48

1.9K 158 90
                                    

T/n.

Faltaban solo semanas para la boda estábamos, Chris y yo escogiamos los últimos detalles lo ayudaba a escoger su traje pues el insistió en que lo hiciera.

- Se que es cómodo pero no quiero ser cualquier novio, quiero que nuestra boda sea especial, el negro es común — se veía al espejo con un traje de novio puesto.

- Tenemos azul, guinda, gris pizarra, y verde ceniza — dijo la asesora.

- ¿Que opinas? — Chris me miró.

- Honeyboo — dije desde el sofá frente a él. - También es tu boda, lleva lo que te guste y sea cómodo para ti — el me sonrió y bajo del pequeño escaloncillo donde se encontraba para besarme.

- Podría mostrarme el verde ceniza porfavor — pidió a la mujer y ella se retiró.

- ¿Estás emocionado? — pregunté al ver su sonrisa.

- ¿No se nota? — bromeó.

- Meh....solo un poco — seguí el juego.

- Estoy más que emocionado, me casare con la mujer más hermosa, a la que amo y con la que espero pasar el resto de mi vida, creo que emocionado es una palabra simple para no que siento..

- Bueno ahora te creo...— me levanté de mi lugar y me acerque a él, lo abrace por dentras mientras se veía al espejo, lleve mis manos a su pecho, el puso sus manos sobre las mías, tomo una de ellas y agachó la cabeza ligeramente para besar mis nudillos.

- Te amo panquesito...

- Perdón...— interrumpió la mujer con el traje en mano.

Espere en mi lugar mientras Chris se cambiaba, cuando salió del vestidor y se colocó frente al espejo, parecía contento al ver el traje en el.

- Me gusta — acomodo el cuello de la camiseta.

- Es increíble, luce bastante bien, se ve estupendo — sin dejar de mírame de arriba a abajo.

- Creo que es este...

- Si....yo también lo creo — estaba completamente enamorada.

- Porfavor...— Chris le dijo a la mujer, y con esa simple palabra ella comenzó a preparar un traje para que nos lo pudiéramos llevar.

Salimos del lugar tomados de la mano, pedimos a el chófer que nos transportaba llevará el traje a casa, mientras pasábamos tiempo en el centro comercial cercano.

Pasábamos por tiendas de ropa, donde Chris cumplió todos mis deseos en compras, los hombres que nos acompañaban cargaban tras nosotros distintas bolsas con libros, ropa, calzado, accesorios y joyería.

- Debo ir al baño — avisé mientras caminábamos por un pasillo.

- Claro, te espero aquí...

Llegue a a los baños, el de mujeres estaba cerrado y corrí con la suerte de que el de discapacitados estaba abierto, todo estaba impecable, dispensadores de jabón en espuma y lavamanos de ébano. 

Hice mis deberes y al salir encontré a Chris pegado a la puerta, por dentro, cuando me vio cerró el lugar con seguro.

- ¿Sucede algo? — preocupada al inicio, pero se acercó lento a mi, y puso sus grandes manos cobre más mejillas y beso delicadamente mi frente, para después apenas besar mi nariz, sus labios hicieron un muy ligero contacto con ella, y después bajo suave a mis labios, puse mis manos sobre sus muñecas.

- ¿Notas que estamos en un baño público? — hablé entre sus besos.

- Sabes que jamás hare nada que tú no quieras — besaba mi cuello.

ThreesomeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora