Capítulo 35

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Ninguno pudo dormir esa noche, al día siguiente nadie puso atención a las clases preguntándose quién llevó al bebé anoche hasta esa habitación 

"No hay nadie más en la casa, si alguien entró no pudo haber escapado, qué es lo que está sucediendo?"  Era la idea que a todos les pasaba en la cabeza, esa noche todos se quedaron en silencio, nadie salió de la casa y la tormenta nunca se detuvo 

Alonso"S Mind 

La idea de pensar que había vivido con una persona tan detestable me causaba nauseas, puse una cámara en nuestra habitación y una cámara en la sala del departamento, decidí no ir nuevamente a la universidad, observarla. Comenzaba a tratar con cariño a nuestro hijo diciendo que sería una gran niña

-- Es un niño, no podemos llamarle Milagros - Mencionó Alonso con seriedad 

-- No voy a pelear más contigo, he decidido ignorarte 

-- Karen, qué sientes por mi? - Tono de angustia

-- Creía amarte, pero me equivoqué, el peor error de mi vida fuiste tú - Dijo mientras salía tranquilamente por la puerta

-- A dónde vas? - Dijo Alonso con lágrimas 

--  A donde sea, pero lejos de ti 

Con tristeza me resigne a saber que jamás volvería a estar bien con ella, lo único que nos unía era una profunda amargura

Al final de las clases, Vanessa se dirigía hacia el cine, cuando le pareció ver a Amelia, la tía de Atenea correr con mucha urgencia, fue imposible no seguirla y con celular en mano la persiguió hasta la fuente de sodas donde con evidente precaución de no ser vista, entró 

Y entonces los vió

-- El helado de chicle siempre fue su favorito, hoy compré un poco para recordar mi objetivo, enloquecerla - Rió Amelia 

-- Debemos hacer algo, dijeron que no me traería problemas esto, esta viva y si no la eliminamos pronto, todos acabaremos en la cárcel - Dijo Karen mientras golpeaba la mesa

-- Yo estoy fuera, las únicas involucradas aquí son ustedes - Exclamó Alan

-- Yo no estaría tan segura, ya se te olvidó quien abusó de ella? - Dijo karen mientras apretaba de su mano 

-- Nadie tiene pruebas, en cambio a ti puede acusarte de intento de homicidio, porque fuiste tan estúpida de permitir que se arrojará por ese precipicio en lugar de pedirle dinero - Escupió Alan

-- Debemos mantener la calma, primero, dejar que las cosas se calmen, mi sobrina no es tan tonta y esto se esta saliendo de control - Mencionó Amelia

-- Es mi culpa por escuchar tus estupideces de venganza, debí haber escuchado a Atenea porque por tu culpa ahora estoy forzado a seguir - Dijo Alan, nervioso


Vanessa huyó del lugar con evidencia entre sus manos, cuando al cruzar la calle fue sorprendida por un carro quien inmediatamente le arrebató la vida

Viaje a SaturnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora