Peter está realmente enfermo de amor por ti, y es la clase de persona complaciente que va a ir tan lejos como quieras para conseguir su objetivo, o al menos un poco de tu atención, ¿no es adorable?, en forma de pequeños relatos, ¡podrán disfrutar de...
Tras su encuentro anterior, Peter denegó obtener una nueva tutoría de tu parte, argumentando que no tenía tiempo, lo cual sonaba razonable, pero, lo que no te lo pareció fue que clase tras clase y día tras día parecía estar acercándose a ti a propósito, esto era más notorio en las clases que compartían, ya que día a día buscaba sentarse más cerca de ti como una especie de cuenta regresiva en la cual, cuando estuviera lo suficientemente cerca, morirías. Te generó esa sensación de una persecución entre líneas hasta que finalmente se detuvo, sentándose diariamente detrás de ti y vigilándote como a una presa muerta, y no era solo un sentimiento tuyo, ocasionalmente te dabas la vuelta al sentirte observada y efectivamente, te estaba mirando con los ojos muy abiertos pero sin alguna expresión, teniéndote temblando la mitad de las clases.
En el resto de tu tiempo escolar pasaba algo similar, sentías que Peter te estaba siguiendo, y aunque no era tal cual, te lo encontrabas en todas partes, casilleros, filas, caminando, ¿siempre había sido así?, tal vez siempre se mantuvo cerca, pero apenas te detuviste a notarlo, aunque podías jurar que esto de ser seguida era algo nuevo. Intentaste preguntarle, pero se negó de manera fría y a veces grosera a dirigirte la palabra ¿qué habías hecho para merecer esto?. Sin embargo, y por más terrible que fuera, ocasionalmente te parecía un gesto... lindo.
Parecería que planeaba desaparecerte de la faz de la tierra en cualquier momento, pero era todo lo contrarío, y es que ya lo había decidido, planeaba confesarse, se negaba a creer que lo rechazarías pero sus acciones mostraban otra cosa, todo este tiempo se había acercado precisamente con ese propósito, creyendo que en cualquier momento te diría lo que sentía de la manera más "casual"posible, pero no podía, las palabras se le borraban de la mente y reaccionaba de manera agresiva ante el más mínimo cuestionamiento, así que, solo se quedaba ahí, cerca de ti y observándote pero sin soltar palabra porque se pone demasiado nervioso y le teme al fracaso, como un perdedor.
Tras una estresante clase, sonó la campana para indicar el cambio de la misma, fuiste a tu casillero para tomar tus cosas, pero al abrirlo encontraste un sobre encima de tus libros y cuadernos, rodeado de pequeños corazones negros de papel y sellado con uno de estos, lo tomaste con curiosidad esperando que no fuera alguna clase de broma, mirando hacia tus alrededores por sí había alguien grabándote o algo así, al abrir el sobre, dentro se encontraba una hoja negra con texto blanco, te vino Peter a la mente de manera inconsciente, y no era para menos, el texto era un poema bastante... peculiar, con tintes góticos pero sobre todo eróticos dirigiéndose claramente a ti, combinación la cual no era muy buena, cerca de la mitad de la hoja el texto cambiaba su supuesto propósito, te exigía que fueras su novia al punto en el que era más una orden que rimaba en vez de poesía, en una esquina inferior de la hoja Peter había firmado.
Te quedaste en tu sitio, releyendo sin saber si moverte, unos segundos después, deslumbraste una sombra que se elevaba por sobre ti, dándole la espalda al casillero, te diste la vuelta en un sobre salto, era él.
—¡P-Perdón!
Escondiste la carta detrás de ti y te disculpaste, sin saber la razón de ninguna de las dos cosas. Peter se te quedo mirando con una expresión de frustración, sentías que quería que dijeras algo, ¿tal vez la carta no era suya?, viéndolo de tan cerca parecía un poco imposible.
Respiraste profundamente para relajarte—Entonces... solo para aclarar, ¿yo te-
—Me gustas —Te sobresaltaste tanto que intentaste ir haca atrás, quedaron en silencio un momento
—¿E-Esto es una clase de broma cruel?
—... ¿Te parece?
Se acercó más a ti, te sonrojaste dolorosamente, temblabas intentando contestar algo coherente.
—¿Sabes?, tengo, tengo una clase importante justo ahora y voy a llegar tarde entonces, debería, sí, debería irme ya
Empezaste a alejarte de él, pero al dar un par de pasos, te tomó de la cintura y te apegó a si mismo en un segundo.
—Se te olvida esto
Palmeó tu cabeza con un libro y un cuaderno, los había tomado de tu taquilla, que seguía abierta.
—Gracias
Los tomaste y guardaste, pusiste tu mano sobre la compuerta del casillero para cerrarlo, pero Peter puso su mano y presionó en vez de ti, su mano cubrió la tuya completamente, haciendo que una sensación cálida recorriera todo tu cuerpo, lograste escabullirte de entre sus brazos, en esta ocasión no opuso fuerza alguna para detenerte.
Mientras te alejabas corriendo, murmuraste como también te gustaba, y parecería una broma, pero él te escuchó, eran justo las palabras que quería escuchar. Por otra parte, una vez llegaste al salón y reorganizaste tus ideas, te diste cuenta de dos incógnitas, ¿cómo supo cuál era tu siguiente clase?, y ¿cómo supo que nunca agarraste tus cosas?.
Al terminar la jornada escolar, mientras salías en dirección a tu casa, Peter lo hizo a la par que tú, yendo a tu lado y por la misma ruta, no querías pensar que te estuviera siguiendo, pero después de un rato se hizo inevitable.
—No sabía que vivieras por aquí
—No lo hago
Eso te dio un escalofrío
—¿Entonces...?
Pareció no querer contestar —Bueno ¿qué clase de novio sería si te dejo andar por ahí sola?, tonta
Murmuró sin mirarte, jurarías haber visto un leve sonrojo en su cara a través de su cabello
—... ¿Novio?
Solo asintió, nunca habían acordado algo como eso.
—¿Desde cuándo...?
A punto de terminar, al tan solo mirarlo pudiste sentir una muerte segura si te dignabas a preguntar, consolidada por el puño cerrado de Peter que se elevó un poco, en realidad, era la primera vez que Peter te intimidaba intensionalmente, así que imagina lo tan terrible que pudo ser como para que te quedaras callada sin que él te dijera algo directamente.
—P-Podrías conseguirte una novia más linda
Murmuraste apenas audible y giraste tu cara inmediatamente, presintiendo un golpe venir a ti por hablar igualmente, cosa que nunca llego, por el contrario, su mano se acercó a ti de manera lenta y delicada solo para reordenar tu cabello detrás de tu oreja.
—Lo dudo
Aun con su mano cerca de tu oreja, movió la punta de sus dedos hasta tu mejilla en una caricia apenas distinguible y se acercó aún más a tu rostro, sintiendo el calor aumentar, era tan confortante que no quisiste moverte, de repente se acercó más a ti de manera rápida y brusca como si fuera a besarte, te quedaste congelada y cerraste los ojos pero después de un rato de quedar quieto a poco más de un milímetro de tu boca, Peter te sopló en la cara y se alejó para proceder a reírse de manera burlesca de ti, mientras te sonrojabas de la vergüenza.
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Poner la música de la pista superior mientras escribía fue una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida, los instrumentales de Heathers realmente me hacen sentir en los malditos 80's - 90's
Este es un poco más largo que los capítulos usuales, es una especie de recompensa porque probablemente estaré actualizando no tan frecuentemente como suelo hacerlo, ya me he atrasado un poco últimamente y no me tiene nada feliz.
