El tranquilo y pacífico sueño del chico se vio interrumpido por la alarma que resonaba en toda la habitación.
Había dormido como nunca, estaba de buen humor y quería levantarse de la cama lo más rápido posible, lo más raro que había sentido en sus días de clase.
Todo era aburrido, si no tuviera a Tae Hyung en el mismo grupo, podría jurar que se volvería loco del aburrimiento, claro, tomaba sus clases, pero no le importaba mucho escuchar a la profesora de historia hablar sobre los emperadores a las 8 de la mañana.
Pensar en ello le hacía querer dormir de nuevo, pero un mensaje hizo sonar su celular impidiendo esto.
Tae Hyung
Ji-Min ah, pasaré por ti para ir
a clase, Jung Kook dijo que nos
esperaría calle abajo :D
✓✓
Bien, ¿Puedes subir a buscarme?
✓✓
Claro :)
✓✓
Si, ahora ya tenía claro que no podría dormir de nuevo.
Se levantó sin muchas ganas y tomo la ropa del uniforme para empezar a vestirse, entre sus movimientos torpes un recuerdo cruzo por su mente.
El festival de verano sería el viernes, en dos días más, ¿Cómo se suponía que debía bailar frente a ellos?, Para su mala suerte, la mayoría de las chicas de su clase estaban en danza, y una de ellas era representante de la clase, harían dos actos.
Los que no participarán, harían la escenografía, al estar en el club de danza, debía participar, aún que la principal del acto será Momo, no estaba seguro de hacerlo aún que faltaban dos días.
Le causaba pánico todo eso, pero también quería demostrar que tenía algo de talento.
Después de lavarse los dientes el timbre sonó haciendole saber que Tae Hyung estaba ahí, simplemente tomo su mochila y salió de casa para encontrarse con el moreno.
Tae—¡Ji Min!, A qué no sabes lo que ocurrió ayer.—su tono emocionado hizo despertar curiosidad en el más bajo.
Tae—Me quedé un poco más en el instituto, después del club, y escuché a el director y la profesora Ji Soo hablar sobre el equipo de baloncesto, Al principio no lo podía creer, pero estoy seguro de que no escuché mal.—Hablaba con un tono tan emocionada que perdió el aire.
Tae—Seong Ho Hyung está en el equipo de baloncesto, su primera práctica como equipo va a ser hoy, así que pensé en decírtelo, podemos ir a verlos después del club.—¿Qué?, ¿Seong Ho estaba en el equipo?.
Ji Min—Bien, será interesante ver a Hyung hacer algo fuera de lo común.—Sonrio despreocupado y salieron del elevador.
La conversación cambio y hablaban animados de un nuevo videojuego que había adquirido el menor, después de unas calles, se unió a ellos Jung Kook, que igualmente hablaba de un nuevo videojuego que había comprado, en concreto, el videojuego que compro al salir con Tae Hyung.
No iba a mentir, le ponía algo celoso la idea de que su mejor amigo estuviese saliendo demaciado con Jung Kook, pero también era su amigo, así que no podía hacer nada.
La conversación siguió hasta llegar a el instituto, aún que, había algo raro, dos motos en la acera, había tres chicos, dos de ellos se veían rudos y amenazantes, el otro, parecía más un lindo pastelillo.
Pero lo que para ellos era inusual y raro, para el azabache fue la culmine de su ira, el menor de los Yang en el asiento de copiloto le miro al nervioso sabiendo lo que pasaría.
La noche anterior, cuando regresaba de la cita con Ji Min, se encontró con un Jong In lleno de moretones en la cara, al parecer después de salir de clases, Yeol y otro simio lo habían perseguido hasta un callejón y lo golpearon, como venganza por la pequeña paliza de hacía unas semanas.
Jong—Hyung, ellos quieren provocarte, lo sabes, no caigas en esto.—Le tomo por el hombro haciendo suspirar al chico.
Sin hacer caso a el menor, salió del auto con su mochila a cuestas y una cara de total desagrado.
Yeol—Hasta que llegas, me cansaba de esperarte cobarde.—Si, lo grito llamando aún más la atención de los demás.
Seong—no te humilles solo, deja de llamar la atención aquí, ¿Qué mierda quieres?.—el fastidio en sus palabras llamo la atención de tres chicos más cercanos a el lugar.
Yeol—¿Lo que quiero?, Oh, claro, por qué lo que tú quieres no te recuerda ni un poco.—¿Qué?, ¿A qué mierda se refería ese estúpido?.
Seong—¿Jun Myeon?, claro que no me recuerda, si no, por qué estaría con alguien como tú.—su tono burlón hizo enfurecer al más delgado.
Jong—Deja esto así, tenemos clases.—trato de llamar su atención y jalo de su brazo sin resivir ningún avance.
Yeol—Jong In, deja de entrometerte.—lo empujó fuertemente haciendo que el menor se quejase.
Seong—Bien, vas a conseguir lo que quieres.—Dejo su mochila de lado y se despojo de la sudadera dejando solo su uniforme.
Sin dar tiempo a reaccionar tiro un golpe en el rostro del más alto y salto encima de el dejándolo en el suelo.
Sus piernas estaban bloqueadas por las de Seong Ho mientras esté daba repetidos golpes en su rostro con toda la fuerza que podía poner en cada uno.
Después de tres o cuatro golpes más, dos personas le tiraban de los brazos intentando separar sus puños del rostro sangrado de Yeol, que trataba de defenderse, pero la fuerza del chico parecía bestial.
Jin—¡Ya cálmate maldita sea!.—La voz del mayor de los Kim le hizo parar y se dejó alejar por sus hermanos.
Jun Myeon y el otro chico fueron rápido hacia Yeol y salieron del lugar, mientras por su parte Seok Jin y Jong In seguían manteniendo el agarre en el más alto.
Seong—imbécil.—Susurro entre dientes y labio su labio dañado.
Si, algunos golpes de Yeol habían conectado en su rostro, pero no era nada tan notable. Por otra parte, una gran ola de estudiantes estaban a sus espaldas, grababan y comentaban sobre lo ocurrido.
Jin—¿Y a ti que te ocurrió?.—pregunto directamente al poner más atención en el rostro golpeado de Jong In.
Seong—Ya pueden soltarme.—Les recordó con voz firme haciendo a estos reír.
Jin—esto te va a meter en problemas que no pienso solucionar.—Susurro antes de dirigirse hacia los demás estudiantes.
Jin—¡Bien, a sus clases, no hay nada más que ver aqui jóvenes!...
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• El chico del aula •
Fiksi Penggemar{ PAUSADA } Una nueva ciudad, un nuevo comienzo, nuevos amigos, claro, nuevos problemas y ¿nuevos amores?. Amor, era lo último que pasaba por la cabeza de Ji Min cuando sus padres le informaron que cambiarían de ciudad por el trabajo de su madre, e...
