-Necesito que hablemos sobre anoche.
El beso.
Lo miro y muerdo mi labio inferior, atrapandolo entre mis dientes, él usa su pulgar y niega con su cabeza, pasa su dedo por mis labios lentamente y luego tira del inferior otorgándole la libertad que yo le estaba negando, mis sentidos se nublan, estamos cerca, bastante cerca y podría besarlo para dejar este estúpido juego de lado, lo quiero tanto pero no quiero que me vuelva a herir.
-No puedo dejar de pensar en ti, me estas volviendo loco y creeme que ese beso empeoró todo, me estas volviendo adicto a ti, estás haciendo cosas en mi como la primera vez..—su voz me nubla, miro sus ojos, su dedo roza mis labios.— eres como una droga y créeme que me estoy volviéndome adicto.
-Five..
-Dagmar ¡carajo! No puedo seguir así.— su mano izquierda atrapa mi cintura y me acerca a él bruscamente, suelto el aire de mis pulmones ante su acción, mis manos cuelgan a mis costados sin poder moverlas, su otra mano sigue en mi rostro, nuestras miradas cruzadas mientras el deseo crece dentro de mí.— te necesito..
Te necesito…
Five me necesita tanto como yo a él..
Miro a mi costado, desviando mis ojos de los suyos que todavía me miran, me percato de la hora y ya es tarde, me alejo de él, juego con mis dedos y luego con el dobladillo de mi vestido, me pone nerviosa.
Pienso en los pros y contras pero no necesito pensar demasiado, yo también soy adicta a él, lo sabía, pero no deseaba hacerlo notar.
Sin esperar un segundo más, lo beso, atraigo su rostro y nuestros labios chocan como dos autos a gran velocidad, calientes, húmedos y con sabor a menta, tabaco y café, mi favorito desde que lo probé.
Sus manos vuelan hacia mi cintura nuevamente aprisionandola y avanza hacia su escritorio, mi trasero choca contra este y abro mis piernas para luego proceder a sentarme, sus labios me devoran lentamente, seguro, sin prisa, su lengua pide entrada y gustosa acepto, esta misma recorre mi boca y ambas se encuentran en una batalla por dominar, él gana nuestra lucha, rendida devoro sus labios como si fueran mi última comida
Sus manos se posan en mis muslos y suben lentamente haciendo que mi vestido se arrolle en más arriba, gimo cuando hace presión en mi piel caliente y una de sus manos aprieta mi cuello.-Dami, voy a follarte tan fuerte que será una fortuna si puedes caminar luego..
Sus palabras me hicieron derretir, no dije nada y sonreí contra sus labios, nuestras respiraciones eran herráticas, frenéticas.
Me suelta y me jala de la mano para ir a su cuarto, mi entre pierna arde y siento pequeños espasmos en ella, mis bragas estan tan mojadas y pecho sube y baja rapidamente, siento mis pezones ponerse duros contra mi vestido.Al llegar ataca mis labios nuevamente y la sensación de necesidad vuelve a mi, juega con el dobladillo de mi vestido y empieza a levantarlo haciendome alzar mis brazos para que pueda quitarlo, ahora estoy con mi ropa interior ante él, imita mis acciones y se quita la camisa junto con los pantalones quedandose en tan solo boxers negros, ajustados, su erección quiere salir y me muerdo los labios al verlo, abdomen, pecho, brazos y manos, este hombre esta tallado por los putos dioses griegos.
