Capítulo 29

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29 | Cumpleaños amargos*


*Shawn*

¿Cómo decirlo...? Esta sensación de poder sentir sus labios...

El rosar de éstos con los míos es una mezcla de diferentes emociones.

Es un beso lento, el temor se puede sentir con cada rose, y está bien, soy su primer beso, pero quiero que ese miedo se vaya de ella.

Quiero que compruebe en un beso todo lo que no le puedo decir en persona, quiero decirle cuánto la quiero, y lo feliz que me hace poder estar junto con ella en estos momentos.

Dándonos un beso, nuestro primer beso, que está lleno de amor, un beso que nos provoca miedo.

Con el pasar de los segundos, puedo sentir como sus labios se abren más y más, aumentando el ritmo del beso.

Se está yendo su miedo, nuestro miedo.

Sin pensarlo mucho, pongo mis manos sobre sus mejillas y aumentó un poco más el ritmo, ahora teniendo mejor movimiento en los roses.

-Courtney... -María se separa unos centímetros, sus ojos aún están cerrados, y su respiración comienza a agitarse de más.

Me quedo en silencio esperando que ella siga hablando, pero eso no pasa, sus ojos comienzan a abrirse con lentitud y dos lágrimas bajan con rapidez.

No, no, no...

-Yo... -Sus palabras ni siquiera pueden salir ya, se ha quedado en completo shock.

-Te quiero, María. -Le digo tratando de calmarla mientras mis manos secan las lágrimas que ha derramado.

-Lo hice mal...

-¿Qué?

-El beso... Yo no te supe besar... -Baja su mirada apenada y yo la vuelvo a tomar de las mejillas.

-¡Hey, escúchame! Fue el beso más bonito y tierno que me han dado.

-Pero...

-Un beso difícil de explicar, pero fácil de entender.

-¿Qué quieres decir?

-Pude sentir tantas cosas en aquel beso, muchos sentimientos que me son difíciles de explicar, pero fácil de comprender.

-¿Entonces no te he decepcionado?

Fruncí el ceño y meneé la cabeza. -¡¿Qué?! ¡Por supuesto que no, ni siquiera un poco!

María iba a decir otra cosa, pero de nuevo fue interrumpida por la unión de nuestros labios, y esta vez, el ritmo en ambos era casi igual.

Lento y suave, pero ambos disfrutando cada rose y caricia que provenía del otro.

Haciéndome saber de nuevo cuánto amor había entre nosotros, un amor que poco a poco iba creciendo y se volvía más fuerte.



🌈



Los minutos se fueron pasando demasiado rápido, María y yo nos dimos un par de besos más después del primero, ella ya se sentía más cómoda y tranquila.

Colors - #1 ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora