HONEY | Draco Malfoy

four

POV: HONEY ILONA

El resto del día pasó borroso.

Me las arreglé para recuperar el traje del Sr.Malfoy de una sola pieza y me separé de Sebastian.

El Sr.Malfoy había pasado todo el día indicándome qué hacer y a dónde ir. Al final del día, mis pies me estaban matando y me moría de hambre. No me había dado la oportunidad de sentarme y comer algo, teniendo necesidad cada segundo del día como un niño.

Pero todo lo que le había dado, cada bebida y comida, no comió. Lo tiró a la basura o lo dejó en su escritorio, lo que me hizo preguntarme por qué me dijo que lo consiguiera para él en primer lugar si no lo iba a comer.

Ahora eran las 5:30 y estaba empacando para irme a casa. Ordenando los papeles de mi escritorio, apagando mi computadora portátil y tirando mi impermeable. Ya no estaba lloviendo, pero todavía hacía mucho frío.

—Ilona,—su voz me endureció e hizo que mis dientes crujiera entre sí. Lentamente me di la vuelta.

—¿Sr.Malfoy?

—Me quedo hasta tarde, lo que significa que tú también tienes que hacerlo. Así que recógeme una cena en el pequeño restaurante italiano de al lado,—dijo, apoyándose en el marco de la puerta de su oficina y mirando cómo estaba lista para irme a casa.

Parecía un poco más relajado que el comienzo del día. Su cabello estaba rizado y desordenado, los pocos botones superiores de su camisa negra se deshacieron y las mangas se enrollaron hasta los codos.

—Pero, señor Malfoy, yo...

—Te vas a casa cuando yo lo haga,—dijo,—ya he hecho un pedido, así que todo lo que tienes que hacer es recogerlo.

Suspiré mucho, dejando ir la emoción que tenía cuando pensé que podía ir a casa y realmente comer algo.

—Sí, señor Malfoy,—dije en un tono derrotado.

—Consigue a Vivian lo que quiera también. Ella se irá a casa pronto, pero le gusta tener una comida caliente aquí para ella,—dijo antes de desaparecer en la oficina y revelar una Vivian de aspecto muy severo.

—Quiero una ensalada,—dijo, buscándome arriba y abajo por lo que se sintió como la centésima vez hoy —Tal vez quieras pensar en conseguirte una también,—En este punto, incluso una ensalada sonaba como lo mejor del mundo.

—¿Algo más?—Pregunté con una sonrisa forzada.

—Sí, toma el largo camino,—sonrió,—Draco va a estar ocupado por un tiempo,—guiñó un ojo antes de desaparecer detrás de su puerta y cerrarla.

No sabía lo que quería decir, pero sin embargo escuché y caminé hacia el ascensor.

[...]

—Gracias,—sonreí mientras el chef me entregaba las bolsas de comida y una bolsa separada llena de botellas de agua. Ahora estaba muy oscuro afuera y no me gustaba especialmente la oscuridad.

Me encantó tanto como a cualquier otra mujer de 5'4 en sus veinte años.

Pero tenía mi varita, así que me sentí un poco segura mientras caminaba de regreso al edificio, haciendo lo que Vivian dijo y tomándome mi tiempo, mirando hacia abajo a mis pies que estaban poco iluminados por las luces de la calle mientras caminaba, ocupándome tratando de no pisar las grietas del hormigón.

Después de algún tiempo, volví a las puertas del edificio. No perdiqué tiempo para abrir la puerta, pero mientras tiraba alrededor de la manija, descubrí que estaba cerrada con llave. Gemí y me di cuenta de que la necesidad más limpia de que Vivian y el Sr.Malfoy fueran los únicos y, como tenían llaves, estaba bien cerrar.