Sombras de Luciérnagas ✭☽ Jelsa ☾✭ (Cancelada)

❅ Capítulo 30 - Perdidos

//Mérida//

Un horrible dolor invade mi cabeza. Abro un poco mis ojos. ¡Dios mio! ¡Este dolor es peor que las golpizas del Señor Hans!

Mi vista esta nublada. Veo una cosa blanca. ¡Maldita sea! ¿¡Es niebla o qué!?

Trato de ponerme de pie. La cosa blanca desaparece. "¡Sí es Eugene o Elsa juro que les propinare una golpiza si intentan asustarme!"

Mi vista se enclarece. Lo primero que veo me llena de terror.

- ¿Qué demonios paso aquí?.- Logró decir al ver a todos los niños del Orfanato en el suelo. Todos inconscientes. En mi mente un recuerdo paso.
"Me comí los panqueques y Elsa nos advirtio de que no les daba buena espina... Después de eso todo se torno oscuro"

Sí. Es todo lo que recuerdo. Volteo a mi alrededor y no logro ubicar a Elsa ni a Eugene. Pero... es muy extraño que no este Eugene. De Elsa no me soprende, ella pudo haber escapado o algo así, por que además ella no comio ni un panqueque. Creo...

Y Eugene, tan tragon como siempre, sí comio panqueques. Se supone que él debería estar aquí, inconsciente. Que extraño.

Me dirijo a la puerta de la habitación. Cuando la abro tengo un objetivo "Escapar y ver a mi familia"

¿Los recuerdo? No. ¿Cómo le haré para verlos? No lo sé, pero algo se me ocurrira.

Cuando me encuentro caminando a mitad del pasillo, observe un jarrón con flores que estaba en una mesita. Me acuerdo que una vez casi rompo ese jarrón, ya me imagino la consecuencias que hubiera traido. Además de las golpizas del Señor Hans, tal vez me hubieran dejado toda la noche en el sembradío.

Ese jarrón es color blanco y tiene dragones rojos pintados. A Hiccup siempre le gustaron los dragones.
"Hiccup"

¡Vaya como pude olvidarlo! Él esta inconsciente en la habitación secreta.

No debía dejarlo sólo.

Cambie mi rumbo. Ahora me dirigía a aquella habitación. Cuando estaba acercandome ví que había una capa de escarcha en las paredes. Aunque todo estuviera en completa oscuridad, la luz de la Luna, que penetraba en las ventanas, ayudaba un poco.

Decidí seguir mi camino en vez de averiguar el por qué de la escarcha. Cuando llegué a la entrada (grieta) de la habitación, di un vistazo rápido atrás. Para cerciorarme de que nadie me seguía.

Entre a la habitación y me dirigí al colchón donde debía estar Hiccup.

- ¿Hiccup? Despierta... Debemos salir de aquí.- Pero cuando llegué al colchón, Hiccup no estaba.

- ¿Dónde estará?.- Susurre para mí misma. Dí un puñetazo al colchón.

Todos mis amigos habían desaparecido; primero Rapunzel, después Elsa, Eugene y ahora Hiccup.

- ¡Todo es culpa de Mamá Olga!.- Casi grite. Aprete mis puños y salí de aquella habitación. Iba a escapar de ahí y iria a buscar a mis amigos. Pero primero visitare un lugar importante: la cocina.

Sentía hambre. Demasiada. ¿Cuánto tiempo estuve inconsciente?

Llegué a la cocina y tome una manzana del frutero. La limpie y le dí un mordizco. Después salí de la cocina. Pero escuche un ruido. Como si se hubiera caido algo. El sonido procedía de la biblioteca. "Tal vez se cayo un libro o sabe..."

Me dirigí a la biblioteca. Cuando llegué a la vieja puerta de madera note que una luz emanaba de la grieta de esa puerta. ¿Habrá alguien ahí?

Tome la perilla y la gire muy despacio. Empuje la puerta con cuidado. Cuando entre a la biblioteca me escondí atrás de un estante. Lo hice por que ví una figura sentada y al parecer estaba leyendo. Me asome y con la poca luz que había, ví que era... ¡Hiccup!