CAPITULO 01

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Valentina.

Mi vida había dado un giro de 360 grados, y era como si viera 17 años pasar como un tráiler de alguna película, una película oscura, triste, en donde todo empezaba color de rosa, y de ahí, pasaba algo y la vida de la protagonista se venia abajo, así me sentía yo. Suspire pesadamente, al ver una foto de mi padre en mi mesa de noche, cada día lo extrañaba mas, eso era seguro. Enséñame a vivir sin ti papá. Fue lo único que pude decir. Habían pasado ya cinco meses desde aquel 15 de marzo, el día que perdí a mi padre, había sido un golpe más que duro, Sergio Zenere era un padre amoroso, dedicado, y todo se había ido con él, el mismo día de su muerte. Mi madre entro a mi habitación, haciendo que saliera de mis pensamientos, le sonreí fingidamente. Nadia Zenere había sido la más fuerte de ambas, y quien ha hecho todo lo posible estos cinco meses para sacarnos adelante.

—Hola linda, el desayuno está listo. —Le sonreí y asentí, bajé las escaleras detrás de ella y me senté en el pequeño comedor. — Te hice wafles y jugo de betabel, sé que te encanta.

—Gracias mamá, no tuviste que haberte levantado tan temprano, pude hacerme el desayuno yo sola. —Mi madre había estado trabajando todo el día todos los dias, y se le veía su cara cansada.

—Bobadas, ¿Lista para el regreso a clases? —Asentí. —Hoy llegare un poco tarde, trabajare horas extras.

—Mamá, yo también puedo trabajar, solo debes darme un permiso.

—No Valen, tu tienes que concentrarte en tus estudios, lo resolveremos, enserio te lo digo. —Le sonreí, termine mi desayuno y subí a lavarme los dientes, mi madre entro a despedirse de mi, y minutos después yo también salí de mi casa. Debatí por unos pocos minutos si irme caminando o irme en autobús, pero decidí caminar hacia la escuela, estaba como a veinte minutos caminando, y no era una mañana calurosa, me puse mis audífonos y caminé rumbo a la escuela. Al llegar pude ver a Karol bajándose de su coche, me acerqué a ella y nos saludamos con un abrazo.

—Valen! ¿Te has venido caminando? —Me reí y asentí, ella negó en forma de desaprobación.—No Valen, no hagas eso, yo no tendría problemas en pasar por ti, hasta me harías compañía. —Malena llego a nuestro lado, y nos abrazo, no las había visto mucho en vacaciones, puesto a que ellas habían viajado para disfrutar de días de descanso; y yo, por mi parte, me había quedado en mi casa, viendo películas, mientras trataba de estudiar un poco, no había tenido mucho éxito. Jorge llego a nuestro lado, me tomo por la cintura y me abrazo. Me tendió su mano, con un pequeño ramo de rosas, lo tomé y le agradecí con una sonrisa. No era para nadie un secreto que le gustaba, el me lo había dicho hace un tiempo ya, pero, a decir verdad, no era como que hubiera tenido cabeza para comenzar una relación, era el hecho de que no me gustara, si no el hecho de que mi cabeza era un mundo desde la muerte de mi padre, un mundo en donde no estaba lista para una relación, ni para nada, Sentí sus labios chocar con mi mejilla, sonreí levemente, saliendo de mi trance.

—Malen, creo que aquí sobramos.—El se comenzó a reír, en cambio yo, no pude evitar sonrojarme. entramos los cuatro a la escuela, y de ahí nos dirigimos al gran auditorio del colegio. Nos sentamos, y nos pusimos a escuchar el discurso de bienvenida. Este era mi ultimo año ya de preparatoria, y sabia que debía esforzarme mas que ahora para conseguir una beca para la universidad. La ceremonia concluyo, y nos fuimos al que seria nuestro salón, me senté en medio de las chicas. La directora entro, acompañado de un joven, alto, tez un poco morena, cabello castaño, ojos cafés, se veía muy joven. Nos lo presento como el nuevo maestro de ingles, las chicas y yo nos miramos, y es que a decir verdad, no tenia pinta de ser maestro, era guapo como para serlo. Se recargo en el escritorio, estirando sus piernas y cruzándolas levemente.

—Bueno chicos, buenos días, soy Michael Ronda como ya lo dijo la maestra, me gustaría saber cuales son sus nombres, algo que les guste. —Todos nos comenzamos a presentar, mientras el maestro nos hacía preguntas al azar para así presentarnos con él;

Jugando Con FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora