En sus garras ⛓️❤️ [En Curso]

†16† Un poco más loco.

Capitulo dedicado a: YusmairaFerrer
Gracias por el apoyo, preciosa, y por ser una hermanita para mí 🥺❤️

Monster

¿Qué me está haciendo esa chica de cabello castaño y de ojos brillantes?

Mi carácter dominante se ve afectado por ella, cuando sus lindos ojos se ven llenos de miedo. Miedo de mí y de lo que pueda llegar a hacer.

Sin embargo, no sería capaz de hacerle daño alguno. Por lo menos no físico. Sé que psicológicos le he causado muchos, pero tengo claro que jamás le haría daño.

Ella es todo para mí.

La manera en que me miraba cuando por impulso me le acerqué y tomé su mandíbula con fuerza, esa mirada me destruyó. Me hizo ver el verdadero monstruo que soy y del que ella teme. Y del que estoy seguro, no saldrá a menos que sea necesario.

Ya es fin de semana, llevo dos días tratando de evitar a Sandra a toda costa. Sinceramente, no es mi mejor momento. Jamás me había detenido a pensar en cómo mis acciones afectan a los demás, solo lo he hecho por ella.

Veo desde el balcón de mi oficina como ayuda a Maggie a sembrar unas plantas en el jardín, aún se ve tan hermosa con tierra en el vestido y su cabello enmarañado. Le sonríe a mí Nana, y luego toma ella misma la tierra con las manos y la pone encima del agujero que abrieron con anterioridad. Lo hace con delicadeza, tapando las semillas que plantó Margarita.

El vaso que sostenía, queda hecho añicos cuando pienso en como me gustaría estar cerca de ella sin causar ningún daño. Las mujeres escuchan el estruendo de los vidrios cayendo y enseguida miran hacia arriba, hacia el balcón donde estoy.

Sandy hace contacto visual conmigo, el cual sostengo hasta que ella baja la mirada y me señala al tiempo que le dice algo a Maggie. Esta última, alarmada, se levanta y sale disparada hacía dentro de la casa.

Sandy me vuelve a mirar y señala su mano y luego a mí. Quiere que vea la mía. Cuando lo hago, veo como la sangre gotea de cada dedo, haciendo charco en el piso. Y apesar de que el flujo de sangre es mucho, no siento nada. Absolutamente, nada.

Hago presión en la cortada para detener el derrame, no me duele pero tampoco quiero acabar como un esqueleto por la pérdida de sangre. Volteo a donde se encuentra Sandy, me doy cuenta que ya ni esta ahí y eso me frustra de sobremanera.

Escucho la puerta del despacho abrirse y a unos pasos apresurados hacia mí.

-Mijo, ¿En qué estabas pensando? -Maggie trae el botiquín de primeros auxilios y una expresión de preocupación.

Respondo en mi mente: «En como le estoy haciendo daño a la chica que amo».

Me indica que me siente en una de las sillas giratorias cerca del ventanal, y obedezco. Maggie se dispone a limpiar y revisar la herida de mi mano. El algodón empapado en alcohol arde en mi piel al contacto, pero me gusta. Después de un tiempo me he familiarizado con el dolor físico.