CAPÍTULO 61: "¿NO PUEDES RECORDARLO?"

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La voz de Luo Yi sonaba suave: "Por fin te has despertado, ¿todavía te sientes mal?"

"Mmm, dolor de cabeza, no he bebido tanto en mucho tiempo".

Luo Yi sonrió: "Iré a buscarte".

"Quiero dormir en casa de Luo Rui esta noche, soy demasiado perezoso para moverme, olvídalo".

"Ok, entonces te recogeré en Juxing mañana cuando salgas del trabajo".

"OK ...."

Wen Xiaohui recordó algo importante, "Luo Yi, esa persona ayer ......"

Luo Yi lo interrumpió: "No es conveniente hablar por teléfono, reunámonos y hablemos de ello, bueno". 

"De acuerdo". 

Luo Yi se rió ligeramente: "Me gusta la bici de carrera que me regalaste, pero es una pena que no tenga asiento trasero, si no podría llevarte a dar un paseo". 

Wen Xiaohui perdió la sonrisa: "¡Tsk! Otros se mueren por llevarme a pasear en un coche deportivo, y tú quieres cargarme en bicicleta, ¿tienes conciencia de ser un hombre rico?"

"Está bien si quieres que te lleve en un auto deportivo, iré a sacar la licencia de conducir ahora mismo".

"Oye estoy bromeando, también te ves muy bien en bicicleta".

Luo Yi susurró: "Realmente quiero besarte y abrazarte ahora mismo".

La cara de Wen Xiaohui se calentó al darse cuenta de que Luo Yi no era tan tímido como pensaba y que en realidad podría ser bastante atrevido. Tartamudeó, sin saber cómo responder, cuanto más tierna y ambigua era la conversación con él, más angustiado y culpable se sentía.

Luo Yi le dijo que descansara y luego colgó el teléfono. 

Wen Xiaohui sintió que la conversación había agotado toda su energía almacenada para el día, y se desplomó sobre la cama, con el pecho lleno de remordimientos y pesar.

Al día siguiente, Wen Xiaohui fue a trabajar sintiéndose incómodo, se tomó dos días de descanso seguidos, en una industria como la de ellos, donde las vacaciones no son fijas, no existe el concepto de doble día de descanso, además, no estaría bien faltar de nuevo.

En el trabajo, Wen Xiaohui estaba igual de desganado, se pasó todo el día acurrucado en la oficina, su cara tenía tan mal aspecto incluso Liu Xing pensó que estaba enfermo y le dijo que volviera a descansar. En realidad, no podía quedarse más tiempo, así que llamó a Luo Yi y le dijo que no tenía que venir a recogerlo, que él mismo tomaría un taxi.

¡Qué pase lo que tenga que pasar!

Cuando llegó a la casa de Luo Yi, vio de una el vehículo que le había regalado, aun estaba estacionada junto a la vieja bicicleta de Luo Yi, incluso, tenía puesto el candado. 

Cuando pensó en la primera vez que vino a casa de Luo Yi, hace más de dos años, recordó como Luo Yi aventó su bici al patio casualmente, diciendo que la seguridad era buena y que no tenía miedo de que la robaran. Ahora ese viejo vehículo seguía estacionado casualmente, pero sorprendentemente, la bici que le había regalado estaba con candado.

Wen Xiaohui sintió de repente que le dolía la nariz y estuvo un poco tentado a llorar.

Luo Yi abrió la puerta: "Hermano Xiaohui, qué estás haciendo afuera, hace mucho frío, entra"

Wen Xiaohui miró a Luo Yi y se acercó en tres pasos, saltando a sus brazos de inmediato.

Luo Yi se quedó atónito y lo rodeó con sus brazos, las comisuras de su boca se curvaron en una sonrisa.

MALDITA HERENCIA ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora