ELIXIR

CAPÍTULO 3- NOCHES COMPLICADAS Y CALIENTES.

Bajo a Éxtasis, y suena Arabella de Artics Monkeys.
Voy al guardarropas y elijo llevar un liguero con la palabra 'NO ', hoy simplemente voy a mirar sin participar de ninguna escena. Al contrario de mi, Sumisa Cherry ( el nombre de Cheryl en Éxtasis), se puso un pañuelo atado en su muñeca con un gran y negro 'SI ', aunque deba subir a trabajar en 5 milisegundos.

Camino por el lugar, y puedo descifrar que todos estamos en la fase de curiosidad, recorriendo el lugar, conociendo los elementos para sesionar, qué temáticas hay en los cuartos y demás.

-Éste lugar es fantástico Sumisa Kia - Me comenta Cherry mientras me observa confidente.

Otra de las reglas que tiene, es que todos los participantes deben poseer un sobrenombre. Por lo que de ninguna manera se expondrán los nombres reales de cada uno de nosotros.

- Lo es Cherry- Estoy orgullosa del resultado de la decoración. Yo fui la encargada de ello. Y debo decir que todo quedó exquisitamente bonito.

A la izquierda se encuentra una sala, que actúa como lugar común, donde se encuentran los sillones, y una mini barra con butacas.
A la derecha, está el guardarropas, a su lado, el cuarto donde se pueden conseguir más elementos de los que ya están dispuestos en las paredes de todo el lugar, siete sectores divididos por paredes vidriosas que posibilitan que quienes estén en uno de esos apartados puedan visualizar lo que hacen los del siguiente. Esta parte mayoritariamente es utilizada para aquellas personas que se consideran exhibicionistas, o que están vivenciando ese lado.

Al momento en que recorro el tercer sector, veo que está iluminado por una luz roja intensa, y hay una chica recostada en una especie de camilla, y un Amo, del que no puedo reconocer su rostro, que se encuentra vertiendo cera a goteo sobre los pechos de la sumisa, mientras la mano que no sostiene la vela negra, inicia su recorrido lento desde su tobillo, y asciende por su muslo hasta llegar muy cerca de su entrepierna pero antes de tocar allí, vuelve rasgando con sus uñas el mismo camino.

Me quedo concentrada en la escena, al igual que 4 o 5 personas más, porque sé que se siente. Ver caer desde lo alto la cera, la anticipación, sentirla endurecer sobre tu piel, y luego más cerca, tal vez incluso apreciando el calor de la llama.

Tocan mi hombro y veo a Dante divertido al notar que me sobresalto y que estoy apretando mis muslos.

- ¿Sumisa Kia?- Mira la situación que se desarrolla al frente- Interesante, la chica si que lo está pasando bien eh. ¡Ya quisiera yo no tener que estar trabajando para alguien tan egoísta que no me deja disfrutar de una bella mujer!

Le golpeo el hombro y lo miro mal.

- ¿Qué? ¿A qué podemos practicarlo nosotros después? ¡Por favor, hace mucho que quiero!

Dan no ha tenido experiencias reales en el BDSM, pero si que ha leído cada información que me ha llegado y que me ha parecido interesante.
Tengo suma confianza en él y en sus cuidados, pero también sé que es traspasar una barrera en nuestra relación.

- Dante, sabes que eso sería muy íntimo- Digo un tanto desorientada.

Yo esperaba que con el tiempo el ahondara más y consiguiera una chica con la que experimentar todas sus fantasías.

- Lo sé Kia, soy consciente de eso. Pero sabes que no hay otra persona con la que tenga la misma confianza y que quisiera probar. Además no es como si nos fuésemos a hacer novietes eh- Ríe jocosamente.

Lo observo seriamente. Ya que hace casi un año que no tengo una sesión.

- Por supuesto que no Dan, sabes que este tipo de vínculos no necesariamente requieren de ser una pareja romántica, o que duren años. Cada uno lo modela según lo que ambos deseen.