En Otro Mundo

Anybody Seen My Baby? (Parte 1)

                    — Abre tu corazón, intenta arriesgarte y déjate llevar.

                    — ¿Hablas de esas idioteces de amor juvenil?

                    — ¿Sabes? Cuando me enamore de ella, siempre arriesgamos el uno por el otro. Ella no creía que era posible enamorarse, sobre todo de un robot. Pero el amor que te puede brindar un algoritmo puede ser igual de humano como uno. No pude creer que el amor era arriesgar todo, pensar en el otro y protegerlo, pero supongo que solo aprendiste la parte superficial del amor, que fue la euforia y el compartir momentos, pero, es más. El amor puede llegar hasta un punto álgido en que terminas haciendo evolucionar a tu pareja, pero por eso tendrás muchos problemas, pero que servirán para evolucionar la relación y lograras eso.

                   — ¿Eso quiere decir que amo de una manera inmadura?

                  — Cualquier humano ama de una manera inmadura, el punto es cuanto quieres evolucionar tu amor. Y el amor que desarrollaste con Connor fue el amor incondicional, eso quiere decir que mejoro un poco pero aun requiere evolucionar.

Akihiro abrió de nuevo el reloj de bolsillo y dio una mueca.

                   — Entiendo.

Cerro el reloj.

                    — Eres un cupido muy idiota, pero agradezco tu intención, llegaste a algo.

Se fue del lugar y fue que llegó a la habitación. Connor estaba con el peluche de pollo amarillo, al parecer lo había dejado afuera de la mochila después de todo. Eso dejaba con la sensación de culpa en Akihiro. De esta manera empezó a jugar con sus manos.

                     — Todos tus regalos me han gustado.

Connor levantó su mirada algo despistado, pero miró a Akihiro. Le dio una suave sonrisa.

                   — ¿Y porque solo el pollito?

                   — Porque necesitaba acordarme de algo que me alegara.

                   — Pero si casi no sonríes.

                    — El que no sonría no es símbolo de disgusto, solo que siempre he sido reservado.

                    — Bueno, sino fuera por tu belleza, al conocerte te creería alguien raro. Pero eres demasiado inteligente y yo me di cuenta de eso.

Akihiro se ruborizo suavemente y agachó su mirada. Connor notó eso y empezó a reírse, le tomo el rostro y lo miro a los ojos.

                    — A decir verdad, no creo que estes enojado conmigo, pero siempre me ocultas algo, conozco tu presente, pero no conozco tu pasado, siempre que te miro, eres pensativo, pero no me dices lo que piensas.

                    — ¿Y tu que sueles pensar?

                    — Pues antes de todo esto, pensaba en otro invento útil para la sociedad, pensaba en un robot dron que ayude a la gente mayor, sobre todo porque ellos no saben conectarse al mundo virtual y están solos. También pensaba en ti y como podría descubrir tus misterios. Aunque lo ultimo lo sigo pensando.

                   — Mis misterios... son cosas que nunca he dicho por mas de diez años. No he podido decirlo, solo usar algo para explicar todo.

                   — ¿Y lo tienes?

                   — No...

Connor lo miro y empezó a reírse.