•|°' Usper ... otra historia más '°|•

•°|~Au Manny and chef ~|°•

Parte 1

Advertencia: Está historia es un AU basado en un manga que leí recientemente "Gochisousama", me gustó mucho pero al mismo tiempo me dejo con las ganas, demás que la temática(? me interesó uwu.

💋✨❤️Disfrútenlo❤️✨💋
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Era un día hermoso, el parque era decorado con flores que daban todo con su belleza.

Caminaba con calma admirando su al rededor, pocas veces salía a caminar, pero este día era especial para él, ya que tendría un picnic él solo.

¿Quién tiene picnics sin compañía? Tal vez solo él, pero no le importaba, vivía en un país que no era el suyo y no tenía amigos, ser extranjero no era fácil; buscar oportunidades era lo más complicado para él, pero estaba conforme con el trabajo de medio tiempo.

Con calma se sentó en el sitio elegido, debajo de un gran árbol lleno de césped bien cuidado al rededor.

—hay veces que es genial comer solo— saco las cosas de su mochila y comenzó a colocar los taperes y el tomatodo.

Después de organizar, empezó a comer y a observar a su alrededor.

Dió una mordida a su pan con camote frito —la gente se ve muy energética hoy— comentaba para si mismo observando a las personas jugando y corriendo —esto parece un festival, al parecer días como estos son escasos— continuo comiendo y relajándose  recostado en el tronco, disfrutando de la brisa, hasta que un llanto rompió su calma.

Al voltear con rapidez, pudo observo como un niño hacia berrinche por un helado a su madre, el llanto era irritante para él, y ni siquiera estaban cerca. Dió una mordida a su queque de plátano.

—los niños pueden ser tan irritante a veces, que bueno que me fui antes de que me presionen con lo de nietos, no creo poder cuidar a un niño— corto un trozo de su pollo — aunque si me pagaran tal vez.. agh ¿dónde está la ensalada?

—aquí esta— se escuchó un melifluo voz.

—graci- — cuando menos se dió cuenta, un hermoso niño de cabellos oscuros lo observa muy de cerca —¿Qué haces aquí pequeño?— pregunto retrocediendo de golpe, un poco asustado por su aparición.

—¿Uhm?—  inclino ligeramente la cabeza.

—que qué haces aquí? Tú mamá?— pregunto al verlo sentarse frente de él, con una confianza que daba miedo.

—yo no tengo mamá— contesto inocente; Miguel esperaba lo peor ante ese comentario, pero el pequeño no quitaba la vista de todo lo que él tenía en su picnic.

Tenía: pollo al horno, ensalada de papa con mayonesa (ensalada rusa), queque de plátano hecho a mano, limonada y fresas con arándanos.

Miguel observaba como al pequeño le brillaban los ojos al ver su comida ¿No ha comido en días acaso?

Después de ese silencio incómodo para él, respondió a lo que el niño mencionó —¿y tú papá? Parece que tienes hambre.

Él pequeño levantó la mirada y sonrió de oreja a oreja, asintiendo con entusiasmo —¿me puedes invitar, por favor?—

Dió un suspiro, el niño tenía modales, aunque mucha confianza —sabes que acercarse a extraños no es correcto ¿No?— se incorporó un poco para sacar la tapa de uno de los taperes.

—sí... Papá me lo dice mucho, pero huele muy rico— dijo mirando su almuerzo.

—esta bien, te voy a invitar, pero con la promesa de que no te acerques de esta manera a un extraño de nuevo— hizo una ligera sonrisa para entregarle la tapa con un poco de pollo troceado y un poco del arroz y ensalada.

—¡lo prometo con el corazón! ¡Muchas gracias....ahhh...— alargó pensando en nombre contrario.

—me llamo Miguel— dijo con gracia.

—!Muchas gracias Miguel¡— se sentó con emoción a su costado para empezar a comer con su cuchara.