Me toma de la cintura y me empuja hacia su cama, se trepa encima de mi y queda entre mis piernas, su centro choca con el mio y gimo al sentirlo tan duro contra mi, sus manos no pierden el tiempo y rompen mi brasier para luego arrojarlo hacia algún lugar en la habitación, toma mi pezón entre sus labios y lo muerde bruscamente haciendo que un jadeo salga de mi boca abierta, hace lo mismo con el otro y lentamente baja sus besos hasta mi vientre, mis dedos se enredaron en su cabello, su boca hace un camino y besa mi coño por encima de la tela negra, obviamente mojada, mis mejillas arden y lo necesito, mis manos empujan su cabeza haciendole saber lo que quiero, sonrie y con su dedo en forma de gancho baja mis bragas, levanto mis caderas y rapidamente la tela desaparece de mi campo de visión, abre mis piernas y deposita besos por mis muslos internos hasta llegar a mi sexo donde hace una larga lamida desde mi agujero hasta mi clitoris palpitante, recoge toda mi lubricación con su lengua mágica, la sensación me hace estremecer, mis dedos abandonan su cabeza y se enroscan en la sabana, apretandola con fuerza, mis ojos se cierran cuando su lengua hace lo justo en mi manojo de nervios, dos de sus dedos me embisten con dureza, este hombre va a matarme con esos movimientos, gimo sintiendo un nudo formarse en mi estómago, la presión es mucha y necesito correrme, estoy en el cielo.
-¡Mierda!.-grito cuando sus dedos hacen una señal de "ven aqui" dentro de mi, me retuerzo y mis piernas tiemblan, el nudo en mi vientre se retuerce cada vez más y se que estoy cerca, muy cerca.
-¡Carajo Dagmar! Sabes tan jodidamente bien…
Me alaga mientras su aliento golpea mi coño, gimo su nombre y me deshago, mis jugos corren por sus dedos y los saca para acto seguido llevarselos a la boca, los chupa hasta dejarlos limpios y sin dejar que me recupere saca sus boxers en un santiamen y se alinea en mi entrada para luego empujar.
Me penetra con dureza y mis gemidos se vuelven numerosos, él jadea al notar lo apretada que estoy mientras su mano se sostiene al respaldo de madera de su cama tamaño king, sus embestidas son fuertes y profundas, puedo sentirlo en mi estómago y no exagero, mi mano izquierda atrapa mi pecho y pellizco mi pezón pero él me besa bruscamente y con una de sus manos toma mi cuello, aprieta y luego me abofetea, el dolor me hace sentir en las estrellas..
-¡Carajo Five! Justo allí.- Su punta toca mi punto dulce y me siento en el cielo, estrellas, galaxias, millones de puntos brillantes, embiste y embiste mi cansado cuerpo hasta que su liberación llega, sale de mi y se arrodilla, al parecer esto no ha terminado.
Me toma por las caderas y me voltea, me apoyo en mis rodillas y mi pecho es empujado hacia abajo, estoy en cuatro, completamente expuesta a él. Entró en mi y en este ángulo se sentía, más grande, se empuja contra mi y grito de placer contra las sábanas, siento como destroza mi interior, toma mi cabello, brusca y rápidamente jalando hacia arriba haciendo que mi nuca se apoye en su hombro, gritó y gritó de placer cuando sus dedos empiezan a dibujar círculos duros en mi clítoris, mis brazos suben y rodean su nuca mientras se hunde en mí, el único sonido es el de nuestras pieles juntándose, jadeos y gemidos, gritos también.
-¡me voy a correr!.
Advertí y me empujó hacia abajo nuevamente, tomó mis muñecas por detrás de mi espalda y las apretó con su mano mientras mi rostro se estrellaba contra las sábanas, duro, sin piedad, así me estaba follando Five, como si me odiara.
-¡Correte pequeña puta!
Y así lo hice, el nudo en mi estómago se deshace nuevamente y tiemblo mientras siento su semen llenarme.
Caigo exhausta y me acomodo en su cama, siento mi cuerpo temblar y mis piernas débiles, Five hace lo mismo y cae a mi lado. Volteo mi visión hacia el reloj de su mesita de noche y me doy cuenta de que son las 10 pm.
Estuve follando por horas con Five, me folló contra cada mueble de su habitación hasta que ambos nos quedamos dormidos, no nos despertamos hasta el día siguiente...
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Adicción..
Romance-Esto se ha vuelto una adicción, follarte es mi nueva adicción... -Five, por favor, fóllame..