El arbol de la inseguridad.

Capitulo 4:Primer dia Parte 1

Hilary Myers.

Las siguientes 2 semanas se han pasado muy rápido. Jacob ha estado viniendo a la mansión a terminar nuestra maratón de la franquicia de Marvel. Al principio pensé que era igual a Kane incluso que Brendan pero en realidad es todo lo contrario, tiene una coraza de niñito diabólico pero es muy dulce y tierno, pero solo con las personas que siente cercanas y me enorgullece decir que soy una de ellas.

Por otro lado Charles ha venido casi todos los días a visitarme y a cuidarme, igual no es que viva muy lejos. He intentado salir todos los días con él y por fin logramos llegar al parque. Siento que es un logro para los dos, para el por qué logró que saliera de mi cueva y yo por salir de mi cueva sola, acompañada por él, después de lamentaciones, llantos y ataques de pánico. En uno de esos vergonzosos intentos de ataques me encontré con la tripleta de idiotas, si hablo de los Cooper que siguieron de largo sin dignarse a mirarme.

Idiotas.

He considerado ir a terapia pero al recordar que tengo que,  prácticamente, 8atravesar la ciudad de New york para llegar al consultorio de mi psicóloga todo se derrumba y me conformo con tomar mis medicinas a tiempo.

—Hilary—mi madre toca a mi puerta.

—Pasa—restriego mis ojos estirándome en la enorme cama. Miro el reloj y me sorprende que la loca de mi madre me levante a las 6 de la mañana.

¿Se volvió loca?

Definitivamente.

—Venimos a despedirnos—mis dos desquiciados padres entran en mí habitación.

— ¡Enloquecieron!—exclamo en modo zombie— ¿Saben qué hora es?

—Las 6 de la mañana—responde mi madre como si nada.

—Bien zanahoria—Jake interrumpe nuestro duelo de miradas—Ya sabes a qué hora llegamos, si necesitas algo no dudes en decirle a nana y por favor cuídate—me da un beso en la frente y revuelve mi cabello.

—Y no olvides que tienes que estar en la mansión Williams a las... después del medio día que es cuando llega de la escuela—mi madre me abraza—No llegues tarde.

—Como si tuviera opción—mascullo entre dientes.

—Adiós y por favor cuídate, ¿Recuerdas los ejercicios de respiración?—asiento— ¿Empacaste tus medicinas?

—Mama prácticamente es al lado—dejo mis ojos en blanco.

—Jake ¿fue buena idea?—le dice a mi padre con preocupación—No fue buena idea, es mejor que te quedes.

—Tu misma dijiste que la interacción humana es muy importante para el desarrollo como persona, estaré bien—trato de sonar tranquila pero en realidad estoy aterrada—Si pasa algo te llamare y vendré directamente a casa.

—Igual no dejare de preocuparme maldita sea—parece que va a vomitar—Eres mi pequeña.

—No tan pequeña—le recuerda mi padre.

—Si, pequeña, porque ni siquiera a probado el alcohol, es un alma inocente—pellizca mis mejillas.

¿Inocente?

—Mejor vámonos antes de que sigas diciendo estupideces—mi padre entrelaza su mano con la suya —Adiós Larry, te amamos.

—Yo igual.

Y desaparecen para dirigirse a su trabajo. La verdad no se ni para que van si mi padre es el creador, por decirlo de esa manera, de la firma de abogados Myers y mi madre tiene su propio consultorio con más de 20 personas trabando para ella.