Tomé mis maletas y bolsos y caminé hacia el bus que realmente era grande. No esperé a Daniel, seguro continuaba ocupado.
Con una puta. Maldita bitch. Aggggggggg!
Adentro encontré a mis amigas al fondo. Ali me hizo una seña mostrando mi asiento junto a ella. Sonreí agradecida. De no ser por esas locas ya habría dado media vuelta rumbo a mi casa.
-¿Se puede saber dónde carajos estabas? -me dijo entre risas la rubia.
-Atorada en el baño seguro -rió Carmen.
-¡Que idiotas! -dijimos al unísono Brenda y yo.
Las cuatro comenzamos a reír automáticamente. Comentabamos sobre los chicos, algunas odiosas y luego de decir tontería y media estallabamos en risas.
Hasta que... los vi. Podría decir que mi corazón se rompió.
Holaaaa se que es corto prometo actualizar pronto. Los amooo!
