Capítulo #3:

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Capítulo #3: "La protección"

Aarón y Nick llegaron al hospital con la respiración acelerada de correr hacia este. Por unos segundos nadie entendía que sucedía pero al ver a la pequeña y sibilina Alice corrieron hacia ella. La doctora de esta mañana se acercó a los brazos de Aarón.

— ¡¿Pero que ha pasado?! — se apresuró a preguntar tomándola en sus manos y llevándola hacia una camilla.

— Estaba corriendo y cayó, tiene los latidos muy débiles — aviso Nick al ver a Aarón tan afligido solo mirando hacia los brazos de su hermana.

— Es una bajada de tensión — aviso la doctora al revisarla un poco más — Tráiganle algo de desayunar, algunas proteínas Nick y un jugo con bastante azúcar — continuó ella haciendo que ambos se movieran hacia la cafetería del hospital.

— Esto es mi culpa — dijo Aarón cuando se encontraron solos, pero Nick sabe que eso no es cierto. Aún así no dijo nada, no tiene cómo refutar las palabras de Aarón. Se limitó a colocar una mano sobre su hombro y seguir caminando hacia la cafetería.

El rubio pasó la mano por su cabello despeinando su cabello y sintiéndose imbécil.

<Puse en peligro a mi hermana> aquel pensamiento se repitió en su cabeza una y mil veces. Todo a su alrededor se desvaneció cuando Nick se separó de él. Aún así su rostro no expresaba absolutamente nada, quizás es la costumbre o todo lo que ha sufrido lo que lo a obligado a convertirse a una máquina sin saber expresar emociones.

Los sentimientos de Aarón pasaron a ser cada vez más cargados de culpabilidad, al punto de querer correr hasta su casa y dispararse en el movimiento. Todo a su alrededor se volvió oscuro y siento que desaparecía del planeta.

Nick miro hacia Aarón y lo encontró en una esquina separado de todas las personas. Sin expresión en su rostro, con las manos acariciando su cabello y sus ojos cerrados. Se siento pequeño, sin saber que debía hacer, pero hizo lo que él hubiera querido que alguien hiciera.

Se acercó a paso apresurado con la orden de la doctora en su mano, tocó el hombro del chico más extraño de todo Beltrán. Como si le hubieran roto su burbuja de escape Aarón abrió los ojos abruptamente mirando los ojos azules del pelirrojo y sintió que se perdía en aquel cielo.

— Vamos, tenemos que llevar esto — le informó Nick.

Ambos caminaron por el pasillo sin dirigirse la palabra, pero esta vez Nick no soltó el hombro de Aarón ni por un segundo.

Cuando ambos llegaron junto a Alice esta tenía los cachetes pálidos pero los ojos azules bien abiertos.

— Estoy bien — aviso a los doctores cuando intentaron ayudarla a ponerse de pie. A Alice jamás le gusto que la tratasen como si fuera susceptible. Por eso su amor tan profundo hacia su hermano, porque el siempre la hizo sentir como cualquier niña normal y no enferma.

También por la misma razón odiaba a su padre. Porque desde que se enfermo nunca vino a verla y la abandonó. Siempre se disculpaba diciendo que tenía mucho trabajo. Pero nadie, absolutamente nadie trabaja tanto como para no tener una hora libre como para no visitar a su hija.

Alice bebió el jugo que Nick le entregó y agradeció tanto dulce, porque ella lo amaba. Comió también todas las cosas que le obligaron y pronto se llenó.

— Me preocúpate, enana — Aarón se agachó hasta llegar a su altura y Alice se sintió mal por haberlo sentir así.

— Soy fuerte hermano, no me perderás por una bobería cómo está — insistió ella para ayudarlo a mejorar.

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