🎙 16

423 52 2
                                    

Finalmente, los chicos lograron atar a aquel asesino como a un puerco, con las manos detrás y las piernas dobladas hacia atrás.

Karma sonreía, jugando con el arma de gas en su mano la cual lanzaba al aire y sujetaba repetidamente.

– Hm...Conseguí una carga de ese tipo de los venenos. Muy útil. Una lástima que sólo se usan una vez.

– ¿Cómo...? ¿Acaso viste venir mi ataque con el gas? ¿Es por eso que no lo respiraste? Todo lo que te mostré fueron mis manos vacías... ¿Entonces cómo?

– ¿Tengo que decirlo? Estaba alerta a cualquier cosa menos a manos vacías.

– ¿Hm?

– Estoy seguro que realmente quería una pelea sin armas...pero tenía que detenernos de cualquier manera –se sentó delante de él.–, y si fuera usted, habría hecho lo mismo. Tenía fe en que pelearía como un verdadero profesional...y eso por eso que estaba alerta.

Todos sonrieron.

– ¡Oh, lo entiendo!

«Karma-kun cambió...para bien», pensó Nagisa.

– Nunca había experimentado una verdadera derrota, pero esos exámenes le enseñaron muy bien –dijo Koro-sensei.– Los perdedores son personas como tú, tienen su propia vida, sus propios pensamientos y preocupaciones. Una vez te das cuenta de eso, te darás cuenta que es inevitable, y no volverás a tomar a un enemigo a la ligera. Ves que tu enemigo tiene sus propias motivaciones, y que están tratando duro igual que tú, y te das cuenta de sus habilidades, sus circunstancias. Alguien que puede estar alerta de su oponente...no deja la guardia baja en el campo de batalla.

«Has crecido mucho con esa derrota. Un día serás un gran hombre», pensó, mirando al pelirrojo.

– Hm –sonrió.– Parece que eres una fuerza que debe ser reconocida, joven guerrero. Podré haber perdido, pero disfruté nuestro tiempo jun-

– ¿De qué habla? –interrumpió. Él lo miró.– ¡La diversión apenas empieza! –enseñó dos envases, uno naranja y otro verde.

– ¿Hmm? ¿Qué diablos es eso?

– Wasabi y mostaza picante –sonrió.– Las pondré en su nariz.

– ¡¿Qué?! –gritó el asesino y los chicos.

Karma abrió una pequeña bolsa de tela con una calavera dibujada y sacó varias cosas: condimentos, clips, insectos de plástico, y demás.

– He estado alerta a su alrededor todo este tiempo, pero ahora que está atado, ¿Cuál es el punto? ¿Hm? Una vez que estén dentro cerraré su nariz con un clip especial, llenaré su boca de pimientos mil veces más picantes que los normales y entonces lo amordazaré. ¡Listo! –exclamó, al terminar de colocar los ganchos en boca y fosas nasales del asesino.– Ahora... –le acercó el pote de mostaza.– Es tiempo de que me muestre su fuerza de voluntad como profesional –metió la punta del envase en la nariz de aquel y apretó. Grip gritó.


Sus compañeros sólo lo observaban con sorpresa, y algo de miedo incluso.

– Koro-sensei... –llamó Nagisa.– Karma-kun realmente no ha cambiado mucho, ¿No?

– No, no lo ha hecho. Estoy un poco preocupado por su futuro.

– ¿Por qué trajiste esto? –preguntó Terasaka, guardando la bolsa de tela en su mochila.

[Tokyo]

Ken estiró los brazos, bostezando, y miró a sus amigos.

– Oigan, deberíamos irnos a dormir ya, ¿No?

Erotomanía 🎙 Karma AkabaneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora