༒︎Lᴏᴠᴇ ɪs ᴀ Bɪᴛᴄʜ༒︎ 𝐌𝐀𝐍𝐉𝐈𝐑𝐎 𝐒𝐀𝐍𝐎 𝐗 𝐓/𝐍

06

- En mis manos yacía el cuerpo de mi amado sin vida, muerto a manos del líder de Bonten Manjiro Sano aparte de haberme quitado a mis padres y casi haber matado a mi hermano, mato a la persona que más ame en mi vida. No podía aceptarlo, sostenía en mis manos a Naoto ya no me importaba el dolor de mi pierna, solo lloraba abrazando su cuerpo rogando a Dios que lo devolviera a la vida, en ese momento no podía pensar con claridad no me importaba que mis enemigos o asesinos estén a mi alrededor solo quería que Naoto estuviera vivo.

- A lo lejos él hombre que había matado a Naoto me miraba con una sonrisa de satisfacción.

- Poco a poco empiezas a interesarme más... - Manjiro empezó acercarse a mí y se puso de cuclillas mirándome fijamente a los ojos.-

- Dime... ¿Estás satisfecha...? El murió gracias a tu negligencia.

- En ese momento lo mire y me pregunté con una mirada perdida, ¿Gracias a mi negligencia murió Naoto? ¿Por qué yo no le hice caso? No, él murió porque Manjiro Sanos quiso matarme y él me protegió, dio su vida para que yo no muera.

- ¡No murió por mi insensatez, tú lo asesinaste! - Dije mirándole fijamente con lágrimas en los ojos.- ¡TÚ MATASTE A NAOTO, ME ARREBATASTE A LA PERSONA QUE MAS AMABA!

- Cállate... - Me agarro del cabello haciendo que lo mire fijamente. -

- Mátame.

- Ese hombre se sorprendió ante tal respuesta que procedía de mi boca, con seriedad y dispuesta a morir.

- ¿Por qué quieres morir, acaso tu vida no tiene valor alguno?

- Sabes... Lo perdí todo. Perdí a mis padres, perdí a mi amado con la persona que se suponía que debía formar una familia, mi hermano está en coma gracias a tí. ¿De qué sirve que tenga un empleo, sea un agente de la policía de Tokio si voy a ser infeliz, si siempre tendré un vacío dentro de mí, este dolor que me ataca por la noches aquellas pesadillas con mis padres muertos gracias a Bonten de ahora en adelante.? Por eso te pido Manjiro, no mejor dicho Mikey, mátame. Termina con este sufrimiento de una vez por todas.

- Aquel chico solo se limitó a mirarme y se burló de mí, como que si lo que dije hubiera sido una nefasta broma.

- Si morir es tu deseo no te lo concederé. Pagarás tus pecados por haber matado a Kakuchou y Takeomi. Verás el infierno en vida. No me interesa lo que te haya pasado o a quienes hayas perdido, la vida es así unos vienen otros se van. Mientras varios mueren otras vidas nacen preparándose para un día morir. Nada es eterno ni duradero, el tiempo que vive alguien es incierto. Por lo tanto uno tiene que prepararse mentalmente y meterse en la cabeza que ningún familiar, amigo etc... Vivirá para siempre. A parte que tú te buscaste esto, bueno de todas formas esto iba a suceder tarde o temprano yo mataría a tu novio.

- Sanzu... Quiero que lleves a esta chica a nuestra casa y la sala de castigos.

- Sano... No te atrevas maldito déjame ir con Naoto... - Dije llorando con la voz quebrada.-

- Yo había perdido mucha sangre debido a la herida que me había ocasionado Rindou Haitani, ya no podía mantenerme firme empecé a ver borroso lo último que recuerdo fue ver el rostro de Manjiro y sentir el cuerpo volviéndose frío de mi amado, me había desmayado...

- Mamá, papá regresaron, bienvenidos...

- Oh... Siempre tan linda y buena al momento de recibirnos.

- Obvio ustedes saben que son muy importantes para mí y los quiero mucho.

- Recuerda nunca perder esa nobleza y bondad que tienes, siempre se buena con la personas que te rodean hijita.