I thought heaven can't help me now
Nothing lasts forever, but this is gonna take me down...
Magnus POV
Magnus se balancea de donde está agarrado, y observa como el Hombre Araña hace lo mismo desde su red, en una ventana que está al otro lado del edificio. Esta seguro de que la Araña sabe que el Gato esta ahí, él sabe sobre el sentido arácnido de la Araña.
Aunque esta noche parece demasiado ocupado como para intentar detener a Magnus. Lo que le decepciona un poco, ya que le encanta que la Araña lo persiga.
Así que deja de jugar, y salta sobre una ventana abierta, aterriza sin hacer sonido, y camina hacía la cocina. Los trabajadores del lugar inmediatamente levantan las manos al verle. Magnus solo alza las manos, mostrándoles la puerta de salida.
Todos obedecen en silencio, saliendo uno por uno, hasta que la Araña aparece en la ventana.
– Gato, – le dice, los últimos trabajadores se emocionan por verle, levantando la mano para saludarle, mientras terminan de salir por la puerta.
– Araña, – le contesta Magnus, acercándose un poco a su superhéroe favorito. – ¿Qué hace un chico como tu en un lugar como este? –
– Se supone que Lilith hará una entrega esta noche. Pensé en detenerla en el acto, – la Araña le contesta, conteniendo la respiración, cuando Magnus toca su pecho con su mano enguantada.
– Estamos aquí casi para lo mismo, entonces, – Magnus murmura, caminando alrededor de la Araña para asomarse por la pequeña ventana, contando el número de matones que se encontraban en el bar. Al menos unos doce acompañaban a Lilith, quien estaba cerca de la puerta.
– No pareces alguien a quien le interesen las drogas, – la Araña le dice con diversión, acercándose a Magnus, quedando detrás de él para también poder ver por la ventana.
– Oh no. Lilith ha estado contratando ladrones para hacer su trabajo sucio. Y no me gusta que ensucien mi territorio. Así que pensé en hacer una escena, causar un poco de caos, dejar mi mensaje en claro, ya sabes. –
Bueno, y también aprovechar para robar algo, algo que Lilith tenía en ese momento. Pero la Araña no necesitaba saber esa parte.
– Hay ocho más afuera, además de los dos guardaespaldas personales, – la Araña le dice, estirándose para prepararse para la pelea. – Creo que podemos con todos. –
– ¿Podemos? – Magnus pregunta, divertido. – Suena como que necesitas mi ayuda. –
La Araña se encoge de hombros. – Pensé que, ya que estás aquí, y tenemos motivaciones similares... podríamos ayudarnos. –
– Yo no estoy aquí para detener un cartel de drogas, – Magnus le dice. No es como que le agrade la línea de trabajo de Lilith. Magnus era un criminal, pero un criminal con clase, con estándares. Así que no tenía interés en meterse en ese lío. Esa noche no tenía ganas de lidiar con policías o detener un cartel de drogas de la reina.
– No, pero es obvio que no te agrada su trabajo, – la Araña le dice, y Magnus le mira mal, sorprendido de que sea capaz de leerle así.
– No, no me agrada, pero yo no soy un superhéroe como tu, – Magnus le dice.
– Podrías serlo, – la Araña le dice, dándole un golpecito en su hombro con el suyo.
– Eso es dulce. Estúpido, pero dulce, – Magnus le dice. El no tiene ni un hueso de superhéroe. – Pero supongo que golpear algunos drogadictos contigo puede ser divertido, ¿vamos? –
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El Gato y la Araña (MAlec AU)
PertualanganLas aventuras entre Alec Lightwood, el amigable vecino Hombre Araña, y Magnus Bane, el famoso ladrón reconocido mundialmente, el Gato Negro, y sobre como poco a poco se va formando una bonita historia de amor en los tejados de las oscuras noches de...