El peruano dió un suspiro agarrando una bolsa y colocarlo en su mano para poder comer aunque sea su pollo; al parecer comer acompañado por un niño no era tan malo.

Lo observo de nuevo, se veía muy indefenso e inocente, además de tener buenos modales. En eso refresco la frase sobre su madre, así que el que lo educó fue su padre ¿Padre soltero? Al parecer era un grandioso padre al tener un niño así de disciplinado.

Cuando terminó de comer el niño, Miguel se acercó un pedazo del queque, el pequeño abrió sus ojos ante el postre —parece que eres un buen niño, ten es tu premio por prometerme y ser un niño educado— dijo con una sonrisa.

—muchas gracias Miguel— cuando estaba por agarrarlo, un grito los asustó a ambos. Miguel voltio con curiosidad escuchando como gritaban un nombre, logrando ver correr a un varón alto, muy atractivo, de pelos rubios y gafas de sol; era inmenso, de un cuerpo que se notaba que estaba bien formado, trago en seco cuando el señor caminó en paso firme hacia ellos, con notoria molestia.

Voltio a ver al pequeño, que no le importaba su alrededor, solo comía con mucho gusto, haciéndolo entrar en pánico; cuando regreso la mirada, tenía al señor enfrente de él.

—¡Papá!— chillo de emoción el niño, levantándose de golpe y abrazando al que llamo papá.

—Noha— suspiro en el abrazo — cuántas veces te dije que no te alejes de esa forma— abrazo con fuerza al pequeño.

Miguel se quedó quieto, no quería que lo mal interprete, así que estaba atento a lo que sucedería, analizo al señor y se notaba que estaba muy preocupado, apresar de que no se podía verse atreves de sus lentes.

—¿Qué hacías aquí honey?— se inclinó hacia él.

—estaba comiendo, él es Miguel y me invitó su comida— dijo feliz con las migajas en su rostro, haciendo que él lo limpie —Miguel cocina muy rico.

El papá del pequeño lo miro con detenimiento, sentía que estaba siendo juzgado para ser condenado a muerto o ser liberado, sonrió con nerviosismo.

El rubio suspiro en alivio—hace tiempo que Noha se entusiasmaba por comida, se me es difícil hacerlo comer, gracias—

Dió un largo y fuerte suspiro, fue tan ruidoso que hasta él mismo se sintió muy evidente su temor —gracias por no condenarme— dijo con tranquilidad y sonrisa boba.

—¿condenarte?JAJAJA— río cubriendo un poco la boca, una risa muy melodiosa, que combinaba muy bien con todo su ser —disculpa si te asusté, me llamo Erick— extendió su mano.

Miguel se paro de golpe —a-ah...— se quitó la bolsa y secó su mano con un secador que trajo consigo, mientras Erick esperaba con la mano extendida —mucho gustó Erick, soy miguel, me alegra que alguien aprecie mi comida— sonrió con amabilidad.

—al parecer Noha aún no termina de comer, disculpa te pagaré el almuerzo— dijo para sentarse junto a su hijo, que comía el queque de plátano sentado.

—no se preocupe, soy de comer mucho, pero esto no lo iba terminar igualmente, deja que coma, al parecer tenía hambre— se sentó un poco alejado de ellos al otro extremo del mantel.

Erick dedico una sonrisa encantadora, Miguel estaba seguro de que este hombre era todo un don Juan, ya lo olía.

—puedo quedarme con Miguel papi?— agarro del rostro a su papá, haciendo a Miguel reir ante lo dicho —él me gusta, papi— ahora era Erick el que reía.

Los niños era niños, y Miguel  cayó bien a este. Al parecer, nunca lo iba a soltar.

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/Sí, sí, lo sé, lo que dije antes de que tendría una historia Usper de sangre y justicia, ya viene pronto, pero me gustó mucha esta temática que no quería dejar escapar la inspiración, XD/

Chao chao 💋✨