Viaje a Saturno

Ella te observa

Alonso"S Mind

Esa noche recuerdo no haber podido dormir, tuve una llamada de Karen, no, no preguntó por la estabilidad de mi amigo, la corrieron de su casa, su padre se enteró del embarazo, le dije que no podíamos esconderlo por mucho tiempo, no quiso escuchar otra alternativa que no fuese casarnos, el argumento? La vergüenza a la sociedad, los murmullos de nuestros compañeros universitarios, un niño con padres unidos

No encontraba las palabras para decirles a mis padres, a mis amigos ni a nadie el hecho de que sería padre tan joven, sin ninguna estabilidad propia, no tenía el apoyo de mi amigo con problemas de alcohol en esos momentos 

La casa estaba vuelta un caos, tocaba el pago de la renta y me encontraba en crisis por no saber ninguna novedad de mi amigo Leonardo

Marco"S Mind

Velé toda la noche en el lugar de Atenea y Dante, no tenía palabras para explicar lo que pasó esa noche...

El hospital se encontraba en un silencio profundo, no era paz, era solo la espera de miles de gente como nosotros. Cuando se me ocurrió caminar hacia el pasillo vecino, podía observar a lo lejos mi destino, la cafetera, una pequeña niña tomo de mi mano y susurró "Ella te observa", inmediatamente me gire hacia la voz y me pude percatar de la mirada de una señora la cuál se percató también que ya la estaba observando, era una mujer morena, alta y de un enorme parecido a Atenea, quise seguirla hasta que me percaté que ya no estaba aquella niña que me alertó. 

Sigo preguntándome, quién era esa niña y por qué desapareció tan repentinamente y lo más importante, quién era esa mujer y por qué me espiaba desde la esquina del otro pasillo?

-- Marco, velaste toda la noche, debes descansar - Mencionó Atenea poniendo una mano en el hombro de Marco

-- Atenea, tu crees en los fantasmas? - Respondió con nerviosismo

-- No, deberías dormir, comienzas a alucinar 

-- Anoche una señora me observaba mientras intentaba preparar un café, era tan parecida a ti - Mencionó Marco observando detenidamente a Atenea 

-- Cómo era? 

-- Como tú, pero más alta, vestía de blanco, no pudo ser una enfermera, no tenía pinto de serlo, solo, me observaba 

-- La seguiste? Qué te dijo? - Preguntó angustiada 

-- Trate de seguirla pero se percató de mi y se fue - Respondió curioso

-- Solo descansa, tal vez solo estabas demasiado cansado y te confundiste

En realidad, sabía que no me creerían, era absurdo la idea de ser observado por un fantasma, cuando regresé al pasillo donde estaban Dante y Atenea continuaba con el presentimiento de ser observado, necesitaba el consuelo de saber que estaba acompañado pero curiosamente no había nadie diambulando por el hospital, ningún niño, ningún eco, nadie más que yo en la espera de nuevas noticias