༄ Capítulo 16

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Los últimos minutos se la habían pasado entre besos y caricias lentas, ambos mimándose bajo las sábanas y riendo por cualquier tontería.

Hasta que los besos comenzaron a ser más profundos y los jadeos en busca de aire se hicieron presente.

Jungkook se sostenía de su cintura como podía, cerrando sus ojos con fuerza y suspirando entre besos, centrándose en la luz neón que reflectaba en sus párpados. Jimin ocupaba y opacaba su espacio personal, pero no le importaba, se dejaba hacer.

Mantuvo sus pensamientos y cuerpo sereno hasta que Jimin tomó asiento a su regazo, a horcajadas, y mandó todo a la mierda. Posicionó sus manos en los muslos del rubio y le acercó más a él mientras su rostro se ladeaba un poco para seguir fundiendo sus labios con los de Jimin.

Éste último se separó en busca de aire, dejando sus manos sobre su pecho para poder tomar algo de distancia, relamiendo sus labios hinchados y rojizos, abriendo sus ojos para deslumbrar el reflejo de Jungkook frente a él.

— ¿Está bien hacer esto? —Jungkook asintió despacio—. No quiero ir muy lejos y que te llegue a incomodar, estoy retractándome mucho.

Jungkook casi quiso bufar, mirándole a los ojos y sosteniendo sus mejillas para que le mirase directamente.

— No me importa una mierda nada más que tú y yo en este instante, así que no creas que me estás incomodando o algo por el estilo. —Murmuró con voz ronca y grave por los besos anteriores, mordiendo su labio inferior—. Haz lo que te apetezca hacer y no pidas permiso, suficientemente bien estoy para que termines por fundir los cortocircuitos de mi cerebro.

El más bajó rió amortiguado por la música, echándose en su pecho y dejando un beso ahí.

— Tampoco quiero ir muy lejos. —Murmuró—. Siempre he sido el típico chico que se han rifado entre unos cuantos, pero contigo quiero ir bien, quiero que lo hagamos lento y sea bonito.

— Hablemos del ritmo cuando estemos en ello. —Bromeó con segundas intenciones, Jimin golpeó flojo su brazo.

— Ya, idiota, me refiero a esto que tenemos.

Jungkook sonrió.

— Lo sé, Jimin, lo entendí. —Acarició su cabello con ternura—. También quiero ir lento y paso a paso, me gustaría llevarte a una cita antes de llegar al final de todo.

— También me gustaría. —Sonrió, acariciando sus manos y removiéndose sobre su regazo—. Pero hay alguien aquí abajo que piensa lo contrario.

El más bajo rió al sentir como una parte específica de Jungkook estaba encantada por salir a saludarle, mordiendo su labio inferior y desviando la mirada hacia su entrepierna de forma descarada.

— Lo lamento. —Se disculpó Jungkook avergonzado, suspirando—. Perdón, es que... ya sabes que hace mucho tiempo que no tengo sexo o algo parecido y es por eso que no aguanto nada sin... sin que pase esto.

Jimin negó con la cabeza con una sonrisa.

— No te preocupes, es algo normal, ¿sí? —Sonrió, mirándole enternecido, aunque volviese su mirada a ese lugar—. Pero no creo que te vaya a gustar irte de este modo. Podemos solucionarlo, ¿cierto? Como tú dijiste, si estamos juntos todo estará bien.

Lo último había sonado más a burla y eso había hecho que Jungkook riera un poco, sonrojado bajo las luces de neón que pegaban directamente en su rostro.

— Está bien, si es una propuesta indecente no voy a negarme a nada.

Jimin rió encantado, tomando su rostro para besarle profundo de igual forma que Jungkook sostenía su cintura y lo afianzaba contra su cuerpo, sonriendo sobre sus labios.

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