Es imposible (corregido 03/03/2021)

No quiero dejarte ir

― No quiero dejarte ir ― susurró Makoto mientras se arrodillaba a un lado de la tina para acercarse más. Haruka abrió los ojos en sorpresa ante esas palabras ¿acaso estaba jugando con él?, giró su cabeza y frunció un poco el ceño viendo como Makoto estaba arrodillado con la mirada gacha, no le veía el rostro así que no podía leer sus ojos y así saber si estaba mintiendo.

Makoto comenzó a preocuparse viendo que no obtenía ninguna respuesta por parte de Haruka, ¿acaso con esas palabras lo había herido tanto, que ya no había marcha atrás?, los ojos comenzaron a picarle así que levantó la cabeza para encontrarse con unos ojos azules que lo miraban confundido.

― No quiero dejarte ir ― volvió a repetir ― Sé que lo que te estoy diciendo es bastante egoísta porque tu perteneces al mar

― Makoto.... Haruka lo quiso interrumpir, pero siguió hablando, quería sacar todos los sentimientos que llevaba dentro, no seguiría guardándoselos.

―Pero eso es lo que siento ― continuo ― En el poco tiempo que llevamos conociéndonos, yo te he empezado a querer, me dejaste cautivado con tú dulzura, inocencia y esa tranquilidad que emanas...

― Makoto...

― Sé que con mis palabras y acciones anteriores yo destroce tu confianza, pero te pido que me entiendas, eres tan puro, yo sólo no te quería lastimar, pero al final es justo lo que acabe haciendo ― continuó sin dejar de hablar a Haruka que se sentía sumamente feliz por las palabras que estaba escuchando, Makoto iba a comenzar a disculparse otra vez al ver que Haruka no le decía nada, pero se quedó callado en cuanto sintió que Haruka le sostenía las manos fuertemente.

― Yo... yo, ― Makoto lo miraba expectante mientras que Haruka sólo alcanzaba a balbucear, estaba más que emocionado por todo lo que le había dicho así que las palabras sólo se atoraban en su garganta y un rubor comenzó a recorrer toda su cara aumentando su vergüenza, así que decidió que, ya que aparentemente no le iba a poder decir nada, las acciones eran lo mejor, y lentamente se acercó al rostro del contrario, rodeo su cuello con ambos brazos y le dio un dulce beso en los labios. Ya lo había hecho, pero eso no evito que se sintiera algo torpe, Makoto estaba enternecido ante su acción, así que le correspondió el beso y se dedicó a acariciar esas hebras negras mientras ambos se besaban con más intensidad entrelazando sus lenguas, luego de un tiempo se separaron, pero mantuvieron sus frentes juntas como queriendo decir que no se querían alejar mucho del otro.

― ¿Por qué no te metes aquí conmigo? ― pronunció mientras miraba con intensidad a Makoto, el aludido asintió nerviosamente, pero no iba a meterse así con ropa y tampoco se iba a desnudar para que lo mirara, quería tomarse las cosas con calma, así que optó por irse al cuarto. Después de decirle a Haruka que no iba a tardar mucho busco con rapidez su traje de baño negro con detalle verde, se sacó la ropa y se colocó la prenda, estaba bastante ansioso así que lo hizo con rapidez.

Makoto entro en el baño para encontrarse con Haruka, quien al verlo no pudo evitar deleitarse con su torso bien definido, un sonrojo cubrió su rostro cuando ambas miradas se encontraron, Makoto se acercó y le indico que se "sentara" más adelante de la tina para darle más espacio a él, Haruka asintió e hizo lo que el otro le indicaba. Makoto entonces se metió en la bañera y se sentó con las piernas abiertas, agarro a Haruka de los hombros y lo atrajo hacia su cuerpo haciendo que la espalda de este quedara sobre su pecho y la aleta del tritón quedara hacia afuera de la bañera.

Ambos jóvenes tenían el corazón acelerado, y por un momento sólo se quedaron acompasando el ritmo de sus respiraciones sin decirse nada, Makoto decidió entonces tomar un frasco de champo que se encontraba en un cajón cercano, frotó un poco el líquido entre sus manos y comenzó a masajear suavemente el cuero cabelludo del tritón, este se estremeció ligeramente al sentir el contacto frío. Makoto movía sus manos masajeando tanto la cabeza como el cuello de Haruka, llegando incluso hasta su pecho, rodando sus manos hasta llegar a las clavículas.