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                                                                       Felix

Por una mierda, se supone que no vendría al feriado pero ahora estoy en el medio de muchas personas, mis ritmos cardiacos se han empezado a acelerar y claro que es algo de lo que debería preocuparme, después de todo los ataques de pánico dejaron de ser una burla desde hace mucho tiempo y dentro de mi solo quiero salir de aquí... ahora no tengo quien me pueda consolar en un momento así. Tome mi suéter que llevaba conmigo y comencé a caminar para irme en definitiva pero fui tomado del brazo.

- ¡Oh vaya! Así que no eran rumores, de verdad estas aquí.

Sebastian... el es... como una piedra en el zapato, famoso entre las chicas pero un idiota con cualquiera, ni una pizca de humildad y un clasista hasta los testículos. Nunca pude llevarme con el y no nos tolerábamos en la secundaria para nada, no me gustaba ni me gusta ser hipócrita así que guardaba la mayor distancia.

- Sebastian

- ¿Qué onda flacucho? Oí que fuiste de vacaciones.

- No fueron vacaciones Sebastian y agradecería que no me vuelvas a decir flacucho, adiós - me di la vuelta para seguir caminando pero volvió a tomar mi brazo y esta vez con mas agresividad. En mis épocas de secundaria nunca le tuve miedo pero esta vez... fue diferente, un escalofrió recorrió mi cuerpo y también comencé a temblar.

- Oh vamos, no seas niña y quédate o acaso ¿no me entiendes? Tal ves se te pego el chino... mmh ¿Cómo era? Konichiwua...

- Hola Sebastian - Era Mingi quien se comenzó a acercar y se interpuso entre nosotros - Te dire algo querido, el decir "no seas niña" no se acerca en lo mínimo a un insulto y bueno para empezar somos coreanos no chinos y el idioma en el que no tienes ni una puta pizca de conocimiento y que hablaste es japonés - Olvide por completo decir que Mingi era de las pocas personas que podía retarlo y por alguna razón nunca salieron a golpes, Mingi siempre defendió a quien pudo, era algo que realmente admiraba y de las cualidades de las que me enamore hace tiempo - Ahora que has escuchado mi charla ¿podrías soltar su brazo? - Se vieron a los ojos, los ojos de Mingi siempre me daban escalofríos cuando se trataba de discusiones. Sebastian soltó mi brazo y lo azoto de manera brusca.

- Seria una mierda que todo mundo supiera que eres gay... - Hablo Sebastian.

- Me harías un gran favor, Sebastian - Termino Mingi y tomo mis hombros simplemente alejándonos de ahí.

- Espera... Mingi... espera...

- Lo siento... ¿estas bien? ¿te lastimo? - inmediatamente tomo mi brazo y las marcas rojas de la mano de Sebastian se impregnaron ahí pero Mingi no estaba viendo aquello, de hecho no recordaba lo que había además de eso - Felix...

- Lo hago inconscientemente, solo son rasguños así que curaran.

- No debería preguntar por que no quiero presionarte a nada pero si quieres hablarlo...

- ¿Conoces algún psicólogo?

Mingi guardo silencio un largo rato pensando y en varias ocasiones trato de hablar per volvía a callar.

- Esta bien, después encontrare a alguien...

- En realidad si conozco - dijo rápidamente un poco nervioso - tengo una tarjeta en mi mochila ¿vamos? 

Asentí y comenzamos a caminar a paso rápido, cuando tuvimos su mochila saco de ella la pequeña tarjeta y me la entrego.

- Mingi...

Eres mi constelación - Chanlix - SKZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora