- Llegamos.- Me dijo Jack esbozando una sonrisa. No me había percatado de que habiamos llegado; todo este tiempo estuve admirando el paisaje del cielo.
Cuando mis pies tocaron el suave césped, me sentí algo extraña. Aún seguía un poco mareada por la altura que sufrí. Cerre los ojos, esperando a que se pasara el mareo. Poco a poco desaparecia esa sensación. Abrí los ojos y mi visión se aclaro. Adelante de nosotros estaba un templo. Era muy grande y se veía antiguo, había vegetación en sus paredes.
Nos encontrabamos en medio de montañas verdes, enfrente del gran templo. "Esta muy escondido..."
Jack se adelanto y se asomo por la entrada del templo, yo aun seguía sin moverme. Después Jack se da media vuelta y me hace una ceña, indicandome de que entrara. Me acerque cada vez a la entrada, mientras admiraba con detalle todo mi alrededor. Cuando llegue a la entrada me percate de que la luz de Luna iluminaba el interior del templo.
Yo solo me limitaba seguir a Jack. Era lo único que podía hacer en este momento ¿No?
- Vamos a llegar al centro del templo.- Dijo Jack. - En esa área se encuentran diversas plantas; flores mágicas, hojas curativas, etc.-
- Entonces... ¿Es un lugar igual al pantano?.- Pregunte.
- Sí. La única diferencia, es que aquí no tiene el desagradable olor del pantano.- Sonreí dandole la razón.
Mientras caminabamos por el estrecho templo, vi algo que capto mi atención. En las paredes, cubiertas de musgo, habían cuadros. Me acerque a uno y con mi mano quite el musgo y las enredaderas. Era una pintura, el retrato de un rey. Estaba en mal estado; con agujeros y partes del lienzo desprendidos. Me acerque a otra pintura y le quite el musgo. Era un retrato del mismo rey.
- Te parece extraño ¿Verdad?.- Dí media vuelta y Jack estaba a lado mio.
- Sí. Retratos del mismo rey en un templo escondido.-
- ¿Te parecería más extraño que una bruja los haya pintado?.- Pregunto con una sonrisa burlona, sentía que me sonrojaba.
- ¿Estás bromeando? ¿En serio una bruja los pinto?.- Definitivamente ya todo es muy extraño y raro.
- Claro. La pinto a principios del siglo XIV.- Me espabilé. ¿Cómo Jack sabe eso?
- ¿Cómo sabes eso? ¿Qué eres un adivino? o ¿Me estás mintiendo?.-
- No, no soy un adivino, ni estoy mintiendo.- Dijo riendo.- Carlos me contó la historia.-
- ¿Don Carlos?.- Él asintio. Don Carlos sabía muchas historias, además de que siempre lo veía en la biblioteca del Orfanato, leyendo alguno que otro libro, mientras le daba sorbos a su taza de café. Así que no me sorprendía tanto de que él le contara historias a Jack.
- ¿Me podrías contar la historia?.- Pregunte mientras jugaba con mis dedos. Tenía mucha curiosidad. Jack asintió.
- A principios del siglo XIV, una bruja, llamada Madeleine, se enamoro perdidamente del princípe Henry II. El problema era que la bruja jamás captaría la atención del princípe. Madeleine entristecio y se fue a vivir a las montañas, después construyo un templo. Todas las tardes, Madeleine pintaba retratos del princípe y los colgaba en las paredes de su templo.
Un día Madeleine quería inventar una pócima, tal pócima haría que el princípe se enamorara de ella.
Pero los ingredientes de esta pócima eran difíciles de conseguir. Todos los días, Madeleine iba a las tiendas del pueblo, para ver si no vendían algun ingrediente.
Un día, mientras ella estaba en el pueblo, se entero que el princípe se iba a casar. Madeleine sintió mucha furia y tristeza. Ella cayó en un estado de depresión. En su mente escuchaba voces que le decían que matará a la prometida del princípe, ella se resistia, no quería lastimar a nadie.
Una noche todo salió de control. Su cordura se había roto. Madeleine se dirigio al palacio a escondidas, tenía escondida una daga.
Esa misma noche la prometida del princípe salió a dar un paseo nocturno. Cuando regresaba al palacio, Madeleine la ataco. Los guardias se alertaron por los gritos y fueron por Madeleine.
Lograron atraparla, pero ya era demasiado tarde, la prometida del princípe había muerto.
Madeleine fue juzgada y llevada a la hoguera. Pero antes de ser quemada lanzo una maldición; las frutas y plantas de aquel pueblo iban a ser peligrosas. Por eso en este templo estan las plantas con magia.- Nunca había escuchado esa historia. Contemple los retratos del princípe y me imagine como fue la vida de Madeleine. No sé, sentí lastima por ella.
- Entonces.. Una parte de la maldición es buena ¿No?.- Pregunte
- Sí, hay plantas mágicas que curan y otras que te devuelven la memoria. Pero lo que no logro entender es por que en el pantano del bosque de Oregón hay plantas mágicas. Madeleine nunca fue a ese sitio.- Me quede callada. Jack tenía razón, debería haber un motivo el cual explique por que hay plantas mágicas en ese pantano. ¿Un aldeano del pueblo, del siglo XIV, habrá sembrado plantas en ese sitio?
- Bueno dejemonos de tanto misterio.- Dijo Jack. - Mejor concentremonos en llegar al centro del templo.-
Mientras caminabamos, admiraba todo el lugar. El templo era muy grande, tiene varias grietas en el techo, donde se infiltra la luz de Luna. Me parecía un poco escalofriante el lugar, pero a la vez lo encontraba bello. Que ironía ¿No?
- Jack...- Lo llame en un susurro. - ¿Crees que este sitio esté maldito? ¿Qué tal si Madeleine lo embrujo o algo por el estilo?.-
- No lo creo Elsa. He estado muchas veces aquí y nunca ha pasado nada. Pero no te preocupes. Recuerda que yo te protegere y no dejare que nada malo te pase.- Me sentí más segura al escuchar eso.
Llegamos al centro del templo. Era un lugar hermoso.
Había una especie de jardín y al centro estaba la escultura de una dama. En el techo estaba un agujero, que dejaba paso a la luz de la Luna y alumbraba el lugar.
Vi algo en aquel jardín, me sorprendí. Eran hermosas, brillaban entre las plantas.
- Son luciérnagas.- Dije sonriendo. - Luciérnagas de verdad. No son Sombras de luciérnagas.- Afirme feliz.
- ¿Sombras de luciérnagas?.- Pregunto Jack dudoso.
- Sí, al tipo de luciérnagas de Don Carlos las nombre "Sombras de luciérnagas". Por que no emitian luz y tenían la semejanza de una luciérnaga.- Jack se acerco a mi lado.
- Sí, les queda el nombre.- Después señalo una planta. - Esa planta de ahí, te ayudara a recuperar tu memoria.- Él arranco una hoja de aquella planta, después me la ofrecio.
- Solamente dale un mordisco a la hoja.- Tome la hoja y la observe.
- ¿Tú no has pensado en comer de esta planta para recuperar tus recuerdos?.- Pregunte. Él lanzo un suspiro y metio sus manos en la bolsa de su súeter.
- Sí, una vez lo hice. Y ya sabes que paso, jamás funciono. Al parecer esas plantas están en contra de los inmortales.-
- Al menos descubrimos una parte de tu pasado.- Dije sonriendo. - Luego investigamos más o le preguntamos a Don Carlos a ver sí el se acuerda de Joseph Brown.-
- Tienes razón.- Dijo un poco animado.
- Esta bien... hora de recuperar mis recuerdos.- Le dí un mordisco a la hoja. "Espero que funcione..."
Sentí ardor en mi garganta y dolor de cabeza. Me puse de rodillas bruscamente.
- ¡Elsa!.- Me llamó Jack. Él se hincó, en frente mía. - ¿Te encuentras bien?.- Sonaba preocupado.
- Sí...- Respondí debilmente. Sentía que mi cabeza iba a explotar. Todo a mi alrededor se torno oscuro y mi torso choca contra el piso.
- ¡Elsa!.- Fue lo último que escuche antes de encontrarme en un sueño profundo.
..............-.-.-.-.-.
XD
(Hay una imagen del templo en multimedia)
~¿Don Carlos sabrá algo referente a "Joseph Brown" o Jack?
~¿Qué pasara después?
~ ¿Por qué las plantas/flores no hacen efecto en Jack?.....
Nos vemos en el próximo cap :3 y ya llegamos a los 7 k leidas y más de 500 votos :')
Enserio muchas gracias ^^ ♡
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Sombras de Luciérnagas ✭☽ Jelsa ☾✭ (Cancelada)
FanficEl miedo me consume desde que la vi aquella noche de invierno. ¿Las luciérnagas tienen secretos? ----------- Prohibida la adaptación o copia de esta novela. Inspirada en la novela literaria "Réptiles bajo mi cama"