REGALO.

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Este capítulo está escrito desde la perspectiva de HoSeok y fue durante los primeros días que JeonSoo se quedó con ellos, antes de entrenar con Taehyung. Sin embargo, hay un cambio de tiempo al final y una narrativa diferente.





«Y si pudiera salvarla lo haría, pero solo hay alguien que puede hacerlo: ella misma.»

Jung Hoseok:

JeonSoo llevaba una semana con nosotros y las cosas no habían cambiado mucho en nuestro hogar. Su presencia por primera vez se sentía cómoda y era algo que no me pasaba con cualquiera, su aroma, su pelo y esa voz no me molestaba y Taehyung tampoco parecía molesto en lo absoluto, más bien divertido e intrigado aunque no quiera aceptarlo.

Me preocupan ellos dos, su cercanía, aunque peligrosa, parecía ir en serio con todo: sus planes, sus vidas.

-Taehyung -lo llamé antes de que saliera con la chica a "entrenar". Era estúpido referirse de esa forma a lo que hacían cuando claramente era un acto para que las ganas de matar de Taehyung se sacieran de otra forma: persiguiendola.

Me miró inexpresivo como hemos sido el uno con el otro la mayoría del tiempo, por esa razón me preguntaba muchas veces el porqué no tenía las agallas de matarlo cuando era lo que muchos necesitaban. Quizás si lo necesitaba después de todo.

Una vez se acercó a mí una extraña sensación se asentó en mi pecho, como si supiera que nos quedaban pocos momentos y que alguno de los dos terminaría perdiendo la vida por nuestros actos. Sabía que nos buscaban, podría ser eso. Pero se sentía raro.

-No le hagas daño -pedí, era la segunda vez que pedía algo.

-No planeo hacerlo.

-No mientas -rodó los ojos mientras una sonrisa cínica se asomaba en sus labios. Lo conozco, tal vez más de lo que me gustaría admitir, pero al mismo tiempo lo suficiente como para quedarte y querer descubrir más. Estábamos rodeados de gente inestable y nosotros éramos los principales personajes bajo aquella definición aunque finjamos bien que tenemos todo bajo control-. Sé que intentas hacerle daño cuando obtengas lo que quieres, pero no lo hagas -se lo repetí antes y seguramente tendré que repetir otras veces en el futuro.

Asintió. Cansado de mis palabras.

-¿Algo más que decirme, hermanito?

-Cuida tu espalda -mi consejo.

Su sonrisa cambió a una ladina y puso su mano sobre mi hombro. -Para eso estás tú.

Esa misma tarde JeonSoo llegó con Taehyung herido y aunque mantuve la calma mientras lo dejaba en el sofá y me pedía que le ayudará una vez que salí de la cabaña en busca del doctor Min sentí que todo mi mundo alrededor comenzaba a desmoronarse, seguramente eso estaba pasando; las visitas con el doctor nunca terminaban bien. La última vez que fui me dijo aquello que no quería reconocer, pero que presentía y nunca más le di la cara al señor ese, padre de Min YoonGi.

El pueblo era pequeño y el bosque a su alrededor también lo era, para mí suerte todos los que yo definía como monstruos vivían entre los árboles y llegar a mi destino solo me tomo un par de minutos. Corrí para que así sea.

-¿HoSeok? -preguntó al abrir la puerta y yo sabía que él ya me venía venir desde la distancia, su casa estaba llena de ventanas. Otra forma de decirme que no confiaba en sus alrededores y, alguien que no confía en eso es simplemente para alguien que pudo haber estado en peligro o lo estará. Su esposa venía detrás, su semblante serio como siempre. Era ella tan amargada que nadie nunca la presentaba y era comprensible, una mujer así definitivamente no era agradable. Y no, no es machismo, sino porque en serio es desagradable.

Bad Dream | K;th #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora