1 | Un estúpido chico*01 de noviembre.
*Shawn Courtney*
¿Cuántas veces tuve que decirles a todos cuánto los necesitaba?
Muchas.
Y ellos sólo me ignoraban.
Jamás creí que la vida fuera tan difícil, o al menos, la vida de un adolescente.
Siempre me lo dijo mi abuela.
«Cuando crezcas, conocerás el verdadero significado de la vida».
Tal vez nunca pude entender sus palabras del todo.
¿A caso el verdadero significado de la vida era como pasaba conmigo?
¿A caso ser un tonto depresivo era como tenía que ser la vida?
¡¿Acaso era así, abuela...?!
El viento pega fuerte a mi cuerpo.
La gente me mira, todos tienen expresiones diferentes: unos me miran con horror, otros con preocupación, y el resto como si fuera un acto de comedia que pronto llegaría al clímax. Y a pesar de eso, no hacían nada para evitar que yo estuviera a minutos de suicidarme.
Es lo que hace todo el mundo, ignoran a los más necesitados.
Miré una vez más hacia el vacío, y volví a recordar el porqué estaba parado en la punta de un puente.
Necesitas paz Shawn.
Era lo que siempre me repetía a mi mismo.
Necesitaba paz y tranquilidad, quería escapar del mundo tan jodido en el que vivía.
-¡Hey no! -Una voz chillona se escuchó a lo lejos.
Miré de reojo hacia atrás, y me percaté de que una chica de baja estatura venía hacia mi dirección.
La ignoré por completo.
Sólo necesitaba contar hasta 10, y todo acabaría.
Uno...
Dos...
Tres...
—¡Hey! ¡No lo hagas! —La misma voz chillona se escuchó, pero ahora más cerca.
—Lárgate —respondí con indiferencia.
—¿Dame una buena razón por la cuál deba irme?
Fruncí el ceño y miré a la chica, mis manos se sujetaban con más fuerza los tubos del puente.
—Quiero morir.
—Esa no es una razón, sabes que si caes podrías morir... ¡No! Tú lo que quieres es paz, tú no necesitas morir para encontrar la tranquilidad que tanto deseas... Hay más soluciones. —Gritó la chica con su voz chillona.
—¿Quién eres? —La miré mal.
—Me llamo María.
—Bien, María, gracias por tus palabras que no me sirven de nada, ahora lárgate, tengo que terminar con lo que empecé.
—Sé que no lo harás, llevas más de 15 minutos parado, estás esperando a que alguien llegue y te diga «Eres demasiado grandioso para que mueras».
Abrí mi ojos en total sorpresa, ¿Quién demonios era esta chica?
-Sería una muerte dolorosa, ¿No ves la altura? Son más de diez metros, si tu cabeza no choca contra el suelo, tendrías fracturas irreparables, pero dudo que vivas, es una carretera sin semáforos...
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Colors - #1 ✓
Roman d'amour¿Cómo se puede vivir en paz en un mundo donde la depresión y ansiedad son los que dominan la mente de los adolescentes? Su color los hace diferentes y únicos, cada uno tiene una historia que contar. Shawn ama el azul, pues para él, aquel color signi...