You are not trash [Cale Henituse] Trash of the count's family

Capítulo 5: [El cumpleaños de Zed Crossman]

Capítulo 5: [El cumpleaños de Zed Crossman]

Había pasado más de un año desde que llegó a ese mundo. En todo ese tiempo habían pasado muchas cosas, tuvo sus propias mini aventuras, consiguió buenos amigos y muchos más enemigos que ignoraba tener. Ya que mientras el tiempo más avanzaba, solo algo la distraía.

Por fin había llegado el momento, un punto de inflexión para la trama principal.

Estaba segura de que Kim Rook soo estaba en camino.

—Uf, creo que tendré un infarto. —Su corazón no paraba de latir como loco.

—¿Frey? — El príncipe heredero miro desde su escritorio a su segunda asistente, tenía la cara roja como un tomate.

—¿Estas enferma?

Enferma de emoción, pensó ella abanicándose con los papeles que revisaba.

Alberu negó con la cabeza cuando no obtuvo una respuesta, pasaba a menudo. Frey siempre estaba en su mundo, todavía no terminaba de concluir, ¿sospechosa o rara?

Como sea que fuere, aguantaba sus peculiaridades, halagos inoportunos y sus desvaríos llenos de cumplidos, desde que la productividad en su palacio creció magníficamente. Ni hablar de sus continuas propuestas para proyectos. Sobre todo, gracias a su magnífica asistente, se sentía siempre fresco como una lechuga, ya que terminaba su propio trabajo rápido y le ayudaba con sus deberes.

Si. Debía darle un aumento.

Miró brevemente el rostro ojeroso, ojos perdidos entre terminar de escribir y mirar la pared embobada.

También debía darle vacaciones.

—Su alteza~

Frey coloco frente a Alberu una carpeta mientras tomaba una gran pila de documentos sin revisar de su escritorio.

—No es necesario...—intento detenerla, su conciencia le pinchaba un poco. ¿Tanto le gustaba trabajar?

—No se preocupe, haré resúmenes para que lea en vez de perder su valioso tiempo en estas pequeñeces. Debería ir a merendar algo delicioso y nutritivo, leer un buen libro, caminar por el jardín, respirar aire fresco.

Frey se golpeó el pecho con orgullo.

—Mañana iré al palacio de la alegría a coordinar las mesas y la comida que se servirá, usted solo debe llegar y brillar en todo su gran esplendor.

Como ese discurso era una rutina diaria, Alberu no dijo nada. Su asistente era terca y no lo dejaría seguir trabajando. Se prometió darle un buen bono.

—Frey, esta reunión con los nobles es...

—...Importante. Lo sé, Alteza. Déjelo en mis manos.

El cumpleaños del Rey, Zed Crossman se acercaba, se celebraría un gran festival, pero antes una pequeña reunión con los jóvenes nobles. Evento a cargo del príncipe heredero.

Cale Henituse, no, Kim Rook soo haría acto de aparición.

Y cielos, tendría su primera interacción con el príncipe Alberu.

(...)

No pasó la gran cosa, solo trabajo como una maniática. Estaba sudorosa por el vestido que tenía que usar, extrañaba los pantalones de chándal y las camisetas de algodón. Por lo menos podía usar zapatos bajos, como no era una dama noble, no tenía un código de vestimenta que seguir. Pero eso no la libro del dolor de pies que ganó al ir de arriba hacia abajo organizando esa reunión para que Alberu se luciera en todo su esplendor.