos lados en busca de ella, pero no estaba.
« Soy un estupido al pensar que llegaría ».
─ No regresaré. ─dije mientras dejaba escapar un leve suspiro ─. Se captar las indirectas.
El plan era sencillo, compraría un teléfono y me hospedaría en un hotel para pasar la noche y si me excedo del límite, ledire a Liam que; o era eso o le interrumpió su linda velada.
Al dejar de ver el pavimento y comenzar a mirar hacia el frente me sorprendo al saber que Allison y el tipo de la otra vez me están viendo, al parecer están igual de sorprendidos que yo.
─ Hola ─es lo único que se me ocurrió decir .
─ Hola, ¿ a donde vas? ─preguntó Allison.
─ A comprar unas cosas, nos vemos después.
─ Espera ─dice el tipo que está con Allison ─ Dime, ¿tu eres Audin?.
Regrese a ver a Allison en busca de respuestas.
─ Me llamo Auden, si es a lo que te refieres.
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La maldición de la familia Armstrong
Подростковая литератураQuien diría que las acciones cometidas hace mucho tiempo, aún seguirán causando problemas en el presente, es lo que no puede entender Auden, quien ha estado luchando con esta maldición que hace que los varones de su familia puedan procrear. Desde q...